𝐌𝐄𝐓𝐀 [𝗕𝗲𝗻 𝟭𝟬 𝗢𝗰]

𝐏𝐫𝐨́𝐥𝐨𝐠𝐨: 𝐋𝐨𝐬 𝐓𝐞𝐧𝐧𝐲𝐬𝐨𝐧

Tras el nacimiento de los mellizos, fue una decisión sabia la de Sandra de hacerse la ligadura.

Los amaba con locura, y con ellos dos ya le bastaba y sobraba. Su hijo era un rebelde en toda la regla, un niño alegre e hiperactivo. Mientras su hija intentaba seguir su ejemplo, aunque no era capaz de seguirle el ritmo.

Había nacido con delicadas complicaciones del corazón, lo que la volvía frágil en todo sentido. Su crecimiento físico se había visto afectado por ello, pero por suerte, su desarrollo cognitivo era normal.

Al menos podía contar con que su mellizo estuviera con ella. Benjamin gustaba de hacer muchas cosas, pero en todo momento, quería a su hermana cerca. Le ponía el doble de esfuerzo a los deportes y a los juegos para compensar el limitado movimiento de Aileen, haciéndola sonreír con cada locura suya y con cada logro que obtuviese.

Aunque Sandra no entendía del todo por qué Ben no podía llevarse bien con su prima Gwen. En consecuencia, Aileen tampoco, pero no al mismo grado que Ben, aunque al final acababa poniéndose del lado de su mellizo. Supuso que era algo de hermanos, y que Ben solo podía congeniar con su hermana de sangre.

Estaba feliz de verlos tener un fuerte lazo de hermandad. En un principio, admite que tuvo miedo de que su niño no pudiera comprender la gravedad de los problemas de salud de su hermana, y la dejase a un lado. Grande fue su sorpresa cuando, desde bebés, Ben ya estaba al pendiente de Leen. Ya sea queriendo dormir con ella en su cama de hospital, compartirle sus juguetes, o acompañarla en sus consultas al cardiólogo. Y una vez comenzaron a caminar, él se aseguraba de tomarle de la mano en todo momento.

Su esposo también estaba feliz. Podían tener dificultades, pero nada era un obstáculo para que un Tennyson pudiera avanzar. Ni siquiera una enfermedad que ponía en riesgo la vida de alguno.

Estaban seguros que Benjamin y Aileen sabrían enfrentar el mundo como los hermanos que eran. Y no se equivocaron.

En los siguientes años, los nombres de sus hijos serían reconocidos no sólo en su mundo, sino también en el resto de las galaxias. Solo que no sabían que uno de ellos tenía que morir antes de tiempo para que eso suceda.