Narra TN
El día comenzó de la mejor manera posible, si bien ayer en la tarde pasamos por mucho ahora me sentía un poco más tranquila así que después de desayunar en la cama ambos decidimos salir y distraernos un rato, nos duchamos y caminamos rumbo al centro comercial, mientras íbamos de camino con nuestras manos tomadas una sonrisa se posó en mis labios, realmente me sentía feliz a pesar de todo.
Cuándo llegamos finalmente a la plaza la recorrimos mientras íbamos entrando a las tiendas para comprar un par se cosas, no muchas en realidad sólo unas playeras y unos pantalones, cuándo ya había pasado cerca de una hora a ambos nos dió hambre así que nos dirigimos a la zona de comida para decidir cuál sería el menú de esta tarde.
Escogimos entrar a un restaurante de comida Italiana que se veía apetitoso y no nos equivocamos, cómo ya era costumbre cada uno pidió un platillo distinto así ambos podríamos probar, la cena transcurrió de maravilla y sin ningún evento destacado, sólo éramos él y yo en una mesa degustando de una excelente pasta acompañada de una copa de vino.
Al terminar pagamos la cuenta y salimos de allí. Nos tomamos otra hora para caminar y cuándo finalmente decidimos que había sido suficiente regresamos a casa. Al llegar Otto abrió la puerta y yo entré primero seguida de él, ya dentro ambos nos dirigimos a la sala dónde pusimos nuestras bolsas con todo lo que habíamos comprado.
Nos sentamos en el sillón mientras bebíamos de una botella de agua que Otto había traído de la cocina.
- No recordaba que ir de compras fuera así de agotador -
- Lo sé, ahora recuerdo porqué no soy fan de ir a los centros comerciales, aunque fue divertido sobre todo la compañía -
- Concuerdo contigo -
Y justo en ese precioso instante un silencio nos inundó, pero no era para nada incómodo, al contrario me sentía tan cómoda en este momento sin tener que decir palabra alguna, me giré para contemplar a Otto y lo que mis ojos se encontraron me maravilló por completo.
Estaba sonriendo mientras mostraba sus dientes perfectamente alineados, su cabello alborotado con esos rizos en los que amaba enredar mis dedos, se había quitado sus anteojos verdes dejándome ver esos ojos color avellana que tanto amaba; tras un momento él también se giro para verme directamente a los ojos.
Lo que había comenzado con un simple gesto tierno se convirtió en un momento de miradas intensas y de complicidad, dónde con la mirada podíamos expresar tantas emociones juntas que ni con mil palabras podríamos plasmar en una carta.
Lentamente y sin prisa nuestros rostros se acercaron hasta poder percibir el aliento del otro llenandonos de su esencia, conviertiendo su respiración en la mía. Mis ojos viajaban por todo su rostro tratando de guardar cada uno de sus más imperfectos detalles en mi memoria.
Entendiendo exactamente lo que el otro pedía sin pronunciar palabra alguna sellamos esa distancia que aún nos dividía estampando nuestros labios haciéndolos uno sólo, invitándolos a bailar juntos.
Narra Otto
Mientras compartíamos aquella expedición en dónde nos adentrabamos en los rincones del otro, sentí a TN removerse para sentarse a horcajadas en mis muslos con cada pierna suya a mis costados; gesto que si bien me sorprendió no me hizo alejarme de ella en ningún momento, no hasta que nuestros pulmones protestaron por aire.
Al alejarnos mí vista viajó por todo el rostro de TN analizando cada detalle, tratando de averiguar cómo seguir y sin duda se dió cuenta de mis pensamientos ya que habló de inmediato.
- Quiero dar el siguiente paso contigo Otto -
- ¿Estás segura? - dije mientras la veía expectante de su respuesta -
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Una Segunda Oportunidad
FanfictionDespués de la ruptura del multiverso, en dónde los universos se mezclaron aparece el Doctor Octavio totalmente desconcertado en una nueva realidad. Ninguna de sus memorias se borró recordando todo lo que le sucedió a su querida TN, dada la tecnologí...