Cap. 9: Celos.

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-- Entonces, ¿la invitación?
 
-- Sep! Siempre cumplo mis promesas.-- Claudia y Charlotte se levantaron dejando las charolas en su sitio, salieron del comedor de la universidad y se dirigían a su aula.
 
-- Ya veo... -- La pelirroja hace una mueca de disgusto, no le agradaba la idea.
 
-- Cariño, ¿estás molesta?
 
-- No! cielo no, solo estoy sorprendida, no puedo creer que ese muchacho estaba más cerca de lo que imaginábamos...
 
-- Así  es... pero, tranquila, solo es porque me ayudó, como te conté. Aparte recién lo conozco y tampoco tengo ningún tipo de interés; lo digo porque estoy viendo que te incomoda esta situación y no es para tanto. Jamás te haría daño de ninguna manera ¿ok? confía en mí por favor.
 
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En la tarde de ese mismo día, Claudia se encontraba distraída en la música que escuchaba con los audífonos, se dirigía al aula de cómputo hasta que sintió que alguien le tocaba ligeramente el hombro. Dió un pequeño brinco y algo asustada giró a ver quién era.
 
--¿AH? -- Volteó a ver quien era y le regaló una amable sonrisa -- Hola Jeon!
 
-- Vine ahorita porque tengo receso y recé por si tenía suerte de encontrarte ya que no coincidimos en el mismo horario. Dime, ¿aún sigue en pie la invitación?
 
-- Claro que si! Veo que no lo olvidaste ja, ja, ja. ¡Qué bueno!
¿Te parece si lo hacemos mañana? Más bien, déjame tu número para decirte a que hora.-- Algo nervioso, Jeon tomó el celular que la chica le ofrecía y escribió su número en este. Titubeo un poco cuando al entregarle el objeto sin querer rozaron sus dedos.

 
-- Per... per... ¡Perfecto! ¿Qué...  comeremos?
 
--Un pollito a la brasa con papitas ¿puede ser?
 
-- Ja,ja,ja ! está bien. ¿Con su gaseosita?
 
-- Con su gaseosita ja, ja, ja!
Listo! nos vemos Jeon, te mando mi dirección para que vayas por mí. Luego me registras.
 
-- Si... si... ¡Bye! Hasta mañana.
 
Y se fue, con la clásica sonrisa de estúpido que ponía desde que la conoció aferrándose como un niño con su mochila. A Claudia se le hizo tierna esa actitud, se volvió a poner los audífonos, giró y...
 
-- ¿Claudia? --- Charlotte había estado detrás de ella.
 
-- ¡Ay! -- agarrándose el pecho por el susto -- ¿Dime cariño?
 
-- ¿Ese era Jeon?
 
-- Si y ya quedé en salir con él mañana. ¿De acuerdo?
 
-- Bien, ¿así de rápido?
 
-- Charlotte...
 
-- ¿Ah?
 
-- ¿Cariño, qué sucede?
 
-- Nada. Perdona... a veces soy algo posesiva.
 
-- ¿Qué?
 
-- Es broma chiquita, ya entremos al aula.
 
Claudia desapareció por el pasadizo pero Charlotte se quedó en la entrada y miraba con mucho recelo a Jeon a la distancia. El brillo que esta tenía en los ojos ya no era buena señal.

 

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