Estaba terminando de prepararme para el cumpleaños número veintiuno de mi mejor amiga Roseanne. Celebraríamos en un club ya que esta sería la noche en la que ella finalmente podría acudir a uno legalmente.
Este no era mi caso, yo aún tenía dieciséis años, aunque faltaba un mes y un par de días para mi cumpleaños seguiría siendo ilegal de todas formas.
Rosé me aseguró que todo estaría bien. La mayoría de personas que la acompañaban eran de su edad o sobrepasaban la misma, estaba segura de que yo era la única de menor edad entre aquel grupo, pero poco me importaba. Estaba acostumbrada a relacionarme con gente mayor y mi aspecto físico no coincidía del todo con mi edad.
Roseanne había sido mi amiga desde la infancia, y no había nada que pudiera detenerme para asegurarme de que su cumpleaños fuera inolvidable.
Finalicé de aplicar el maquillaje y me miré en el espejo. Vestía un vestido negro un poco escotado y ajustado a mi cuerpo, que me hacía sentir más adulta de lo que realmente era. Rosé había insistido en que me vistiera apropiadamente para la ocasión, y yo no podía negarle nada en su día especial.
Salí de mi habitación cuando escuché el claxon del auto de Rosé con música bastante bulliciosa esperándome en la entrada de mi casa, se veía radiante con su vestido de fiesta y destinada a disfrutar todo lo que pudiera esta noche.
— Recuerda no llegar tan tarde, cuídate mucho, Jennie. — mamá besó mi frente.
— Lo sé, no te preocupes mamá. Estaré bien. — la abracé y me encaminé al auto.
Rosé y yo sonreímos mutuamente y compartimos miradas coquetas mientras apreciábamos la belleza de la otra. Sabía que esta sería una noche para recordar y estaba ansiosa por ser parte de ella, aunque fuera por unas horas antes de que la noche marcara mi regreso a la realidad de ser menor de edad.
En el auto estaban el resto de sus amigas que también eran las mías. Jisoo y Yunjin.
La música vibrante y las risas de mis compañeras llenaban el vehículo. Estábamos listas para una noche inolvidable.— Toma. — Rosé sacó de su bolsa de mano una tarjeta.
Ya en mis manos la detallé con la mirada por ambos lados y noté que se trataba de una tarjeta de identificación con mis datos, claramente falsa para poder ingresar al club sin problemas.
— Vaya — dije mirándola por ambos lados. — incluso se ve más real que la mía. — reí.
— Dame las gracias, ya sabes que tengo un par de contactos. — guiñó un ojo Jisoo.
Roseanne puso en marcha el auto y nos dirigimos hacia el club, donde la música se escuchaba desde la distancia. La anticipación crecía con cada minuto que nos acercábamos. Era como si el mundo fuera nuestro y no había nada que pudiera detenernos.
— ¿Un strip club? — dije asombrada mientras Rosé detenía el auto.
— Claro, alguien quería celebrar en grande. — escuché a Yunjin riendo en la parte de atrás.
— Estuve investigando. Es uno de los mejores clubs de Las Vegas, me lo agradecerán después. — rió esta vez Rosé.
El club por fuera era un edificio de aspecto moderno y elegante. Su fachada estaba adornada con luces de neón brillantes que iluminaban el camino hacia la entrada. En la puerta principal, dos imponentes guardias de seguridad controlaban el acceso, y tenían un aire de autoridad que dejaba claro que solo se permitiría la entrada a aquellos con la edad legal aunque quizás esa era una gran indirecta.
El letrero luminoso en la parte superior del edificio mostraba el nombre "Frenesí" en letras elegantes y llamativas que titilaban en varios colores. La música pulsante se dejaba sentir incluso desde afuera, creando una atmósfera de anticipación y emoción.
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La Musa de Venus | Jenlisa
RomanceLisa Manobal, cantante y bailarina en un club de Las Vegas, lleva una vida de lujo y secretos debido a su esposo mafioso, Marcus. Cuando Jennie, una joven enigmática, visita el club, ambas se embarcan en un apasionado romance, mientras Lisa lucha po...