Psicosis Nebulosa |Libro 2|

~ Odio ~

Me recuerda a todo lo que quiero olvidar y es la razón por la cual verle a los ojos supone un mefitico suplicio.

Es cómo si colores nunca antes vistos se mezclarán en uno para generar esa imagen suya por encima de mi hombro, como si me susurra los secretos de su existencia.

Por ello y más lo odio.

He logrado detener a mi duro corazón pero no he podido contener a mi imaginación, que constantemente traza su rostro con pinceladas del pasado que no debe volver.

Cuando su risa se mezcla con la mía, cuando su mano nunca toca la mía y está bien, todo está bien hasta que mis ojos nunca pierden de vista a los suyos, como si comprobara que está bien, que es feliz.

Y ni hablar de la familiaridad de nuestros labios, el somnífero efecto que le da a mí cerebro el contacto de su boca, la magnifica forma en la que me sigue el ritmo.

Por ello y más lo odio.

Quiero ser libre de esto que sacude mucho de mí, quiero luchar contra esto tan extraño que no había pasado nunca por mi camino, quiero poder alejarme sin dañarle, quiero saber si ya me ha llegado la hora de caer.

Espero que no porque odiaría arruinar esto que pasa y no pasa.

Odio quedar en la mitad de la cuerda, donde se lo que es pero no quiero que pase.

Sin embargo el tiempo pasa y la confusión hoy se transforma en hojas secas transportadas por la gélida ventisca.
Todo da paso a ser un lejano recuerdo, recuerdo de cuándo la musa no fué más que un impostor, cuando no fué más que una manera de crearle delirios a las manos que dieron paso a su creación.

Por ello y más lo odio.

Todo verso que pudo haberse escrito, no lo fué.
Toda caricia que se dió, en realidad no pasó.
Todo beso que su boca me obsequió, en la finidad de su tiempo desapareció.

Y entonces nada pasó.

Solo quedó el odio, la ira, el rencor y el deseo de con sus lágrimas tejer el lienzo y con su sangre pintar las sonrisas.

Por ello y más lo odio.