Capítulo 27

3K 295 15
                                    

La primer noche en la fortaleza roja Maegor se sentía completamente extraño, en los años que estuvo exiliado con Daenerys la había pasado demasiado genial, su esposa se encargaba de los asuntos reales mientras el era su consorte, cuidaba de sus hijos y los entrenaba, participaba en la cantidad de guerras que su esposa necesitara para luego celebrar con sus pequeñitos.

Por tercera vez en esa noche Maegor despertó asustado, en cada uno de sus sueños su hija moría de formas diferentes y atroces, Aerea su intrépida y descarada hija, su fiel compañera.

Camino en silencio por los pasadizos secretos hasta llegar a su habitación, la niña dormía cómodamente en la cama, estirada completamente boca abajo, Maegor rio al ver su boca abierta babeando su almohada.

-¿Papi?- pregunto luego de unos minutos- ¿ya es mañana?

-Aun no- respondió Maegor agachándose frente a su hija

-¿que pasa?

-Tuve una pesadilla- confesó- ¿Puedo dormir contigo?

Aerea sonrió emocionada, a medida que sus niños crecían Maegor se había asegurado de que ellos se sintieran libres de hablar con el, ya sea de sus pesadillas hasta sus preocupaciones infantiles, tenía niños empáticos y amorosos los cuales al oír la palabra "pesadillas"  levantaban sus sábanas y esperaban acurrucarse.

-Esta bien papi es solo un sueño- susurro Aerea tratando de no volver a dormirse- Piensa en cosas bonitas- bostezo- en mami- bostezo - mami con un hermoso vestido

La mañana siguiente Daenerys fue la primera en encontar la tierna escena, Maegor dormía estirado en la cama sobre su estómago estaba la cabeza de Aérea durmiendo en diagonal, su instinto materno insistió en despertarlos amorosamente pero su lado Targaryen la obligó a buscar a sus otros hijos.

Visenya sonrió con burla al oír a su madre autorizarla a hacer una broma, Rhaegar y Visenya con sumo cuidado colocaron crema batida en manos de su padre y hermana, con ayuda de su madre consiguieron plumas.

Aerea había caído demasiado fácil, Rhaegar reía a carcajadas viendo el rostro manchado de su hermana mientras que Visenya había intentado que su padre cayera en su broma, lo único que consiguió fue ensuciarse ella con crema.

-¿Creíste que caería niña demonio?- pregunto Maegor esparciendo aún más la crema por su rostro y cabello

-Papii me ensucias- se quejo entre risas

-Estoy segura que este malévolo plan fue hecho por su madre- afirmó- ¿que tal si le enseñamos una lección?

Correr por el pasillo fue una buena idea para Daenerys al menos tuvo ventaja hasta que chocó contra un guardia para luego ser alcanzada por sus hijos y sus manos llenas de crema.

Las risas resonaban en los pasillos, una pequeña pelea de crema batida, los guardias trataban de no reír al verlos mientras que las damas pensaban en lo difícil que sería limpiar eso.

-Rindete y te perdonaré la vida-amenazó Aerea quien estaba sentada en los hombros de su padre

-Me rindo su gracia- Daenerys fingió tristeza- perdí ante mis valientes hijos

-NO... YO TE SENTENCIÓ A PREPAR MIL PASTELES DE FRESAS

Maegor rio no solo sabiendo que su esposa jamás les permitiera mil pasteles de fresas sino también porque frente a el estaba su madre y hermanos mirando asombrados la escena frente a ellos.

-Niños a su habitación- ordeno Maegor mientras bajaba a su primogénita

-NO- grito Visenya

-¿Disculpa?

-Jugar es lo único divertido que podemos hacer en este lugar asi que tienen dos opciones pelear en otro lado o danos un castillo para jugar

*

-No se puede razonar con esa mujer- se quejo Visenya

-Tenias buenos argumentos- comento Rhaegar

-Es como hablarle a la pared

-Le estamos hablando a la pared- afirmó Visenya

-Tenemos que hacer algo divertido- afirmó Aerea- O moriremos del aburrimiento

-Tengo una idea- afirmó Visenya- Pero si mamá se entera nos meteremos en muchos muchos problemas

-Esta bien- Rhaegar acepto- solo no podemos herir a nadie

-Fisicamente no- afirmó Aerea- Terminamos el castigo

-Y nos encontramos en el santuario

La conversación en la corte se estaba volviendo calurosa, Rhaenyra se mostraba inconforme al oír al acto violento de Maegor mientras que Daenerys se encontraba sorprendida al saber que Daemon estaba del lado de ellos.

-Ejecutar a Otto no es una buena idea- insistió Rhaenyra- nos podría en guerra con antigua

-YA ESTAMOS EN GUERRA- Grito Maegor- Ejecuta a Otto o tu reinado será igual de débil que el del abuelo

-¿que es ese ruido?- pregunto Daemon

Los cuatro caminaron hacia la ventana más cercana que tenían, Daenerys y Maegor miraban alarmados la escena, grandes barriles rodaban por la colina de Aegon apenas se lograban ver blancas cabelleras.

Daenerys fue la primera en correr seguida de su esposo, ambos se encontraban agradecidos de tener a sus dragones cerca o el final hubiera sido trágico, Canibal logro agarrar un barril mientras que Drogon otro, una ola de sentimentos aterradores invadió a la pareja al ver el último barril rodar, el chillido de Caraxes resono junto al sonido de sus garras atrapando el barril evitando que el último barril cayera por el precipicio

Maegor tomo con violencia el cuerpo del barril sacando a Visenya asustada al borde de las lágrimas por instinto la rodeo con sus fuertes brazos agradeciendo a todos los malditos dioses de tenerla con el sana y salva, su mirada paso hacia su esposa quien abrazaba a Rhaegar quien estaba llorando asustado, el terror volvió a invadirlo, Aerea no estaba y como en sus tantos sueños el miedo a perderlo lo consumió, arranco a su primogénita de los brazos de Daemon para luego abrazarla

-¿Que tenemos que hacer para que se comporten?- regañó Daenerys furiosa- Los encerrare y les daré pan y agua por meses

-Sin postres y un solo baño al día- afirmó Maegor

-Sin entrenamientos y luchas

-Preferimos la muerte- se quejo Aerea desde los brazos de su padre

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 19, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Reencarnacion TargaryenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora