Kny oneshots

Pequeño castigo ~ Giyuutan ~

Hoy como cada día llegue un poco pronto a clase para esquivar a tomioka sensei. Es algo estricto con las reglas de vestimenta y siempre me da con un tipo de palo, hoy era viernes y mi única oportunidad de no ser golpeado por solo llevar unos pendientes que me dio mi padre.

Al llegar a la entrenada salí corriendo pensando que tomioka sensei ya estaba esperándome pero para mi sorpresa no estaba allí, ¡mi día de suerte es hoy! ¡Puedo llegar a clase sin tener que pasar por la enferme-.

"Kamado. Volviste a romper el reglamento y no pudiste escaparte esta vez tampo, necesitas un castigo." -me volvió a golpear y ahora me quiere dar un castigo, ¿¡me quitará mis pendientes y no me dejará tenerlos hasta el final del curso?! Mis pensamientos estaban llenos de cosas malas que ni si quiera me di cuenta que me estaba llevando a su oficina.

"¿Eh? Tomioka sensei tengo que ir a clase, ¿por que estamos en tu oficina?"

"Como te dije necesitas un castigo por tus acciones. 5 días de la semana 5 castigos que yo he elegido." -su cara estoica como siempre pero podía oler algo intenso y casi adictivo, esto solo lo huelo cuando me...¡No¡ Tomioka sensei nunca podría hacer esas cosas conmigo, ¿verdad?

Me trague mis propios pensamientos cuando me tumbó en su regazo y empezó a darme nalgadas. Mi cara se puso toda roja e intenté escapar pero me bajó mis pantalones y ropa interior dándome un poco más fuertes. Era como un niño pequeño siendo castigado.

Pronto mis gritos se volvieron en leves gemidos, esto se convirtió en un castigo medianamente disfrutable más cuando es mezclado con el olor erótico que tomioka sensei desprendía.

Cuando me estaba acostumbrando ya empezó a hacerlo un poco más fuerte, ese leve cambio fue suficiente para que mis gemidos fueran más altos y mezclados con lloriqueos, la mano de tomioka sensei estaba tan fría y calmaba temporalmente el calor que sentía en mi piel por sus nalgadas.

"Nunca pensé que te gustaría algo así kamado." -intenté contestarle pero solo salieron balbuceos de mi boca. De repente sentí su otro brazo sosteniéndome con fuera mientras el otro seguía con sus ahora violentas estocadas.

Tras unos minutos sentí algo extraño dentro de mi, eran los dedos de tomioka sensei, no puedo decir que nunca intenté algo así pero que lo hiciera tan de repente fue demasiado para mi, sus dedos salían y entraban con rapidez mientras sus estocadas en mi parte trasera no paraban, era una sensación única y muy placentera sobretodo cuando rozaba mi próstata.

No tardé mucho en correrme haciendo que mi ropa se manchase.

"Kamado te manchaste todo tu uniforme, que suerte que tengo otro de recambio." -tuve mucha suerte y me senté estando un poco agitado por todo lo que había sacado, sentí sudores fríos cuando tomioka sensei sacó un uniforme, pero de mujer.

"Este será tu segundo castigo. Póntelo, ahora." -no le cuestioné y me puse todo el uniforme, incluso ropa interior de mujer, esto era demasiado vergonzoso...

"Ahora para tu tercer y cuarto castigo." -tomioka sensei agarró mis muslos y me trajo cerca de el subiéndome mi camiseta, agarró algo de su bolsillo que parecían pinzas y me las puso en mis pezones, todo mi cuerpo se tensó con un sentimiento de placer y dolor al mismo tiempo.

"Son rosas y sensibles como los de una mujer, con esa reacción el castigo número cuatro te va a fascinar." -estaba ansioso por conocer ese cuarto castigo, nunca me consideré masoquista pero que tomioka sensei me haga estas cosas me hacía sentir una lujuria que nunca sentí.

Poco después puso sus manos abajo de mi falda y de mi ropa interior, sentí sus dedos dentro de mi de nuevo pero algo más estaba ahí..

"Tomioka sensei que que lo que dejaste dentro de mi..." -tomioka sensei puso una sonrisa sádica y dio a un botón en algo que parecía un control, pronto después sentí una vibración alta en mi, mi pene se volvió a poner erecto. Mi cabeza daba vueltas de todo el placer que sentía. Casi me caigo pero tomioka sensei me agarró y acaricio la cabeza.

"Ahora saldremos y afuera te diré tu último castigo." -me sentí tan abrumado que solo asentí, tomioka sensei me llevó agarrado hasta afuera del colegio, llevándome a un centro comercial, mi cara estaba toda roja de la vergüenza pero no podía oponerme a mi sensei, y más cuando me estaba haciendo sentir tan bien.

"Iré por un helado para tu último castigo tu ve a los baños y espérame ahí." -asentí de nuevo y me fui a los baños esperando a tomioka sensei. No pude contenerme y me empecé a masturbar allí, era tan patético pero no podía más con la presión en mi entrepierna.

"Ni si quiera me esperaste para comenzar esto, que chico tan malo eres kamado. Esa no es la actitud de el hermano mayor."

"P-perdóname tomioka sensei..."

"Quizás deba añadirte un castigo por no esperarme."

"Si tomioka sensei quiere eso no me puedo negar..."

"Buen chico." -tomioka sensei sonrió y se sentó en el inodoro bajándose los pantalones dejándome ver su erección, quería tocarlo pero no me dejó, cogió el helado que había comprado y lo echó en su pene.

"Chúpalo hasta que esté limpio." -estaba algo nervioso por que era mi primera vez pero tengo que hacerlo lo mejor que pueda para tomioka sensei, comencé a lamerlo de arriba a abajo manteniendo contacto visual con tomioka sensei en todo momento como en esos vídeos que vi.

Tras lamer todo el helado comencé a mamar la punta y masturbarlo a la vez, tomioka sensei hacia pequeños gruñidos de placer, ¡tan adorable~~! Cuando lo puse en mi boca casi entero la intensidad del vibrador subió haciendo que mi cuerpo se estremeciera. La mano de tomioka subió a mi cabeza acariciandola y empujando su pene adentro de mi garganta, empecé a masturbarme ya que sentía que me iba a correr en muy poco tiempo.

Ambos gemimos un poco alto y nos corrimos, me lo tragué todo con gusto, sabía bastante bien para mi sorpresa.

"Gracias por la comida tomioka sensei."

"Eres un chico muy bueno y agradecido, mereces un premio" -tomioka sensei sacó ropa de una bolsa que llevaba con el, era bastante bonita y totalmente de mi tipo.

"No era necesario tomioka sensei."

"No puedo dejar que mi querido estudiante vaya así por la calle" -mis ojos brillaron cuando dije eso, me sentía muy feliz con el detalle de tomioka sensei, me lo puse muy feliz y salimos de ahí.

Estuvimos todo el día juntos como una pareja feliz. No hace falta decir que voy a volver a romper las reglas todo lo que pueda para que tomioka sensei me vuelva a 'castigar'.