Cap. 3 La guerra

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Todos gobernamos sabiamente como nos habían enseñado nuestros padres, todo era paz, pero esa tranquilidad no iba a durar por mucho tiempo, Jack solo era dulce conmigo si no estaba mi hermano, otras veces en la escuela se comportaba como un idiota, Hipo me dijo que no me hiciera ilusiones, que Jack amaba a Rapunzel, decidí no hacer caso y el para molestar solo le dijo a Jack que me harían una broma, al llegar al colegio estaba con Raya hablando sobre lo bien que había funcionado el que unieramos los reinos, Jack se acercó y me miró.

- T/n... Hace tres años quiero decirte esto y creo que hoy en tu cumpleaños es la mejor oportunidad, pero antes... Todos van a ser testigos de lo que haré! - dijo está para acercarse. - Reina T/n... ¿Le gustaría ser mi novia? - dijo sonriente a lo que asentí y tome sus manos emocionada, estaba tan feliz, Jack me miró sorprendido ya que Hipo le había dicho que no me gustaba, Raya estaba feliz por mi y fuimos a clases, al salir Jack salió rápido a lo que mire con extrañeza y lo mire ir con Hipo, escuché que discutían a lo que me acerque y escuché su conversación.

- ¡Eso no era parte de la apuesta! Era solo decirle y que me dijera que no... No que aceptará... Yo ya acepte a Rapunzel... Dijiste que no sentía nada por mi... - al escuchar eso solo me acerque y lo mire conteniendo lágrimas.

- ¿Entonces todo este tiempo, tantos años, solo fui una estúpida apuesta? - dije para soltarle una bofetada, mire Hipo y solo seque mis lágrimas.
- Tu y yo terminamos Jack... Aunque nunca tuvimos nada... Solo fui un juguete para ti... - dije para caminar a mi casillero por mis cosas, Jack me siguió a lo que solo lo ignore conteniendo mis lágrimas, tome mis cosas y seguí caminando, subí a mi caballo y lo mire.

- Será mejor que te alejes de mi... Solo me lastimas... - dije para después ir al bosque, ya no podía contener mis lágrimas, seguí llorando hasta que un ruido fuerte hizo que el caballo me tirará y se fuera corriendo, maldije y me levanté llorando, mire unas piedras gigantes que eran de una historia que contaba mi madre, eran las piedras de los elementos, mire que faltaba una, luego escuché una voz que me decía que entrara al bosque, no lo pensé y entre, mire un castillo de hielo puro, entre y mire todo, había una mesa y ví una visión, se aproximaba una guerra, mi mente regreso a la realidad al escuchar gritos y un bombardeo, salí y mire a Hipo y sus tropas atacando Kumandra, corrí al castillo de Raya y la mire.

- ¿Que demonios quiere? - dije molesta a lo que me miró adolorida.

- Quiere que le entreguemos los reinos o quemaría todo... Ya comenzó a quemar todo... - me miró adolorida a lo que pedí que se la llevarán, tome una espada molesta y salí.

- Princesa T/n... Entrégame tus tierras y las de Kumandra para que evitemos una guerra... - dijo Hipo a lo que molesta lo mire.

- ¡¡Te recuerdo que soy reina ahora y no te entregaré mis tierras ni las de Kumandra!! - dije molesta a lo que solo escuche.

- Tu no eres mi reina T/n... Quería esto por las buenas pero bueno... No me dejas otra opción - dijo para mirar a sus tropas. - Acaben con ella... - dijo mirándome fijamente, me agache, puse mis manos en el suelo y sentí gotas de agua salir, con esto hice un muro de hielo cubriendo el reino de Kumandra, salió una criatura del suelo a lo que me asusté y mire una dragona bellísima, está me cargo y me elevó a lo que mire a Hipo.

- Retrocede... Será inútil está guerra... - dije molesta, escuché una voz familiar que pidio que nos detuvieramos y mire a Jack, mire a su familia y me tranquilice, sentí que me apuñalaron a lo que me aguante, baje y ayude a su familia a entrar al reino, su madre ayudo a calmar todo, Hipo retrocedió y fue a su reino, su madre me miró sonriendo a lo que regrese la sonrisa y caí inconsciente sintiendo dolor.

Me curaron y al abrir los ojos mire a Jack, me levanté débil y acomode mi vestido, lo mire y suspiré.

- Te agradezco el que me hayas salvado... Pero no te quiero cerca mío... - lo mire triste. - Pero antes de irte solo dime... ¿Por qué me utilizaste? - dije con la voz quebrada a lo que no dijo nada y se fue, salí y fui a mi trono, seguí llorando en silencio y suspiré, pasaron los días, los meses y no volví a hablar con Jack, me sentía sola, por la escuela me enteré que había terminado con su novia, la reina Rapunzel, fue otro día común como los demás, tenía competencia de patinaje sobre hielo y me tocó trabajar con el a lo que solo solté un suspiro y comenzamos a practicar.

Los espíritus del bosque Donde viven las historias. Descúbrelo ahora