44.- LA VUELTA A CASA

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Ese era el tercer día de internación de Jungkook, extrañaba su nido, su casa y principalmente su manada.

Sus padres lo habían visitado y varios de los consejos de su madre habían sido muy útiles.

El omega había despertado temprano, alimentado y cambiado a Jeontae, mientras Taehyung lo asistía. Con mucho gusto ambos habían descubierto que eran un excelente equipo al momento de hacerse cargo del cachorro.

-Amor me preocupa un poco que Tannie haya mordido dos veces a esa enfermera...- dijo Taehyung cargando en brazos al bebé.

-Algo en ella no le gusta y a mi tampoco. Fue a la única que mordió. Voy a confiar en el instinto de mi hijito - sentencio Jungkook.

-Bueno suena lógico... ayer Jimin lo cargo por una hora y solo durmió acurrucado en su hombro.

-Y cuando vino Nam también amor, no es que no le gusta la gente. No le gusta esa enfermera.

-Bueno bebito, que no te gusta de ella, eh? ¿Eh? - dijo el padre alfa con voz aniñada a su pequeño hijo.

-Quiero dormir en mi nido y acurrucarme en el sillón con Jimin y los bebés - suspiró Jungkook.

-¡Hoy es tu día de suerte! - dijo riendo el doctor Choi entrando a la habitación- vengó a darles el alta.

-Siiiii vamos a casitaaaaa amor! - dijo emocionado Tae a su bebé.

Luego de unas cuantas indicaciones y fechas de controles finalmente salían del hospital.

Hiro los había ido a recoger al hospital solo que se encontró con una llamativa cantidad de periodistas así que optó por entrar a subsuelo y recogerlos ahí. El hospital era de la familia Min, así que el acceso de ellos era total.

-Hola Hiro - saludó Jungkook - el es Tannie.

-Señores, que bueno verlos bien - dijo el chofer con su habitual tono - ohhh pero que belleza! ¿Quien es el bebé más lindo? ¿Quien? ¿Quien? - su voz aniñada y dulce al hablarle al bebé.

Era gracioso ver cómo el gra alfa serio que era Hiro se transformaba en una bola de azúcar con los niños. Su hijo ya había crecido y no vivía más con él y su esposa, así que ahora ambos, empleados de la mansión, se dedicaban a malcriar a los niños.

-¿Otro bebé más para malcriar Hiro? - dijo riendo Taehyung.

-No los malcríanos señor... los consentimos un poquito nada más - se defendió el alfa abriendo la puerta trasera donde había una butaca apta para el bebé.

Una vez el Jeontae estuvo acomodado los adultos se disponían a entrar al auto cuando una horda de periodistas con cámaras entró al estacionamiento.

Rápidamente Hiro se puso delante de Jungkook protegiéndolo mientras subían con Taehyung rápidamente al auto y salían rumbo a su casa.

-¿Qué carajos fue todo eso? - preguntó al borde del ataque de ansiedad Jungkook.

-No se amor, déjame averiguar - dijo Taehyung abrazando y perfumando a su esposo. Quien por su parte intentaba calmar al cachorrito que con el alboroto se había despertado llorando.

Llegaron a la mansión en tiempo récord, Jeontae se había calmado pero Jungkook no, esos periodistas los estaban esperando para fotografiar a su bebé. El no quería que nadie conociera su carita. Que su padre fuera una figura pública no significaba que el bebé pudiera ser expuesto.

Las caras de felicidad de los habitantes de la mansión cayó por el piso cuando vieron a un Jungkook sumamente ansioso bajar del auto abrazado a su hijo y Taehyung destilando feromonas de enojo.

Destinados - YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora