EL INANIMADO QUE SIENTE - MIRACULOUS LADYBUG

PENSAMIENTOS

Me quede con mi mamá, la mire y me quede desconcertado. Si mi papá era shadowk moth, todo este tiempo luche contra él. ¿Qué se supone que haga?

—Adrien— dijo Plagg serio apenas entré a mi cuarto

Lo mire y por su reacción sé que no tuve la mejor de las caras, pero aun así siguió

—¿Vas a decirle a Ladybug?— me devolvió una mirada dolida

—Ahorita no puedo, Plagg. Sabes que: la verdad es que no quiero.

—No tienes que hacerlo tú. Yo puedo avisarle—

—Si derrotamos a mi papá, ¿qué familia me va a quedar? —

Plagg se quedó callado, se metió a mi chaqueta y empezó a comer queso.

—Y cómo piensas que debo contarle a Ladybug la identidad de Shadow Moth sin que ponga en evidencia quien soy.

—Adrien, esas son solo excusas. Está bien si no puedes decirle aún.

Me quede callado

—Tienes razón, Plagg. Pero no creo que ningún día pueda contarle. Mi papá confió en mí al decirme su identidad. No puedo traicionarlo. —

—Adrien, el hecho de que te dijera o "confiara" no significa que tienes que estar de acuerdo con él. Simplemente has lo que creas mejor.

—Es que, Plagg, es complicado.

Este asintió con su cabeza y siguió comiendo

—Plag, ¿podemos fingir que no sé nada y simplemente hacer lo mismo que siempre mientras pienso qué hacer?

Me miro indiferente y siguió comiendo

Me dolía el pecho y la cabeza. Me eche mientras pensaba que al fin, después de mucho tiempo, tenía una respuesta. Más que repuestas, al fin mi papá se empezaba a abrir y a dejarme entrar a su vida. Lógicamente quería sentirme bien, sentirme feliz de que al fin algo está cambiando. Pero por alguna razón me sentía mal.

De pronto escuche un tosido muy familiar. Fue como viajar en el tiempo y ver débil y enferma a mi madre con sus débiles sonrisas diciendo que todo estaba bien. Sabía que era Natalie la que tosía, pero no me quitaba esta horrible sensación. La necesidad de estar junto a esos pasos débiles rondando por la casa. De dejar de estar acá encerrado sin hacer nada.

De pronto me vi y estaba yendo al cuarto de Natalie. Con un miedo de que me deje y que me encierren otra vez mientras todo pasa. ¿Por qué siento esto si Natalie no esta tan enferma como mi mamá?

Me pare en la puerta. Intentaba respirar profundamente porque estaba muy intranquilo pendiente del origen de esos débiles pasos. Apenas supe de donde provenían, fui a ayudarla.

—No te preocupes, Adrien. Estoy bien. — Dijo Natalie sobreponiéndose

Me entro un horrible escalofrió. Era exactamente lo que me decía mi mamá. Me dolió verla así.

—¿Puedo entrar? —Pregunte cuando llegamos a su puerta

Me hizo una seña para que entre y me pregunto

—¿Hablaste con tu papá?

—Sí. ¿Natalie, tú ya lo sabias?

—¿Qué cosa?

—Del pasadizo secreto, de la otra identidad de mi padre, mm no sé. Sabía que mi papá guardaba sus secretos, pero nunca me espere esto.

—Supongo que ya te dijo que él es Shadow Moth.

—Sí— afirme

Me acerco con su brazo

—Qué alivio, era hora de que te dijera. —Y me sonrió.

—Natalie, se supone que lo que hace mi papá está mal. Akumatiza gente, pone muchas vidas en peligro, amenaza. ¿Por qué lo hacen? ¿Por qué lo apoyas, Natalie?

—De seguro ya sabes del poder absoluto y el deseo que tiene tu padre.

