Cafune// Ferran Torres

Capitulo 10

Nora

Ferran.

Mire hacia otro lado cuando noto mi mirada, no sabía dónde mirar. Mi móvil sonó y mire hacia delante vi como guardaba su móvil y trague saliva.

Ferran❤️:
Anda que saludas.

Yo:
Bueno... mi madre está delante y el novio de mi madre.

Ferran❤️:
Vergonzosa

Sonreí y dejé el móvil empeze a comer y me levanté para ir al baño, cuando entre a los segundos alguien llamó abrí un poco pensando que era Ferran pero era una persona que no quería ver en mi vida... Mi padre. Cerré la puerta de color y me apoye en ella.

Me dejé el móvil en la mesa.

—Hija abre no te are nada—su voz de malo me asusto

—No... vete—trague saliva

—No me iré hasta que no salgas—negué con la cabeza girándome y abriendo la puerta salí corriendo hacia mi mesa y llegué donde mi madre

—Papá... papá—me estaba quedando sin aire señalé donde él y se giraron—mamá porfavor vamonos—solloroze

—Relájate cariño, no hará nada—mi madre se levantó y me abrazó

—Porfavor...—supliqué

—Hola familia—abri los ojos y giré mi cabeza

—Elias porfavor vete—le dijo mi madre

—¿Porque debería?—preguntó cruzándose de brazos

—Porque si estás aquí nos jodes la vida—susurre

La mano de mi padre se levantó dándome en toda la cara toque en el lado dañado y lloré.

—Sigues igual, igual de malo—otro manotazo que me hizo sentar

—Vuélvelo ha decir, y te juro que no acabas bien—me séllalo con el dedo

—Solo digo la verdad papá—mi padre nego con una sonrisa mala—solo haces daño, apareces en mi mejor momento y quieres conseguir a mamá sólo para hacerle a saber que... la haces daño le has echo daño basta ya no te quiere... ni yo

Lo siguiente no me lo vi venir, varias patadas en mi estomago, no paraba y dolía mucho mi madre y tomas querias apartarlo, me estaba haciendo daño no podía moverme me daba todo vueltas...

—Para joder—llore mientras abría los ojos y tocaba mi cara y mi estómago

Paro por fin, pero iba a volver hacerlo cuando los policías ya estaban aquí, yo tumbada en el suelo dolorida, sentí un olor que me sonaba... Ferran.

—Preciosa ya está—acarició mi cabeza

—Me duele—llore—no puedo duele mucho

—Ahora viene la ambulancia, tranquila—asentí

Mi madre solo lloraba mientras Tomas la consolaba y Laia... mejor ni lo digamos, creo que tuvo que ir hasta Pedri para que no llorara.

—¿Puedes sentarte?—negue

—Vale tranquila, ya está, ya están aquí—miro en dirección a los doctores

Una chica se puso de rodillas a mi lado me sonrió y empezó a mirarme, dolía mucho casi ni podía respirar me tocó la zona y chille.

—Tendremos que ir al hospital, hay algunas heridas aunque no se noten, tienes que levantarte—me aviso y negue

—No puedo, no puedo levantarme—solloroze