𝑫𝑬𝑺𝑰𝑹𝑬 𝑨𝑵𝑫 𝑻𝑬𝑴𝑷𝑻𝑨𝑻𝑰𝑶𝑵

°→ҼҎأֆoժأo 12

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モριѕ☉dι☉ (12)
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( 𝕮𝖔𝖗𝖊𝖆 - 𝕾𝖊𝖚𝖑 )

Las grabaciones terminaron con éxito y el vídeo clip de Jungkook estaba casi listo para ser lanzado oficialmente en todas las plataformas oficiales.

En todo el viaje de vuelta a corea, Jungkook no hablo con Jimin. Al parecer aún seguía enojado por el incidente que pasó con Hyunjin.

El menor trato varias veces de poder hablar con él pero no lograba nada, Jungkook no le decía nada y lo evitaba en todo momento. Eso lo puso muy triste y se sintió culpable, incluso creía que era su culpa que no se hablarán y estuvieran distantes.

《𝑴𝒊𝒏𝒖𝒕𝒐𝒔 𝒅𝒆𝒔𝒑𝒖é𝒔 》

Al llegar a casa, Jimin simplemente se tiro sobre el sofá y suspiro triste. Jisung por supuesto se dio cuenta del estado de ánimo de su sobrino, por ello se sentó junto a él para platicar y que se abriera para contarle que era lo que lo afligía.

—¿Estas bien Jimin? — pregunto genuinamente preocupado.

—Si tío Han — fingió una sonrisa.

—Tu carita dice otra cosa — frunció los labios, nostálgico —. Dime qué sucede, sabes que puedes confiar en mí.

Jimin soltó una baja bocana de aire, deseaba en verdad contarle todo a su tío pero temía como este fuera a reaccionar, no quería más problemas y decidió mantenerlo en secreto para él mismo por el momento.

—Es solo que... — agrego Jimin, luego de unos cortos segundos en silencio —, casi no tuvimos tiempo de pasear juntos en Nueva York tío.

—Lo siento mucho Jimin — acaricio con sutileza el rostro del joven a quien miraba con mucho cariño —. Te prometo que en otra ocasión si lo haremos ¿esta bien?

—Si.. tío Han — una vez más, alzo sus comisuras formando una sonrisa fingida.

—Mi pequeño Jimin.. — pronunció casi en un aludido, estiró sus brazos para darle un cálido abrazo el cual fue correspondido al instante —. No estes triste, no me gusta ver esa expresión en tu rostro.

Jimin de pronto sintió ganas de llorar, era demasiado sentimental y sencible que tan solo con un abrazo se rompía por completo y lloraba sin parar. Pero en esa ocasión debía ser fuerte y evitar llorar o parecer vulnerable, no era el momento aún para que su tío supiera toda la verdad.

—Te quiero mucho tío Han — pronunció casi en un balbuceó.

—Yo también te quiero mi Jimin — respondió ecuánime.

Permanecieron abrazados unos cuantos minutos hasta que tuvieron que separarse ya que Jisung recibió una llamada inesperada.

—¿Hola?

—Han, debes venir ahora.

—¿Paso algo?

—Debemos partir ahora a Busan.