↝Cap.3

51 4 0
                                        

↝1908↝

-Por fin me libre de ella.- suspiró aliviado, por fin estaba en casa, necesitaba un baño y uno muy largo para quitarse toda la sangre que tenía encima.

-Es bueno ver que regreso mi señor.

-Buenas noches Malakia.

-El baño ya está listo.

-Gracias.

-Papá, que bueno que ya regresaste.

-Hola mi niña.

-Papá... ¿Sabes algo de Alastor?

-Solo que sigue en luto señorita, sabe que una perdida así afecta a cualquier ser humano.

-Supongo. Sabes que la santa muerte no nos ha visitado en ningún momento.

-La muerte... Es fascinante si lo piensa señorita. En algún momento incluso a nosotros nos llegará tarda más pero eventualmente ella nos llevará consigo.

-Avísame por favor cuando este lista la cena.

-Sí señorita.
↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝

-¿Cómo estuvo tu día?

-Como siempre supongo.

-Esta chica ya no será problema.

-No, ya me deshice de ella ya no nos molestará más mi niña.

-¿Cómo estuvo el trabajo?

-Bien... La perfumería está mejor que nunca.

-Quisiera ver a Alastor

-Hija debes darle su tiempo, perder a su madre no ha sido fácil para él.

-Debe serlo. Yo me sentiría igual si algo les pasará.

-¿Cómo?

-A Malakia o a ti. Creo que no podría.

-Señorita...- estaba conmovido nunca había escuchado algo parecido que se preocuparan por él.

-Lo sé hija. Se que Malakia te importa mucho. Pero debes entender a tu amigo cuando el tenga ánimo de hablar seguramente la primera con la que lo hará será contigo.

-Sí papá. Con permiso, la cena estuvo deliciosa Malakia muchas gracias.

Se retiró a su cuarto que estaba más frío que antes por alguna razón. Fue entonces cuando se dió cuenta de que no estaba sola.

-Tranquila seguramente solo es un alma en pena que no encuentra su camino... Pero es demasiado bajo y además... El olor es demasiado fuerte no es un alma en pena. Es un demonio y uno fuerte en olor a azufre es demasiado.

Tengo que regresar abajo sin alarmarlo.

Salio de su habitación de forma casual. Para que esa presencia no se sienta intimidada.

-Hija, ¿Qué pasó? Pensé que estarías en tu habitación.

-Papá... Hay un olor a azufre es muy fuerte.

-Azufre.

-Mi señor podría ser.

-No, no están idiota para llegar a mi casa y entrar a la habitación de mi hija. Espera voy contigo.

𝑷𝒆𝒓𝒇𝒖𝒎𝒆↝Alastor & TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora