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—Bienvenida, adelante, cariño — Hyuna abrió la puerta de su hogar, dejando pasar a una insegura y temerosas Lisa, quien jugaba con los dedos de sus manos debido

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—Bienvenida, adelante, cariño — Hyuna abrió la puerta de su hogar, dejando pasar a una insegura y temerosas Lisa, quien jugaba con los dedos de sus manos debido. Los nervios. —Tranquila Lisa, sabes que dentro de estas paredes, sólo somos tú y yo, no hay personas extrañas ni indeseadas, ¿De acuerdo? — preguntó, para después guiarla hacia su consultorio, en dónde tenía un sofá cómodo en dónde Lisa se acostaría y Hyuna estaría en el sofá de a lado, escuchando y dando consejos y opiniones.

Lisa se sentó en el sofá largo, mientras que Hyuna camino a su escritorio, tomando su libreta en dónde ya había tenido diagnósticos atrasados de Lisa. A decir verdad, Hyuna era una persona muy organizada e inteligente, ya que tenía una libreta para cada uno de sus pacientes y así podía llevar el control con más organización y facilidad.

—Te puedes recostar, cariño — informó, la castaña no dudo en hacerlo, a pesar de no haber sido una orden, ella obedeció. —¿Quieres contarme algo en particular o el como te ha ido estos días en el instituto?

Lisa mordió su labio inferior, dándose un momento para pensar bien lo que había estado pasando con ella y su alrededor.

—Nada interesante — alzó los hombros, restándole importancia. —Creo que Chaewon es mi amiga — confesó. Hyuna sonrió y asintió con la cabeza, dejándola que continuará hablando. —Estoy haciendo un trabajo en equipo — volvió a decir.

—Puedes continuar, yo estaré escuchando — informó, a lo que Lisa asintió con la cabeza, mirando hacía el techo y soltando el aire estancado en sus pulmones.

—Me siento de nuevo igual a cuando estaba en el internado — confesó de repente, sorprendiendo a Hyuna y haciendo que su rostro tuviera facciones de seriedad.

—Sabes que no debes dejarte llevar por lo que tu cabeza diga, ella no es la que manda, la que manda eres tú — dijo.

Lisa la miró unos segundos, antes de volver a hablar.

—Mi vida está haciéndose pedazos y lo único que sé hacer, es golpear al primero que me haga algo, siento irritación, enojo y odio, no sé cómo describir la combinación que se hace entre esos tres y que me hacen perder el control — Lisa miró hacía la ventana, tratando de controlar el llanto que sentía que iba a de desbordar en cualquier momento.

—Tienes que llorar, Lisa. Saca todo lo que te está dañando, sólo así podrás empezar a soltar poco a poco, cada uno de los problemas y traumas que traes desde que eras solamente una niña — la castaña negó con la cabeza, tragando todas esas lágrimas que querían salir, pero que sin embargo, Lisa les negó salir.

—No voy a llorar por cosas que están en en pasado. Y ahí deben de quedarse — Hyuna negó con la cabeza, soltando un suspiro.

—De todos los pasos pequeñitos que habías dado, retrocediste corriendo en un abrir y cerrar de ojos.

Lisa miraba con aburrimiento como los alumnos iban entrando en el aula de poco a poco, hasta que el timbre sonó por los pasillos, dando inicio a las clases

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Lisa miraba con aburrimiento como los alumnos iban entrando en el aula de poco a poco, hasta que el timbre sonó por los pasillos, dando inicio a las clases.

La castaña frunció el entrecejo al ver al profesor de álgebra entrar con una chica detrás de él, portando correctamente el uniforme y con una sonrisa.

—Chicos, quiero presentarles a su nueva compañera — dijo, mirando con una sonrisa a la chica. —Por favor, preséntate a la clase.

—Hola, soy Shin Yuna, espero y cuiden de mi — sonrió amigable.

—Bien Yuna, busca un lugar vacío y siéntate, empezaremos la clase de hoy — la chica sonrió y asintió.

Lisa la miraba con una cara de verdadero asco, ¿De dónde habían sacado a esa loca?
Bufó mientras negaba con la cabeza, no, eso no le interesaba, así qué, colocó sus brazos en la paleta y recostó su cabeza, tratando de dormirse.

En el almuerzo, Chaewon se sentó con Lisa es su mesa, ambas almorzaban mientras que Chaewon contaba algunas cosas e incluso alguno que otro desastre que sus padres y ella hacían cuando salían de vacaciones. La castaña sólo asentía y continuaba comiendo.

Los palillos de Lisa se quedaron estáticos en el aire, antes de mirar a la persona que estaba parado a un costado de la mesa en dónde ella estaba desayunando con Chaewon.

—¿Se te perdió algo? — preguntó, mirándolo seriamente.

—¿Puedo hablar contigo un momento? — preguntó, notandose un poco nervioso a la hora de preguntar.

Lisa lo miró un segundo, antes de aceptar y seguirlo cuando él se dió la media vuelta, indicando que lo siguiera, la castaña le dijo a Chaewon que regresaba en un minuto, antes de irse.

Lisa camino con pereza detrás del alto, mientras que Jungkook se estaba preparando mentalmente para poder entregarle su diario, sin embargo, quería hablar de algo con ella. Jeon había leído una página que lo había dejado completamente sorprendido y no sabía que pensar respecto a la vida de la castaña.

Jungkook se detuvo en el pasillo solitario, se aseguro de que realmente lo estuviera, antes de suspirar y abrir su mochila, busco entre sus libretas y cuando lo encontró, lo saco de su mochila, para después extenderlo hacia Lisa, quien lo miraba seria.

—Te juro que yo no lo tome a propósito, ese día que golpeaste al novio de Tzuyu, se cayó de tu mochila y no sabía cómo regresarlo sin que pensarás mal — Lisa miró el diario que Jungkook le extendía.

—Lo leíste, ¿Verdad? — preguntó, aunque ya sabía la respuesta al ver su rostro y que él la miraba con cierta...¿Lastima o melancolía?

—Sí, lo leí — confesó. —Al principio pensé en meterlo en tu mochila sin que te dieras cuenta y quedarme callado, sin embargo, pude leer algo en una hoja que me dejó muy preocupado — comentó.

Lisa sonrió sin gracia y asintió con la cabeza.

—Jodida mierda — murmuró.

—¿Tú realmente...? — dejó la pregunta al aire, haciendo que la castaña lo mirara.

—Sí.

Jungkook tragó saliva y bajo su mirada a sus brazos, para después regresar la mirada a su rostro.

—¿Qué fue lo que pasó por tu mente cuando lo intentaste? — preguntó, muy curioso al respecto, pero más que curioso, quería hacerle ver a Lisa que no ganaría nada haciendo ese tipo de cosas.

—¿Qué pasó por mi mente? — preguntó burlona. —Cuando estás a punto de cortarte las putas venas para morirte de una vez, nada pasa por tu mente en ese momento, te quedas en blanco, tus manos reciben órdenes de tu cabeza y tu cuerpo las obedece — dijo, mirando el diario de reojo antes de mirarlo nuevamente a él. —Quedatelo, ya no me sirve. Sigue leyendo, te encantará la historia del bufón triste.

 Sigue leyendo, te encantará la historia del bufón triste

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—LaOmmaChida💜💜✨✨✨


Quizás parezca que lo de “el bufón triste”, no tiene sentido, pero lo tendrá y ya sabrán pronto el porque.

¿Alguna teoría del porque se dijo así misma bufón triste?

¡Los amo muchísimo, besos! 💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋

»She 🥊 +18 [ Lizkook ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora