Hermosa Destrucción

CAPÍTULO 03

-Tu igual muchas gracias por todo - Colgué. Me lleve mis manos a mi cabello peinándolo todo hacía atrás y solté un suspiro lleno de frustración

-Será el?- escucho decir a mí hermano y al voltear me doy cuenta que no estoy sola están todos están ahí de pie - No debí dejar que vinieras nuevamente

-Iba a venir quisieras o no, mí familia está aquí y ahora mi trabajo también, así qué tranquilos - dije esto y me fui a mi habitación, me senté en mí escritorio y empecé a revisar unos correos, escuché unos toques suaves en la puerta

-Adelante - la puerta se abrió y vi a Xiomara - Pensé qué era mí madre

-No, se quedaron abajo hablando con tu hermano ¿Cómo te sientes? He visto qué te refugias en tu trabajo, en los papeles y tu sabes qué tener que distraerse para dejar de pensar no es estar bien - me dice mientras se sienta con cuidado en la cama y pone una mano en su vientre

-Estoy bien o eso creo, nada está siendo fácil. A veces se me olvida qué eres Psicóloga

-Y tu única amiga, te conozco tan bien qué siento qué ya te estamos volviendo a encontrar - me dice mirándome fijamente a los ojos

-Gracias por todo, el proceso no ha sido fácil pero tampoco imposible, increíble ¿no?

-Qué?

-Que mi psicóloga se caso con mi H
hermano. Que profesional eh.. - Ella empezó a reír y negó

-Enserio nunca te vas a cansar de restregármelo en la cara mujer? Fuimos débiles pero una cosa no tiene que ver con la otra - me dice levantándome de la cama - y yo por ahí vi unas miraditas un tanto - me dice haciendo un movimiento divertido con sus manos y se fue sin decir más nada ya son más de las nueve de la noche y yo aún sigo despierta, hoy decidimos quedarnos con nuestros padres y pasar tiempo con ellos.

Sigo dando vueltas en la cama no puedo dormir como odio esto decidí levantarme y buscar algo en la cocina para comer, me serví un poco de leche en un vaso y unas galletas con chispas de chocolate y salí al jardín.
Escuché unos pasos acercarse a mí y mire en esa dirección y era mí padre

-Hola Pequeña, ¿no puedes dormir?- me dice acercándose a mí y dejando un beso en mí cabeza

-No papá y también tenía hambre ¿quieres? -pregunté y negó llevando su taza de té a su boca - Y tú qué haces acá afuera?

-Hoy tuve una cirugía un tanto complicada y me ha dejado pensando pero no es importante - dijo y me miró pasando una mano por mí cabello - Mi Rayito de sol así es que te dice tu hermano ¿no? - me dice y ríe

-Si y aún sigo sin entender, la última vez qué le pregunté recuerdo qué su respuesta fue "Porque a mi me gusta llamarte así" y eso fue hace como tres años así qué ya dejé de pregúntale

-Por tus ojos cuándo tu naciste el tenía 5 años, una mañana yo estaba jugando con el en su habitación y por la Ventana se filtraban los rayos del sol entonces el me dijo que tus ojos eran de ese color, eran como ese Rayito de sol qué estaba en su ventana y desde ese entonces el te llama así a mí me parece muy gracioso y también porque no te peinabas- me dice terminándose su té. Nadie me había contado eso y pues tiene sentido - bueno hija ya me voy a despertar deberías ir a tú cama ya hace mucho frío aquí afuera

-Lyan sale con unas cosas, qué descanses papá - me dio un beso en la frente y se fue y al rato yo hice lo mismo subí a mí habitación.

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Mi alarma sonó y salí a correr llegué a casa y fui directamente al baño. Salí y busqué entre mí ropa saqué un conjunto deportivo quería estar cómoda así qué eso me pondría además de unos tenis me recogí mí cabello en una cola alta y solo me eche un poquito de crema para hidratar mi rostro. Bajé hasta la sala y ahí están todos desayunando yo me senté y empecé a desayunar, el desayuno fue agradable entre risa.