Secuestro. Parte 2

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Five Hargreeves

Me pongo de pie después del fuerte golpe que T/n me propinó con un objeto que quien sabe que era.

—¡Encontré el interruptor! —anuncia Luther al encender las luces.

Frotándome la nuca, veo a T/n sosteniendo un trozo de madera, ligeramente despeinada.

—¡Five! —exclama con una sonrisa, y me acerco rápidamente para asegurarme de que esté bien.

—¿Te lastimaron? —pregunto, preocupado, mientras la examino.

—Estoy bien. —responde, dejando caer el pedazo de madera al suelo, y noto algunas marcas en sus muñecas.

Tomándole las manos, observo de cerca.

—¿Y estas marcas? —pregunto, y ella se libera de mi agarre.

—No es nada, solo me ataron a una silla. —dice.

Claro, no es nada.

Cuando T/n desapareció, decidí regresar al lugar para buscar pistas. En el suelo, encuentro una tarjeta que pertenece a Hazel y Cha Cha.

Este par suele ser astuto, tomaron a T/n como rehén sabiendo que vendría a buscarla. No tardarán en regresar.

Necesitamos salir, pero primero, me ocuparé de ellos.

Diego se encuentra en la puerta de entrada de la habitación y escucho que los sujetos han vuelto, lo que significa que ya está peleando contra ellos.

—Vamos. —le digo a T/n mientras la tomo de la mano y la encierro en el baño sin darle tiempo para protestar.

—¡Five! ¡Déjame salir! —grita desde adentro.

—¡Deja de golpear la puerta! —le digo desde afuera. —Nos ocuparemos de los enmascarados.

Los sujetos entran a la habitación, Diego al parecer no ha podido detenerlos, en cambio Luther al notar sus armas, decide retroceder.

Yo me teletransporto detrás de los sujetos y les asesto algunos golpes antes de regresar para tomar un cuchillo de la cocina. Clavo el cuchillo en el brazo de Hazel mientras Cha Cha dispara desesperadamente a su alrededor.

Diego usa sus habilidades con los cuchillos y me ayuda a herir a los enmascarados. Me muevo rápidamente y les propino golpes antes de que puedan reaccionar. Finalmente, logro quitarle una de las pistolas a Cha Cha, mientras veo a Luther sujetando a Hazel por detrás y Cha Cha en el suelo.

La pelea fue más breve de lo que esperaba, y justo cuando me dirijo hacia donde encerré a T/n, escucho un disparo que se dirige hacia mí. Klaus, quien llega tarde, noquea a la persona que disparó con un jarrón cercano.

Me dispararon. Siento que me mareo, pero sigo de pie mientras miro mi estómago. Mis hermanos se acercan.

—¿Estás bien? —preguntan preocupados, y yo simplemente abro la puerta para dejar salir a T/n.

Después de eso, no recuerdo mucho. Comienzo a sentirme débil y caigo al suelo, como si mis piernas se hubieran dormido.

Lo último que recuerdo es ver a todos agachándose y diciéndome algo que apenas puedo oír como un eco muy tenue.

***

Mis ojos se abren lentamente, pero la luz encendida que me golpea directamente me obliga a cerrarlos nuevamente.

—Niño Five, es un alivio ver que has despertado. —escucho la voz de... ¿Pogo?

Al abrir completamente los ojos, noto la presencia de mamá, monitoreando meticulosamente algunos aparatos.

Te necesito más que a mi café || Five y T/nDonde viven las historias. Descúbrelo ahora