Katsuki no la volvió a ver simplemente se marchó de la cocina mientras la castaña lo veía alejarse, estaba triste y se sentía traicionada...eso no era posible porque ellos realmente no son nada pero desde que despertó en esa habitación sentía que ya lo había visto desde hace mucho tiempo, Ochaco solo se dirige al patio deja los zapatos en la entrada para comenzar a caminar descalza y dirigirse a la orilla del mar...el agua se veía bellísima como siempre ha sido desde que ella nació, cierra sus ojos para disfrutar más el sonido de las olas.
"¿Qué pasa si sales del agua?- pregunta una voz masculina.
-Mi cola se convierte en piernas- lo mira- cómo las tuyas ¿Quieres ver?
-M-mejor para la próxima que venga- se escuchaba nervioso- para traerte algo de ropa.
-Me encantaría"
Abre sus ojos para ver el mar infinito mientras su corazón está triste y una lágrima resbala de su ojo izquierdo...¿Quién era ese joven con el que hablaba?...no entendía que estaba pasando pero cada que esos recuerdos llegaban a su mente su corazón dolía...como si algo se clavara ahí, se quedó un poco más para luego dirigirse a esa casa mientras tanto Katsuki se encontraba acostado en su cama reflexionando en su comportamiento, jamás en su vida había perdido el control con ninguna mujer, ni siquiera con Camie, tomo su celular para hablar con su prometida pero lo que apareció fue la foto de la castaña.
Él se levantó de su cama para sentarse y apreciar mejor la foto, cabello castaño como el chocolate, ojos grandes y redondos se bello color avellana, sonrisa enorme y radiante con bellos labios rosados y carnosos...viera donde lo viera...ella era realmente hermosa, como una criatura sobrenatural pues si belleza era inexplicable, tocó la opción de borrar pero no podía ¿Por qué?...¿Por qué mierda no podía? aprieta sus dientes, estaba realmente frustrado, solo puede bloquear su celular y dejarlo en la cama...el resto del día no se hablaron, el cenizo no salió de su cuarto y ella solo se quedó en la sala viendo el álbum de fotos, hasta que el timbre sonó, se levantó para ir abrir y ver quien era la persona que estaba llamando.
-Hola linda- saluda la pelirrosa con una gran sonrisa.
-H-hola- responde tímidamente.
-Ya era hora que llegarás- ambas mujeres observan al cenizo- se me hará tarde por tú maldita culpa.
-Pues ya estoy aquí cariño- entra a la casa tomando a la castaña de su mano- ya te puedes ir.
El de ojos carmín la mira con mala gana pero sus ojos hacen contacto con los avellanos así que desvío su mirada.
-Te la encargó- toma sus llaves de su moto.
-Tú tranquilo que está muñequita está en buenas manos- ambos se quedan viendo para luego la joven comenzar a reír- parecemos dos esposos con una hija.
El cenizo se sorprende por lo que dijo su amigo para luego arrugar su rostro en signo de asco.
-Contigo jamás.
-Si, como sea- se voltea a la castaña- ya vete, aquí sobras.
-Tks maldita seas mapache de mierda- frunce su entrecejo.
Estaba a punto de irse pero una pequeña mano toma la suya así que voltea y se topa con la mirada de su inquilina.
-¿V-volverás?- pregunta con temor, el joven solo la mira con asombro.
-Si, volveré- coloca su mano contraria sobre la joven para retirar la ajena- así que comportarte.
-Si- sonríe la castaña.
Mina solo observa lo que estaba sucediendo y sintio mucha pena con ese par, era increíble el como Bakugou cambiaba su forma de mirar porque aunque aún lo hacía con su típico ceño fruncido con ella era diferente...en sus ojos se veía algo diferente.
ESTÁS LEYENDO
El hilo rojo ♥️Kacchako❤️
Romance-¿Quién eres?- pregunta el niño La pequeña trata de ocultarse lo más que puede entre las rocas, estaba temerosa, tenía miedo y no era para más...era la primera vez que veía una criatura como esa... -¿No escuchas?- vuelve hablar con su entrecejo frun...