UN DIA DE PARTIT

CAPÍTULO 13

N/A: Como al parecer todas estáis más interesadas en saber como van las navidades en casa de las Putellas Segura, que en saber que le regaló Ona a Lea, aquí os dejo el siguiente capitulo para que no os quedéis con las ganas. Os leo en comentarios, Besos!!!!

ALEXIA

Ahora hay bastante más tráfico que hace un rato, lo que hace que terminemos en una retención de un par de kilómetros, y eso que no hay más de veinte minutos en coche desde la casa de Clara hasta la de mi madre.

Definitivamente estamos paradas en una cola apenas cinco minutos después de haber arrancado, yo amo Barcelona, de verdad, pero momentos como este hacen que me quiera mudar a alguna otra ciudad de España, de esas pequeñitas que casi no tienen tráfico.

Desde que nos hemos montado en el coche me es imposible quitar mi mano derecha de la pierna de Clara, quiero que sienta que estoy ahí para ella. La pelirroja se dedica a jugar distraído con mis dedos mientras parece estar perdida en sus pensamientos.

- Oye Ale, ¿puedo preguntarte algo? – cuestiona girando su cabeza hacia mí.

- Lo que quieras- contesto subiendo mi mano a su rostro para acariciar su mejilla.

- ¿Cómo has sabido lo que estaba pasando?

Veo como sus ojos se humedecen, aunque hace un esfuerzo monumental por no llorar.

- Ada me llamo desde tu teléfono- digo mirando a la peque en los asientos traseros.

- ¿Y como supiste cuál era el número de Alexia? Todavía no sabes leer- le dice su madre intrigada.

- Por la foto, busqué en todas las fotos de la lista hasta que vi la de Alexia.

- Tienes que sentirte super orgullosa de ella, pelirroja- empiezo a decir- se ha portado como una autentica valiente y me ha ayudado en todo, ¿a que sí peque?

La niña asiente con una sonrisa de oreja a oreja que termina contagiando a su madre.

- Pues claro que estoy super orgullosa de ella, no hay niña más lista que la mía, y la verdad es que no sé qué haría sin ella.

- No tienes que saberlo mami, porque yo nunca me voy a ir de tu lado. Nunca, nunca, nunca- dice Ada reiterándose.

Después de unos minutos Ada se pone a jugar con un par de peluches que se ha traído y yo aprovecho para hablar un poco con Clara.

- Ey, ¿todo en orden?

Ella me mira encogiéndose de hombros.

- Si quieres contarme estoy aquí ¿vale? No tiene que se ahora, cuando estes lista.

- Gracias Ale, no sabes lo que significa para mí, pero ahora mismo necesito despejar la mente, cambiar de tema.

- Claro, sin problema.

Por fin nos podemos mover algo, aunque sigue habiendo bastante retención, así que vuelvo a poner el coche en marcha para avanzar unos pocos metros.

- Oye, una cosa- dice la pelirroja- ¿a cuantas personas te referías cuando has dicho de ir a cenar con tu familia? – noto por su voz que está bastante ansiosa por saber a qué se va a enfrentar.

- Tranquila, me refería a mi madre y a mi hermana, desde que murió mi padre solo nos juntamos nosotras tres por estas fechas.

- Y ¿segura que no molestamos? Mira que podemos coger un taxi y volvernos a casa.

- ¿Pero tú estás loca? Claro que no molestáis, además, mamá adora tener gente en casa, dice que así la sienta más hogareña.

- Ay dios, que estoy cayendo en la cuenta de que estoy a escasos minutos de conocer a tu madre- dice empezando a ponerse histérica.