Capitulo # 10

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Anastasia

Dolor.
Ansiedad.
Impotencia.
Frustración.
Ganas de querer desaparecer.
Son las palabras que me definen literalmente.

Hace menos de un mes mi vida era normal, bonita sin ningún problema. La vida normal de una chica normal.

Hace menos de un mes (recuerdo) que me levantaba los domingos alrededor de las 8 de la mañana y salia de mi habitación para el comedor en donde mi mamá ya estaba poniendo el desayuno, mi papá sentado en la mesa leyendo el periódico tomando café y mi hermana jugando con sus muñecas.

-Buen dia familia - dicia yo sentándome en la mesa a la par de mi hermana Eli.

-Buen dia hermañita-

-Buen dia mi niña hermosa - decia mamá terminando de colocar la comida

-Buen dia mija - dicia papá

Todos empezábamos a comer, charlabamos en familia y en la tarde saliamos a dar un paseo familiar.

La pasaba súper increíble y era algo de todos los domingos una rutina, que jamás pense extrañar tanto, algo tan insignificante que hoy en día daría cualquier cosa por volver a revivir eso. No sabía cuanto amaba mi familia, cuanto me hacían feliz.

Cuanto sufría sin estar sin ellos.

Subo las escaleras que me llevan a mi nueva habitación. Entro en ella y me siento frente al tocador mirando el moretón que me dejo la insoportable de Fátima en mi mejilla, me consuela saber que ella termino peor que yo. Nunca en mi vida habia peleado ni si quiera se como hacer eso. Pero la rabia que sentia en mi interior, el  enojo, frustración, tristeza y todas las malas emociones en mi interior hicieron que terminará encima de ella golpeandole la cara una y otra y tora vez, tenia sangre en toda su cara, pero les juro por mi vida que yo sentía que no le daba.

Sentía que mi puño pasaba dándole una caricia de largo a su rostro y no la lastimaba, era como si yo estuviera de espectadora y alguien mas tuviera control sobre mí, alguien con mucha ira.

Pero es que joder, esa chica siempre saca lo peor de mí, yo en ningún momento le hecho algo malo, ni siquiera la miro pero ella carga una rabia un rencor sobre mi.

La puerta de mi habitación es tocada dos veces y entra la chica que me trajo la chareola con comida la misma que me pidió ir al despacho de mi padrino, la misma chica maltrata y que dijo que yo era su dueña. Bueno asi que lo haiga dicho con esas palabras no específicamente pero dio a entender algo asi ¿me explicó?.

- El señor Andrés me dijo que la viniera  ayudar - dice en el marco de la puerta con la cabeza baja, viste ropa de sirvienta de esas que usan las chicas de la rosa de Guadalupe.

La falda color celeste pastel con su delantal blanco, blusa manga tres cuartos de botones color celeste pastel  un moño de peinado  y zapatillas de color negro.

-¿puedo hacerlo? - me pregunta

-Si por favor -

Cierra la puerta y se acerca a mí, va al baño y regresa con un botiquín de primeros auxilios.

Coloca el botiquín sobre el tocador y saca un algodón con alcohol y  una pomada.

Me limpia la mejilla y me coloca la crema, vuelve a ordenar todo y se levanta pero la tomó del brazo.

-¿Te encuentras bien? - me es inevitable preguntar

-Tengo prohibido hablar sobre mí, yo solo tengo que servir a mis dueños - me  responde con la cabeza agachada

-¿Por Dios pero que clase de locos son los dueños esta casa? -

Se va hacía el baño dejando el botiquín en su lugar y se dirige hacia la puerta y se va.

Ashley, asi se llama ella  se nota que sufre mucho y lo peor es que es una niña menor que yo. Y eso me parte el corazón.

Suelto un suspiro de frustración y bajo a la primera planta, en la cocina.

La cocina es grande es el cuádruple de grande que la cocina que tiene mamá... Se me encoje el corazón al saber que no tengo nada de información sobre ellos.

-Hola, buenas tardes - digo entrando

-Buenas tardes niña ¿te apetece algo de comer? - me dice una señora de unos 50 o 60 años es un poco baja, su cabello castaño claro esta un poco blanco por sus canas. Su piel es blanca con unas apenas notables arrugas, sus ojos color  ¿verde o gris?  No lo se pero son muy claros y como esta  al lado de una ventana que refleja la luz del sol no se distinguen con claridad, su voz es suave como la de una abuela muy cariñosa.

-Si por favor -  le respondo

- ¿Que te apetece comer? Te puedo preparar lo que quieras -

La verdad no se que comer y la señora se ve muy cansada aunque se porte muy amable no quiero que ande haciendo cosas, en mi se despertó ese cariño  que tiene una nieta a hacia su abuela y es que ¿como no tenerlo? Si mis abuelos están muertos tanto como maternos como paternos.

Y ella se ve como la  hada madrina de cenicienta solo que con una vestimenta como la de Ashly solo que en color negro.

-No gracias, puedo comer lo mismo que usted esta comiendo - le respondo

-No señorita me regañarían si usted llegara a comer comida de sirvientes, dígame y yo le preparo lo que quiera -

-Insisto por favor, quiero comer la comida de sirvientes -

La señora se cansa de insistir y me termina sirviendo un plato ondo con arroz, una salsa cafésita que tiene verduras y pedazos medianos de carne  de res.

-¿Esto es pepian? -.

-Asi es niña - me responde ella sentándose al frente de mi  de la pequeña mesa que hay en la cocina especial para los sirvientes.

Empezamos a comer en silencio y ella me platica sobre su vida, resulta que se llama Magdalena pero sus amigos le dicen Lena o Lenita tiene dos hijas una es de mi edad 15 años y la otra tiene 20 años, el papá de sus hijas esta muerto hace 10 años y sus hijas se las llevaron cuando eran chiquitas actualmente no sabe donde están. Tiene más de 30 años de trabajar aquí por lo cual conoce a Andrés desde chiquito y ella pudo compartir algo con sus  difuntos padres.

Le cuento mi caso y algo de mi familia le cuento que hace unos dias le empecé a sentir rencor a mi papá pero ella me hizo entender que no fue la culpa de él que fue el momento que lo hizo tomar esa decisión y que por como le he dicho que me ha tratado mi papá dice que él me ama con toda su vida. La verdad no más le dije que si para que dejaramos ese tema aún lado  pero yo le sigo teniendo rencor.

También me dijo que cuando algúna sirvienta tiene hijos dejan que ellos crescan hasta los cinco años aquí ya que cuando cumplen esa edad El Alpha Actúal los escoje y si les parece lindos o inteligentes los escoje y los manda a preparar para que sean sus futuros trabajadores y si es todo lo contrario los manda a orfanatos. A las dos hijas de ella se las llevaron al cumplir esa edad y actualmente no sabe donde están.

Terminamos de comer ella se levantó a lavar los trastes y yo me ofrecí para ayudarla pero ella me dijo que ese era su trabajo. Así que no le insistí más.

Me pasé el resto de la tarde con ella y terminamos viendo una novela turca llamada Sila.

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Pido perdón por si hay faltas ortografíicas... :D

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