Eddie y Caroline son los hijos de una familia armada, abandonados por sus padres que están más enfocados en darles un buen pasar económico, parecen no caer en la cuenta de que poco a poco se sumergen en una relación extraña, intensa, y con ojos ince...
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El sonido del romper de las olas se entrelaza con el murmullo de cosas desconocidas, en la noche, el mar se vuelve atemorizante,
Eddie toma la mano de la chica y corre junto a ella por la arena, por el impulso pareciera que podrían pasar de largo al oleaje. El vestido de la chica es color negro, ajustado en la cintura y holgado hasta las rodillas. No pueden detenerse hasta llegar a la orilla del mar, Eddie no suelta su mano, la noche está cálida, aunque la brisa del mar pareciera romper la piel suave de Caroline. Una vez se encuentran ahí, se miran a los ojos, él le sonríe y ella hace lo mismo, Eddie pone sus manos en la cintura de la chica.
¿Por qué me miras así?, pregunta Caroline.
No sé qué cosa tienes. No puedo creer que me tengas de esta manera. Eres como una tormenta eléctrica, me haces sentir bien y a la vez haces que me confunda demasiado, el chico es sincero a la hora de hablar con ella.
No quiero herir tu corazón. Eso bien lo sabes, Caroline abraza su cuello. Jamás haría algo que te haga sentir mal.
¿No mentías cuando decías que me amas?, pregunta el chico.
¿Por qué te diría una mentira así de cruel? ¿Crees que jugaría con tus sentimientos?, la chica se acerca a Eddie. Quisiera estar contigo toda mi vida, sus ojos tienen un brillo especial. Odio que seamos esto.
Basta Caroline, por favor. Olvidemos esto, olvidemos el hecho de que eres mi hermanastra. Sólo no quiero que me dejes, que te alejes de mí y pienses que es mejor si estamos separados, Eddie toma su rostro entre sus manos y ella acaba con esa distancia que los separa, Eddie pasa sus manos por la espalda de la chica, sus dedos se pierden entre la tela de su vestido negro.
Es de noche, radie ronda por aquel sector, ella observa cómo Eddie se quita la ropa, quedando sólo con su ropa interior, sus pies están inmersos en la espuma del mar, su vestido negro descansa en la arena, Eddie observa la ropa interior negra de la chica, y siente angustia porque cree que Caroline es la chica más hermosa que ha visto, y él no se siente la gran cosa a su lado, aunque para Caroline, Eddie es el chico más hermoso que pisa la tierra.
Ambos se adentran en el mar, no demasiado adentro, pero el oleaje les llega hasta la cintura.
Mañana hay escuela y nosotros estamos acá, le dice ella, está aferrada al cuerpo caliente de su hermanastro.
No me importa. Estamos solos, Eddie muerde el labio inferior de la chica. Te amo, en serio lo hago.
Sé que me amas, Caroline besa su pecho.
Quisiera repetir esto mil veces más. Quisiera que nos vayamos juntos a la universidad y sigamos haciendo lo mismo. O me escaparía contigo. Me iría a cualquier lugar contigo y lo sabes , ella lo mira y le roba un beso de los labios, frota sus manos en los brazos fuertes de Eddie y apega su cabeza en él, escucha su corazón con detención, ella también quisiera todo eso con él, pero sabe que lo que sea que pase con ellos, será para mejor.