—Sí

—Ya te imaginas que no todo es tan color de rosa si Ladybug y Cat Noir lo quieren detener. Bueno, tal vez tu papá no te dijo que hay un precio que pagar si queremos revivir a tu madre. Al usar este poder siempre cambies lo que cambies tiene que haber equilibrio. O sea que si revive tu mamá otra persona va a morir en su lugar.

—Pero es injusto y egoísta.

—Sí, es egoísta. Pero prefiero mil veces ver a otra persona muerta que a tu mamá o a ti. Ante esa adversidad tu papá pensó en pedir el deseo ideal que no nos afecte. Es por eso que lo apoyo.

—Pero aun así, Natalie. ¿Y si mi mamá no quería esto?

—Sí, yo también lo pensé. Pero, Adrien, tu sabes que tu papá es terco como la mula. Un día cuando lo vi, lo vi recitar un triste poema que me partió el alma. Y en vez de ir a convencerlo me deje convencer por su determinación. Me di cuenta de que también quería creer en ese futuro en el que otra vez estamos con ella.

—¿Mi papá recitando un poema?

—Sí, no tiene cara de poeta ¿verdad? —

—Sí— Afirme y solté una gran carcajada

—Quisiera oírlo— le dije

—No es muy bonito que digamos. Adrien, sé que todo esto debe ser difícil, pero intenta descansar. —

—Sí, gracias por hablar conmigo, Natalie. Buenas noches—

—Buenas noches, Adrien

Todo estaba oscuro. Odiaba esta oscuridad en mi casa. Mientras caminaba a mi cuarto me sentía ajeno al sentir el ruido de la calle, como si no perteneciera a ello. Me sentía aún intranquilo y pensativo. Estaba lagrimeando sin saber de qué. Era tanto que procesar y la verdad ya no sabía que era lo que me pasaba.

Me lave mis dientes, me cambie, me puse cremita, apague mi luz y me eche, y todavía tenía esta fea sensación.

¿Qué se supone que haga?

¿Qué pasaría si derroto a mi papá? Incluso si supiera que no soy yo. Ya no tendría familia. Probablemente le pondrían en la cárcel o tal vez con su influencia se libraría del castigo. Tal vez si lo derrotáramos sin revelar su identidad quitándole los miraculous al fin perdería la esperanza y lo dejaríamos todo ahí. Después de eso, ya no existiría posibilidad alguna de que ella reviva. Apenas que sea tan terco como para seguir aferrándose. Yo no sé.

Por otro lado si apoyo a mi padre ¿Cómo sería ver a mi mamá de nuevo? ¿Volveríamos a ser la familia de antes? Uf ¿Qué me sucede?¿Cómo siquiera pienso en traicionar a Ladybug? A parte de que también entregaría a Plagg. Aunque también si elijo el otro bando voy a traicionar a mi padre.

Pero, habría posibilidad alguna de que lo convenza de que no revivamos a mi mamá. ¿Habrá alguna forma de no elegir?

Todo sería mejor si fuera valiente y él dejara de ser obstinado. Así le podría decir

Pa, no quiero luchar contigo. La verdad es que soy Cat Noir. Por favor sé solo mi padre. Te extraño como no te imaginas.

Ven acá hijo. Y me hiciera un gesto de abrazo y que dejara su cara de póker y me dijera: hijo, no es fácil lo que me estás pidiendo. ¿Estás seguro de poder renunciar a tu madre?

Sí, pa.

¿Por qué?

Porque no quiero escoger entre mis creencias y tú, no quiero acabar con lo único que tengo.

Está bien, hijo. Y lloraríamos dejando a mi madre ir.

Ojala con mi sinceridad bastara: siento que cualquier decisión que tome me voy a arrepentir.

Hay, que ridículo, no es la primera vez que creo algo que no existe para darme valor. Me reí de lo penoso que era.

Estoy cansado

Lastimosamente mi identidad no lo puede saber nadie, incluso él; me duele que él me compartiera su identidad y yo no pueda hacer lo mismo. Me siento como un cobarde. Si revelar no pondría en juego tantas cosas, si solo dependiera de mí, no tendría que ocultar nada.

Tengo que dormir