TAEHYUNG
La estúpida sonrisa no podía desaparecer fácilmente de mi rostro.
Tenía mi brazo alrededor del cuerpo de Jennie, su cabeza sobre mi pecho y su pierna sobre la mía.
Su respiración era constante, casi como si se hubiera quedado dormida mientras yo pasaba una mano por su cabellera enredada. Cerré los ojos y el encanto de lo que paso hizo que se dibujara una sonrisa permaneciente en mis labios mientras disfrutaba de mis recuerdos.
Sus piernas abiertas, sus pequeños jadeos y gemidos y la maldita expresión de su rostro. Eso nunca lo olvidare. No es que quisiera, estaba feliz de estar plagado de la imagen perpetua. De ella.
Mis dedos jugaron distraídamente con su cabello, no queriendo pasar ni un solo segundo sin tocarla. Su cuerpo estaba presionado contra el mío, pero no tenia suficiente. No quería dejarla ir. Quería que ella permaneciera en mis brazos hasta que llegara la mañana.
O hasta siempre.
Exhalé un suspiro soñador, preguntándome si en realidad estaba durmiendo o simplemente me estaba dejando disfrutar el momento. Lamiendo mis labios, mi mano se detuvo sobre su cabeza.
"¿Qué estás haciendo?" Preguntó Jennie, frunciéndome el ceño cuando levantó la cabeza.
La molestia era clara en su rostro, pero sonreí al descubrir que no estaba dormida; simplemente lo estaba disfrutando como yo.
Sonreí y volví a acariciarle el pelo. "Lo lamento."
Jennie se burló, dejando que sus ojos cayeran sobre mis labios. "Dame un beso y te perdonaré."
"¿Dónde?" Pregunté, sonriendo mientras jugaba con las puntas de sus cabellos.
"En mis labios", declaro Jennie, su sonrisa se ensanchó cuando dejó escapar una pequeña risa.
"Cuáles-"
"En mi cara, Tae", dijo Jennie inexpresiva, pero me di cuenta de que estaba divertida por ello. Sonreí, envolviendo ambos brazos alrededor de ella para descansar su cuerpo sobre el mío. Pecho con pecho, coloqué mi mano debajo de su oreja y le di un suave beso en los labios.
Mis manos se deslizaron por su espalda desnuda, descansando en la pequeña curva de su columna justo encima de su trasero. Jennie no dejó de besarme. Colocó los codos en la cama, a cada lado de mi cara mientras sus dedos jugaban con mi cabello.
Sonreí durante el beso y sentí que Jennie hacía lo mismo. Me endurecí debajo de ella por millonésima vez, y sé que lo sintió cuando sus labios se separaron con un pequeño gemido.
Si pudiera controlarlo, lo haría, pero no puedo y Jennie me hizo sentir como si mi polla estuviera a punto de estallar durante toda la noche.
Estaba tenso por la necesidad de ser aliviado, pero no era algo que no pudiera manejar. Especialmente porque esta noche había sido todo sobre ella y yo lo prefería así. Sólo quería que ella se sintiera bien y podía estar tranquilo sabiendo que obtuve lo que quería.
Mi sonrisa se estiró aún más ante el pensamiento y me estiré para agarrar su trasero con las palmas de mis manos. No podía tener suficiente de lo suave que era su piel. O lo bien que olía. O lo bien que se sentía tocarla. Tan jodidamente perfecto y no pude entenderlo.
Jennie gimió, empujándose más hacia mí mientras se movía. "¿Tae?"
"¿Sí?" Respiré, apretando su trasero con ambas manos porque me gustaba cómo se sentía.
Gemí cuando la sentí apretarse contra mí, provocando una cantidad apenas visible de placer a través de mí y mi cabeza cayó sobre la almohada. Jennie besó el costado de mi cuello y mi respiración se aceleró cuando me dio otro beso en el mismo lugar.

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Only Her [TAENNIE]
Roman d'amour"Deja de pensar demasiado", susurró, sosteniendo mi mejilla mientras lo acariciaba con su pulgar. "Porfavor." "No puedo", admití, arrugando las cejas. "Lo lamento." "No te disculpes", dijo suavemente, sus ojos moviéndose a mis labios. "Lo estás haci...