Capitulo 3

88 3 0
                                    


Capitulo 3: ¿Hermano?

La madriguera
fuera de la villa Ottery St. Catchpole
06/08/1992

Me volví hacia los gemelos, quienes me miraban con esos ojos pícaros, como si estuvieran a punto de lanzar algún comentario que me haría sonrojarme más de lo que ya estaba.

—¿Practicas algún deporte? —preguntaron al unísono, como si fuera la pregunta más normal del mundo, aunque noté la chispa de curiosidad en sus rostros.

—Uh... —empecé a responder, pero no pude terminar.

George, el más rápido de los dos, interrumpió con una sonrisa ladeada.

—Suenas... —dijo él, estirando la palabra para crear suspenso, mientras Fred lo observaba con una mirada cómplice.

—Increíble —finalizó Fred, completando la oración con una certeza que me hizo mirar al suelo, sintiendo que mis mejillas comenzaban a arder.

No estaba acostumbrada a ese tipo de comentarios, y mucho menos de dos chicos que acababa de conocer. Sin embargo, algo en la manera despreocupada y sincera en que lo dijeron hizo que una pequeña sonrisa se asomara en mis labios. Era difícil no reírse cuando los gemelos Weasley estaban cerca.

—Bueno, ahora que lo dijimos, sigue con tu oración —dijeron ambos al mismo tiempo, como si fuera parte de una coreografía que habían ensayado durante años.

Los miré, ligeramente apenada pero divertida. Era imposible no sentirse cómoda en su presencia, aunque claramente me estaban tomando el pelo.

—Uh, no —murmuré, bajando un poco la mirada mientras trataba de esquivar sus ojos curiosos. Sabía que mi respuesta los sorprendería.

—¿No? —exclamaron los gemelos, fingiendo una conmoción exagerada, como si la idea de no practicar un deporte fuera algo completamente inaudito en su mundo.

Asentí con la cabeza.

—¿Ustedes practican algún deporte? —pregunté, más por cortesía que por otra cosa.

Fred y George intercambiaron una mirada rápida, y luego, como si hubieran ensayado su respuesta durante años, dijeron al unísono:

—Sí, jugamos quidditch mágico.

Mi curiosidad se despertó de inmediato, ya que la palabra "mágico" hacía que todo sonara más fascinante.

—¿Mágico? —repetí, levantando una ceja mientras trataba de imaginar cómo un deporte común podría ser transformado por la magia. De pronto, la idea de los deportes mágicos me intrigaba más de lo que pensaba.

—Sí, lo conocerás cuando llegues a Hogwarts —dijeron, de nuevo perfectamente sincronizados, como si pudieran leer la mente del otro.

La mención de Hogwarts me hizo sonreír. Aunque todavía no sabía mucho sobre lo que me esperaba en esa escuela, la idea de descubrir un mundo lleno de magia y nuevas experiencias me emocionaba más de lo que quería admitir.

—Oh, suena interesante —respondí, pero antes de que pudiera decir algo más, una voz familiar me interrumpió.

—¿Emma? —dijo alguien a mis espaldas.

Me giré lentamente, y ahí estaba él. Un chico más o menos de mi altura, con una ligera expresión de asombro en el rostro. Sus gafas simples y circulares enmarcaban sus ojos azules, que me recordaron los míos. Su cabello castaño estaba desordenado, como si hubiera llegado corriendo. De inmediato supe quién era, aunque verlo en persona después de tanto tiempo sin saber de él era como un golpe inesperado.

Era él. Mi hermano.

—Soy Harry —dijo, un poco incómodo—, tu hermano.

Por un momento, me quedé sin palabras. Sabía que tenía un hermano; el profesor Dumbledore me había hablado de él. Sin embargo, nunca imaginé cómo sería encontrarnos por primera vez. En mi mente, había visualizado este momento tantas veces, pero nada de lo que imaginé se parecía a lo que estaba sucediendo ahora.

—¿Hermano? —repetí, no porque no lo creyera, sino porque la palabra se sentía extraña al salir de mi boca. Tantos años sin saber nada de él, y ahora estábamos aquí, frente a frente, como si el destino finalmente nos hubiera reunido.

No me malinterpreten, siempre supe que tenía un hermano, pero jamás lo había conocido. Y ahora, aquí estaba, con su cabello desordenado y esos ojos que me recordaban tanto a mamá... era una mezcla de emociones difíciles de procesar. Todo esto de no saber de mi familia durante 11 largos años era confuso. No, confuso no. Más bien era abrumador.

Harry parecía igual de desconcertado que yo. Sus ojos estudiaban mi rostro como si intentara encontrar en mí algo de lo que había escuchado, algo que lo conectara a nuestra familia perdida.

—Dumbledore me habló de ti —dije finalmente, tratando de romper el silencio incómodo.

—A mí también me habló de ti —respondió Harry, con una sonrisa tenue, aunque podía notar que él también estaba procesando la situación.

Nos quedamos mirándonos durante unos segundos más, sin saber realmente qué decir o hacer. Había tanto que desconocíamos del otro, y aún así, había un lazo invisible que nos conectaba. Aunque nunca habíamos crecido juntos, había algo en su presencia que me hacía sentir que, de algún modo, no estaba sola en este nuevo mundo.

Mientras Fred y George observaban la escena en silencio por primera vez, Harry y yo intercambiamos una mirada que parecía decir más de lo que las palabras podían expresar en ese momento. Ambos sabíamos que, aunque todavía no nos conocíamos del todo, teníamos algo muy importante en común: éramos familia.

____________________________________________________________


Chapter create by: Mary



THE NIGHT WE MET | Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora