Habían pasado algo más de cinco años desde que Jimin había conocido a Yoongi.
Hoy era su quinto aniversario de bodas así como el de Taehyung y Jungkook.Harían una cena para la familia y amigos más cercanos, la vida de toda la manada se había tornado realmente hogareña.
Los mellizos, Nabi, Nina y Jeontae, eran un grupo muy unido, por demás traviesos, cuyo objetivo principal era preocupar a Namseok. El despistado alfa, era bastante protector de los más pequeños, los mantenía lejos de los problemas y jugaba mucho con ellos, lo cierto era que los trillizos habían participado siempre en el cuidado y la crianza de los mas pequeños.
Jimin y Yoongi tenían un cachorrito recién nacido, un pequeño y adorable omega, que era una copia exacta de Jimin. Había nacido hacía un mes y el pequeño era sumamente tranquilo, su única exigencia era, por las noches, ser recostado en el pecho de su padre alfa para quedarse dormido, era así y de ninguna otra forma.
Taehyung y Jungkook solo tenían a Jeontae, no habían vuelto a pensar en el tema cachorros, eran felices ellos tres y sus dos perros, un Pomerania llamado Yeontan nombre dado por su pequeño hijo cuando tenía dos años de vida y un dóberman con "complejo de caniche" según Jin, llamado Bam.
Amy y Hoseok habían tenido dos hijos más, un hermoso alfa de ahora 3 año Hyun-Ki y otro alfita de un año, Soobin.
Actualmente los más pequeños jugaban en el Jardin bajo el ojo atento de los trillizos. Los adultos estaban preparando la cosas para la cena de la noche, a excepción del tío Mimi que dormía con el bebé en su nido, habían tenido una mala noche, con cólicos y Jimin prácticamente no había dormido nada.
Joonseok se levantó de su asiento estirándose, era verano pero sentía más calor del habitual, su cuerpo dolía con su hubiera estado ejercitándose todo el día. Y si bien sus clases de baile eran algo intensas últimamente, eso no justificaba tanto dolor.
-Voy por un jugo de naranjas, ¿quieren? - preguntó a sus hermanos, sentía la inmensa necesidad de algo cítrico y fresco.
-Se me antoja algo más dulce, con miel tal vez - dijo Namjin.
-Sip, algo dulce con canela - concordó Namseok.
El omega entró a la cocina en busca de algo para saciar el repentino antojo de él y sus hermano. Desde que se había levantado ese día, se sentía raro.
Tenía cada vez más calor y su ropa le molestaba en la piel.-Hola Joonie - saludó alegremente Amy a su sobrino mientras luchaba un poco con su hijo menor para darle algo de comida. El pequeño alfa de año se esforzaba más por tirar al piso la comida que de hecho comerla - Vamos Soobin come amor...
-Hola tía - murmuró el omega.
Su tía volteó a verlo, de repente sintiendo el aroma dulce a confituras de limón, eran feromonas de omega y definitivamente provenían de Joonseok.
-Joonie amor ¿Que sientes? - preguntó Amy, su sobrino se estaba presentando y su primer rastro de aroma comenzaba a aparecer.
-Mmmm duele mi pancita y mis encías - dijo de repente el omega sosteniéndose de la mesada, sintiéndose mareado y bastante confundido.
-JIN!! - llamo Amy al omega que estaba en el comedor.
-Joonie, amor! ¿Que tienes? - dijo el padre omega había entrando rápidamente a la cocina, lo primero que sintió fue el aroma de las primeras feromonas del menor, confituras de limón - Ohh mi vida, te estas presentando. Ven vamos a tu recámara.
Jin pasó su brazo por la cintura del omega, las feromonas iban en aumento y le asustaba un poco que justo ese día la casa estaba llena de gente.
Mientras tanto en el parque algo similar ocurría con los alfas. Namjin se había levantado de su reposera, sintiendo demasiado calor y comenzando a agitarse. Namseok no alcanzó a preguntarle a su hermana que le sucedía cuando sus síntomas le llegaron a el también.
Toco sus encías, las cuales dolían un infierno, viendo sus dedos manchados con sangre.
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Destinados - YOONMIN
FanfictionUn alfa pura sangre. Un omega con un pasado doloroso. Una sociedad humana prejuiciosa. La Diosa de la Luna quiso que finalmente sus caminos se cruzaran. Esta es la historia de dos lobos destinados, como se conocieron y todos lo que pasaron para...