Capitulo 2

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Naruto gruñó cuando sintió como algo impactaba contra su cabeza, lentamente abrió sus ojos mientras levantaba su cabeza del escritorio para ver quien le había hecho daño.

Su sensei tenía una ceja alzada con su mano estirada dando a entender quien fue el quien le lanzo el borrador a su cabeza, volteo sus ojos a los lados y vio a sus dos amigos partirse de risa mientras que Shoko solo sonreía divertida.

"Este odio ha que se debe?"- Gruño mientras se ponía recto en su escritorio mientras observaba a su sensei quien suspiro.

"Tercera vez esta semana, Naruto. Además, vuestras superiores están por llegar y no quiero que te vean dormido en plena clase, sería algo vergonzoso"- Yaga se cruzó de brazos mientras se dirigía a su asiento y descansaba con calma, ya había terminado sus lecciones así que solo debía esperar a la llegada de las dos hechiceras que vendrían hoy de visita.

"Que tenga sueño es culpa del idiota de Satoru, no he dormido nada en días por estar jugando"- Señaló al alvino quien desvió su mirada y silbó inocentemente generando que Naruto le sacara el dedo del medio" Además, no es como si me interesara que esas viejas vengan a vernos"- Se encogió de hombros sin notar como la puerta corrediza del salón se abría lentamente y dos féminas entraban con cuidado justo para escuchar las ultimas palabras de Naruto.

Saturo y Suguru se taparon las bocas con sus manos para no soltar unas fuertes carcajadas mientras que Shoko solo negaba con diversión. Las dos recién llegadas pasaron al frente mientras que a una chica con traje de sacerdotisa le brincaba una vena en su frente.

"¿A quien llamas vieja, mocoso?"- Ella gruñó violentamente mientras daba unos fuertes pasos en dirección a Naruto quien tragó levemente al ver la enojada mujer de cabello azul oscuro.

"A-a nadie en particular"- El rubio sonrió nervioso al ver como la chica de coletas se arremangaba su traje lista para golpearlo.

"Utahime, no estamos aquí para crear problemas"- La voz tranquila de la otra mujer llamó la atención de todos, incluso de Naruto quien vio más allá de la llamada Utahime y sus ojos se abrieron levemente maravillándose por la belleza Natural que desprendía la peli celeste platinado.

"Pero Mei... me llamó vieja.."- Utahime casi suelta espuma por la boca pero Mei solo rió levemente.

"Por más enojada que estes dudo que puedas hacerle algo, míralo bien e intenta reconocerlo"- Le aconsejo con calma cosa que tomo en cuenta, Utahime volvió a ver al chico y sonrió nerviosa al reconocerlo... mierda, Uzumaki, estuvo por golpear a tal monstruo... joder, cada vez quería más a Mei, espera.. este mocoso no apartaba la vista de Mei, lentamente observó entre Mei y Uzumaki y entrecerró sus ojos, estaban ahora mismo en una lucha de contacto visual y parecía ser que Mei estaba ganando o algo por el estilo.

Sonrió de forma malvada al reconocer lo que sucedía, ya tenía como molestar al mocoso y hacer de su vida un martirio.

"Lindos ojos"- Ella cruzó sus brazos debajo de sus pechos alzándolos más cosa que hizo tragar a Naruto levemente quien tosió en su mano.

"Uh, um... gracias, lindo cabello"- Fue lo primero que se le vino a la mente y eso hizo sonreír a Mei pero en cambio Suguru y Gojo llevaron sus manos a su barbilla y se acercaron a Naruto con sus ojos entrecerrados.

El chico rubio aun en su asiento los volvió a ver confundidos pero se maldijo al saber lo que se venía... lo dejarían en vergüenza.

"Oh, Naru-Chan. Me acabas de romper el corazón. ¿Sabías? Creí que lo nuestro era especial"- Satoru exclamó dramáticamente cosa que hizo a Naruto suspirar mientras escondía su rostro avergonzado.

"El otro día bajo la luz de la luna juraste que me serías fiel y practicaríamos todos los días 'Estrellita donde estas' pero mira ahora, vil sinvergüenza"- Suguru se unió y llevo sus manos a su pecho de forma exagerada cosa que gano una gota de sudor de los demás menos de Gojo quien se reía internamente y Naruto quien no podía estar más avergonzado por esta tontería.

Naruto x Jujutsu Kaisen - El Resurgir De Las Bestias Con ColaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora