Reencarnacion Targaryen

Capítulo 26

Cuando llegaron a RocaDragon, Rhaegar y Visenya fueron abrazados por su madre, enviar a sus hijos a la guerra había sido aterrador pero debía confiar en ellos y sus habilidades.

-Ire a darme un baño- informo Rhaegar al separarse

-Por supuesto vamos

Daenerys comenzó a caminar con Rhaegar hasta que el llamado de su hija la detuvo, al girarse se encontró con Visenya quien la miraba avergonzada

-Lamento lo que dije... perdóname por herirte... estaba... estoy triste por perder a Rhaella y no me di cuenta que tú también estás triste

-Oh mi niña

Daenerys la abrazo con la mayor suavidad posible, le asombro que Visenya le devolviera el gesto por lo que se dedicó a disfrutarlo.

-Rhaella siempre viviera en nuestros corazones- afirmó Daenerys- Se que me volví sobreprotectora pero... ustedes son mi mayor tesoro ... los amo eternamente

-Tambien te amo mami ¿me disculpas?

-Por supuesto no hay nada que no vaya a perdonarte

En la sala del trono se encontraba Rhaenyra discutiendo con Maegor, el hecho de que su hijo secuestrara a los hijos de su hermana la enfureció, una madre no debería ser alejada de sus hijos, frase que fue refutada por su hijo quien alego que su esposa debería vivir sin volver a ver a su hija.

-Ahora podemos tomar la capital madre

-Es apresurado

-¿ESTAS LOCA? O NO QUIERES REINAR- Grito furioso- SI ES ASI DIME Y NO ARRIESGARE LA VIDA DE MIS HIJOS

-Soy tu reina y tu madre no permito que me grites

-Permites que mis hijos vayan a la guerra para que los tuyos pasen en la playa tanquilos- afirmó con molestia-Tomare la capital de todas formas para así puedas sentarte en el trono a costas de mí familia

Los dotrakis e inmaculados estaban listos para el próximo ataque, Maegor junto a Daenerys se estaban preparando para tomar la capital, sabían que tendrían que enfrentarse a Vhagar y Tessarion y estaban completamente listos, Canibal era feroz e implacable.

Los ejercicios de Maegor y Daenerys se detuvieron en las puertas de la capital bajo las órdenes de su reina, tenían un claro mensaje, si se rendían les perdonaría la vida pero si se negaban morirán.

Cómo era de esperarse Aemond los enfrento a lomos de Vhagar, la vieja dragona perteneciente a la reina Visenya estubo a punto de quemar el ejercicio hasta que Maegor y Daenerys atacaron, Canibal fue el primero en atacar clavando sus dientes violentamente contra el cuello de la  dragona, Drogon fue quien evito que Canibal fuera asecinado a pesar de su tamaño en comparación a Vhagar saco ventaja.

Tanto como Daenerys y Maegor alejaron lo que más pidieron a Aemond y Vhagar de la capital ya que si la dragona caía podría matar a miles.

Maegor estaba furioso, frente a el estaba el asesino de su hija, su niñita, se soltó lo más rápido que pudo se las riendas para saltar hacia Vhagar, solo basto un salto para que su espada de acero Valyrio se clavara en el ojo que le quedaba a Aemond.

Vhagar rugió al sentir la muerte de su jinete pero Maegor no le dió tiempo, tomo las riendas de la silla y le ordeno que volara, una parte de el quería creer que la dragona lo reconocía y por eso lo obedecio, Guío a Vhagar hacia pozo dragón dónde canibal y Drogon lo esperaban, el cuerpo de Aemond fue arrastrado por toda la capital hasta llegar a la fortaleza roja.

Alicent estaba allí, soltó un angustioso grito al ver a su hijo muerto, Daeron estaba a su lado pero el muchacho no era estúpido, sabía que si atacaba a sus tíos terminaria muerto, tanto madre e hijo fueron encerrados en sus habitaciones custodiadas por los inmaculados.

-abdicare

Afirmo Maegor mientras miraba fijamente el trono de hierro, su esposa estaba abrazada a él, sus fuetes brazos rodeaban su cintura con delicadeza negándose a soltarla

-Es tu derecho de nacimiento - murmuró Daenerys

-Y me ha costado demasiado

-Apoyare cualquier decisión que tomes mi sol y estrellas... eres un buen hombre y estoy segura que un gran rey pero sobre todo eres el mejor padre que puede existir

-¿Que crees que es lo mejor para nuestros hijos?

-Le damos lo mejor... son amados, los educamos con respeto a los demás sin importar la posición social, Aerea será una buena reina

-Rhaegar manejara la bahía de dragones mejor que nadie- afirmó Maegor con una sonrisa, su niño era el más dulce y amable

-Y la salvaje de nuestra hija una temida Dotrakhi

-Este es nuestro destino romper la rueda y lo haremos no solo en poniente sino en todo el mundo