Capitulo 28

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Capitulo 28

Hermanas

- ¡Llegó la pizza! - Grito Harper mientras entraba corriendo a mi habitación

- ¿De que la pediste? - pregunté con mira asesina

- Mitad pepperoni y mitad piña, relájate y como había promoción de 2x1, pedí otra de queso y mitad carne

- Perfecto

- Ey ¿Pidieron pizza? - preguntó Casandra mientras se asomaba a mi habitación

- Si, vamos a ver una película, ven a verla con nosotros Cass

- Ah-... ¿Los tres... Juntos?

- Si

- Ammmm, yo no creo que Harry este de acuerdo, mejor vuelvo a mi habitación y-

- Ey Casandra, ven aquí - Grite mientras le extendia una mano - Escucha Cass, se que he sido un pésimo hermano mayor estos últimos años, se que me he alejado de ti y he sido malo pero... Debes saber que tú y Harper - Susurré mientras tomaba a cada una de las manos - Son las mejores hermanas del mundo, y aún que seamos muy distintos, de verdad las amo con todo mi corazón, ahora solo quiero recupera el tiempo perdido con ustedes y volver a ser esos hermanos tan unidos que éramos antes

- Que dices Cass ¿Lo intentamos?

- Ok - Dijo con una gran sonrisa - pero la pizza de pepperoni es para Harry, yo me pido la de piña

- En tus sueños mocosa

- Bueno, a ver si puedes evitarlo

- ¡Ven acá!

- Ay... Por eso es que yo soy la mayor

Narra Icel

Nuevamente la luz del sol comenzaba a entrar por mi ventana, provocando que me despertara de inmediato.
Abrí los ojos lentamente mientras un ligero dolor de cabeza comenzaba a hacerce presente y tome mi teléfono para ver la hora.
¿¡Las dos y media de la tarde!? Carajo pues cuanto tiempo me dormí.
Me levanté de mi cama aún adormilada y me dirigí al baño para poder lavarme la cara y arreglarme un poco el cabello.
Después baje a la cocina en busca de mi tía pero en su lugar solo encontré una pequeña nota que dejó.

"Icel, como vi que estabas tan dormida no quise despertarte, supuse que habrías llegado cansada anoche.
Te deje el desayuno en el microondas, ten un lindo día cariño"

Busque mi desayuno en la cocina para después sentarme sola en la cocina con una cara totalmente muerta.
Lanze un suspiro al aire y me lamente en silencio mientras recordaba cada palabra de la cena de ayer. Nuevamente lanze un par de suspiros más para después mirar todos los mensajes que tenía en mi teléfono.

Algunas notificaciones de instagram y Twitter y un par de mensajes de mamá. Pero lo que realmente llamo mi atención fueron las múltiples llamadas perdidas que tenía. Tres llamadas perdidas de Sabina, una de Tulia y cinco de Alexander.
De inmediato un escalofrío me recorrió la espalda y pensé en lo increíblemente molesto que estaría.
Me imaginé los gritos que pegaría por el teléfono y en qué seguramente pensara que estaba haciendo algo malo. Cómo aquella vez que estuve en el cine con mamá y no le pude responder, se enojo tanto ese día. La forma en que me grito y todo lo que dijo... Estuvo molesto por semanas, tanto que no paso a recogerme a casa durante un mes para ir al colegio.

Solo un verano Donde viven las historias. Descúbrelo ahora