CAPÍTULO 5

1.8K 154 14
                                    

ALEXIA

El entrenamiento de hoy ha sido duro, pero aún así, no conforme con como he rendido hoy me quedo a echar unos tiros cuando el míster nos manda a la ducha. Mi cabeza no para de dar vueltas, y eso nunca antes me había pasado por un motivo que no fuera futbolístico. Las chicas se van a cambiar, pero enseguida noto unas pisadas que se acercan poco a poco hasta mí.

- ¿Es que no has tenido suficiente? – dice Mapi haciéndose con uno de los balones que hay por ahí tirados.

- No estoy centrada- digo más para mi misma que para que mi amiga lo escuche.

- No sé qué es lo que se te está pasando por la cabeza, pero seguro que chutar un balón no lo soluciona, si no ha servido hasta ahora...

- Ya lo sé- digo interrumpiéndola- pero es que no sé qué otra cosa hacer.

- Anda, vamos- dice pasando su brazo por encima de mis hombros para dirigirnos al vestuario- Te propongo un plan.

- Me das un miedo...

- Este fin de semana hay un concierto en uno de los garitos del centro, me lo ha dicho Claudia, mi amiga, la que es tatuadora, por lo visto una de las que toca es amiga suya, y me ha dicho de ir a verlos. Podríamos ir las tres, Claudia, tú y yo, hace mucho que no salimos por ahí y no me pongas escusas porque tenemos el fin de semana libre para variar- dice cuando ve que voy a abrir la boca para replicar.

- Me lo pensaré.

No es que esté muy convencida de su plan, pero sé que si le digo que no, va a estar insistiendo e insistiendo hasta que me de por vencida. En el vestuario el resto de nuestras compañeras están hablando de lo que harán estos días libres, algunas viajarán para ver a sus familias y otras se quedaran descansando ya que las últimas semanas han sido intensitas.

Cuando llego a casa lo primero que hago es sacar a Nala a dar un paseo, y luego preparo algo de cena y me dispongo a comerlo mientras veo una serie. Al final termino escribiéndole a Mapi para ver dónde y a qué hora nos encontramos mañana para el concierto, no es que me apetezca mucho, pero en algo tiene razón la defensa, y es que necesito despejarme, normalmente eso suelo hacerlo con el balón, pero en vista de que no me está sirviendo tendré que probar cosas nuevas.

La tarde del sábado llega rápido, casi sin darme cuenta estoy en mi habitación buscando en mi armario algo que ponerme, no sé exactamente de que rollo es el grupo que vamos a ver, así que opto por algo seguro. Un pantalón negro de cuero, un top rosa y unas playeras blancas para no tener que sufrir unos zapatos incomodos durante toda la noche.

Como el garito donde es el concierto no queda muy lejos de mi casa decidimos ir andando, Mapi se quedará a dormir en mi casa, para que no tenga que coger el coche luego, y Claudia vive aún más cerca que yo del local así que no hay problema.

Cerca de la hora acordada me llega un mensaje de Mapi diciendo que ya está abajo, así que cojo mi bolso, reviso que está todo y salgo de casa.

- Pero bueno...- dice haciéndome dar una vuelta sobre mi misma- ¿Y este pedazo de outfit que te has marcado? Estás increíble, está noche ligas fijo.

- ¿Y qué te hace pensar que quiero ligar con alguien?

- No sé, es una corazonada.

- Anda, tira que todavía tenemos que pasar a por Claudia al estudio de tatuajes y sino no vamos a llegar al concierto- digo en modo capitana.

- Eres incorregible- dice mientras echamos a andar.

Cuando llegamos al estudio Claudia está cerrando la verja, así que no tardamos absolutamente nada en poner rumbo al concierto.

Las noches de Barcelona son únicas, la vida que tomas las calles cuando se pone el sol no tiene comparación con ninguna otra ciudad que haya visitado, ni si quiera la capital. Al llegar a nuestro destino, me encuentro con un local no muy grande, lo cual agradezco porque me agobian bastante las multitudes. Claudia nos guía hasta la barra, donde pedimos unas cervezas, y mientras empieza el concierto hablamos un poco de todo y de nada.

- Hace demasiado que no me tatúo- dice Mapi.

- Ya sabes que solo tienes que llamarme, y lo mismo va para ti Ale.

- Yo tengo todavía pendiente hacer uno por la segunda champions.

- Ostia yo también- suelta Mapi como si literalmente se acabase de acordar.

- Vaya dos, al final vais a terminar como con el de la primera champions, que mucho hablar pero ninguna os le habéis hecho.

- Perdona, pero es que aquí tu amiga- digo abrazando por los hombros a Mapi- Nos prometió ser ella quien nos tatuaría pero siempre que se lo decimos se echa para atrás la muy cobarde.

- No soy cobarde, simplemente no quiero cagarla, que creo que es algo muy razonable teniendo en cuenta que un tatuaje es para toda la vida.

Claudia va a decir algo cuando las luces del garito se giran para enfocar el escenario, dejando así entender a la gente que el concierto está por empezar. No más de cinco minutos después los músicos empiezan a subir al templete colocándose sus instrumentos. El grupo lo forman tres chicos, el batería, el bajista y el cantante, y una chica, la guitarrista amiga de Claudia. Todo el mundo enloquece cuando empiezan a tocar, y he de reconocer que no suenan para nada mal, no sabría decir muy bien que estilo tocan, pero es algo a medio camino entre el pop y el rock.

Después de la primera canción, el cantante dirige unas cuantas palabras al público consiguiendo los gritos de gran parte de este, sobre todo de las más jovencitas. A ver, las entiendo, el chico es guapo y lo sabe, y si a eso le sumamos la labia que tiene y el aura de bohemio... pues entiendo que a muchas se les caigan las bragas.

- ¿Tía cómo tu por aquí? Me alegro mucho de verte- dice Claudia a alguien a mis espaldas cuando está empezando la segunda canción.

- Pues ya ves, que Lorena al final me ha convencido de venir- y es en el segundo en el que escucho esa voz que me giro.

Esa bendita voz que no ha dejado de resonar en mi cabeza desde que la escuché por primera vez. Al girarme veo a la pelirroja susurrando en el oído de la tatuadora, ya que con la música es bastante difícil comunicarse de otra manera.

- Tía esa no es...- empieza a decir Mapi, pero justo en ese momento Claudia la toma del brazo para presentarle a la pelirroja.

- Clara esta es María, María esta es Clara- cuando la tatuadora termina la presentación Mapi se acerca, a la hasta ahora desconocida para ella, y le da dos besos.

- Encantada Clara.

- Lo mismo digo- contesta ella algo tímida.

- Y esta es... – empieza Claudia, pero la pelirroja la corta.

- Alexia- dice casi como si mi nombre escapase de sus labios.

- Hola- digo acercándome a darla dos besos.

- ¿Os conocíais? – pregunta Claudia, pero no podemos responder porque vuelve a hablar- Dios esta es mi canción favorita- dice antes volverse loca bailando y cantando al ritmo de la música, bueno, más que bailar, salta.

Clara y yo nos habíamos quedado mirándonos, intentando averiguar todos y cada uno de los secretos de la otra, y es Mapi la que interviene para que volvamos a la realidad.

- Entonces... ¿sigues al grupo?

- Sí, bueno, es que la bajista es mi mejor amiga, bueno, es como mi hermana, y además es mi compañera de piso. Por lo que sí, se podría decir que sigo al grupo.

Las tres nos reímos y seguimos disfrutando del concierto, pero yo cada vez soy más consciente de la cercanía de cierta pelirroja, de su aroma que me vuelve loca, y de las miradas que empezamos a intercambiar según van avanzando las canciones. 

UN DIA DE PARTITDonde viven las historias. Descúbrelo ahora