°→ҼҎأֆoժأo 09

673 58 11
                                    


モριѕ☉dι☉ (09)

 ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄
▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃

Cuando Jisung le comento a su sobrino que iría con él a Nueva York, este se puso a gritar y saltar de la emocion. Nunca antes viajo tan lejos y la idea de conocer otro país le parecía bastante emocionante. Tendría la oportunidad de estar en otro país por varios días.

—¡Gracias por llevarme contigo tío! — vociferó eufórico.

—No te emociones tanto, te recuerdo que es por trabajo y debes comportarte cuando estemos allá — aclaro ecuánime.

—Lo se tío, seré muy obediente..— le sonrió tierno —. Estoy muy emocionado, ya quiero viajar cuanto antes.

—Es un viaje de trabajo, además tú sigues castigado jovencito. No puedes salir por tu cuenta a ningún lado.

—¿Qué? ¿por qué no?

—Porque podría ser peligroso, no conoces ese país y podrías perderte.

Jimin hizo mohín.

—Oh, entiendo — refunfuñó en sus adentros.

Jisung sonrió enternecido por la tierna expresión del menor. Para darle algo de consuelo solo se dispuso a acariciar su suave cabellera.

—Si en caso que tenga un poco de tiempo libre, te llevare a conocer la cuidad, ¿Esta bien?

Los ojos del menor retomaron ese brillo de emoción.

—¡Si! ¡muchas gracias tío! — chillo feliz.

Luego de su chillido de felicidad abrazo a su tío, sin asimilarlo aún. En pocos días conocería un nuevo país, uno el cual deseaba conocer hace ya tiempo atrás y lo haría con su tío, la persona más importante de su vida, eso lo ponía aún más feliz.

—Bien, ya es casi medio día y todavía no hicimos de comer — mencionó Jisung —. ¿Que quieres comer?

—Am.. — pensó un poco, pero pronto algo se le vino a la mente —. Quiero lasaña tío.

—Esta bien, entonces lasaña será.

—¡Si!

—Bien, vamos a cocinar.

—¿Puedo ir al baño primero?

—De acuerdo, pero no tardes.

—Si, está bien tío.

Jimin corrió al baño ya que tenía unas ganas enormes de orinar.

Minutos después, finalmente termino de hacer sus necesidades. Lavaba cuidadosamente sus manos y mientras lo hacía su teléfono comenzó a sonar de repente.

—Mi teléfono..

Termino de secarse las manos rápidamente y respondió la llamada.

—¿Hola?

No hubo respuesta.

—¿Disculpe?, ¿quién habla? — indagó extrañado al no recibir respuesta.

𝑫𝑬𝑺𝑰𝑹𝑬 𝑨𝑵𝑫 𝑻𝑬𝑴𝑷𝑻𝑨𝑻𝑰𝑶𝑵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora