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Minhee abrió la puerta y tomó a Hyeongjun del brazo.

—¿Qué le dijiste a tu mamá?

—Que tu mamá me invitó a almorzar.

—Ok, perfecto.

—¿Y tú?

—Sígueme la corriente.

Minhee entró a la casa en compañía de Hyeongjun y fueron recibidos por Mina y la empleada doméstica.

—Hola tía y señora Jang.

—¡Hola, mi amor! —Mina abrazó a Hyeongjun—Me alegra ya verte mejor.

—Hierba mala nunca muere.

—Sabes que esta es tu casa y puedes venir las veces que quieras cuando te sientas mal.

—Lo sé.

—¿Estás muy triste por la partida de Hyunbin? Debe ser horrible... Tú y tu primo son muy cercanos.

Hyeongjun se giró, mirando a Minhee con un rostro de: "¿es en serio?"

—Sí... Estoy muy triste —Dijo Hyeongjun—Pero bueno, él estará mejor fuera del país.

—Espero les vaya bien en la despedida —Mina les sonrió—Lleguen antes de las 6:00 de la tarde, ¿bueno?

—Está bien, ma —Minhee tomó su bolso, colocándoselo sobre los hombros—Ya nos vamos.

—Que les vaya bien en el brunch.

Minhee se despidió de su madre al igual que Hyeongjun y salieron de la casa.

—¿No se te ocurrió nada mejor?

—No.

—¿Y a qué país se va mi primo?

—Rusia.

—Verga Minhee, tienes una mente tan creativa.

Hyeongjun sujetó del brazo a Minhee y comenzaron a caminar en dirección a la plaza.

—Ay espera... Vayamos a la panadería.

—¿Para qué?

—Porque le mentí a Allen y le dije que llevábamos algo para comer.

—¿Por qué estás tan mentiroso últimamente?

—¡Basta! Me da pena llegar con las manos vacías.

—Dios mío, será.

Caminaron hasta la panadería más cercana y compraron un par de galletas junto a una botella de jugo.

Después de eso, se dirigieron hacia la plaza en la que habían acordado reunirse con Jungmo y Allen.

—¿Por qué aún no están aquí? En esta plaza roban y la otra vez estaban dos tipos cogiendo.

Minhee miró extraño a Hyeongjun.

—¿En serio?

—Sí.

—Que asco coger en una plaza y bueno, Jungmo siempre llega tarde.

—¿Jungmo? Jungmo y todos sus amigos querrás decir.

—No quería lanzarle leña a Wonjin.

—No hace falta que lo hagas, yo lo hago por ti.

Pasaron un par de minutos hasta que finalmente visualizaron a Jungmo y Allen.

—¡Hola!

Allen saludó alegre, abrazando a Kang y Song.

Jungmo solo se quedó tieso, ordenando sus pensamientos.

the smoothie guy: how you get the boy ⁕ hamlemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora