capítulo XI

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Entro a la tienda del rey , soy consciente  de que esta en reunión  con los comandantes. Creí que no participarías  en las reuniones, al menos esa fue tu condición para ascender a Comandante si mal no recuerdo- dice el comandante Jung.

Me uniré a Maliha- digo mientras me rasco la nariz y miro al suelo. NamJoon, viene a darme de palmadas en la espalda- ya era hora.

Me deben dinero les dice Min a Park y Jeon- aposté que te casarías antes de que llegarán los del Norte, los señala con su dedo acusador. Veo como hacen sus transacciones, mientras que el rey se acerca, me toma del hombro para que nos sentemos apartados a conversar.

Tae debes hacer cambios en tu vida, en este punto es un nuevo comienzo no estarás solo, todo lo que quieras hacer debes pensar en ti y en ella, no cometas los mismos errores que yo- dice el rey y se acomoda en su asiento mientras carraspea su garganta. 

Se que es difícil este tema para SeokJin, cuando al parecer los dioses lo quieren solo, es tan triste que nadie puede hablar de ello, este es el único reino que solo tiene Rey, pero también es el mas temido, por el Linaje de los Kim, somos casi un clan maldito.

¿Entonces?- dice Nam sacándonos de este silencio doloroso,-podríamos hacerlo junto con la unión de SeoJoon, lo de ellos esta listo y es un evento de toda la aldea mataríamos dos pájaros de un tiro.

Un apresurado Eun Woo entra a la tienda- ¡Comandante!, me mira y se acerca a mi oído- acaba de llegar una comitiva de expedición traen las banderas del norte, termino de escuchar aquello y salgo disparado a recibir a la comitiva, antes de salir veo como interrogan a mi subordinado.

Un hombre grande de mirada tosca, encabeza el pequeño batallón, vienen a caballo, el rey sale detrás de mi, y los comandantes lo siguen, yo me quedo estático, se ve del tamaño de SeoJoon,  baja de su caballo y se presenta.

Saludos desde el Norte el rey Gong Yoo envía sus saludos cordiales, Lord Kim.

Primer Comandante Lee MinHo, uno de sus subordinados nos esperaba, anuncio que nuestra princesa fue rescatada por uno de sus comandantes y me ha puesto al día- dice mientras observa todo el lugar.

Sus acompañantes bajan de sus caballos, y el rey los hace pasar a su tienda con la excusa de que estén más cómodos, mientras Min se  acerca sigilosamente a mi.

Ve a hablar con tu mujer y decidan como enfrentaran esta situación, el hombre me perturba el estomago, no creo que quiera paz si alguien le quita a su mujer, piénsalo Tae ¿dejarías que ella se vaya con el?- dice serio, yo solo lo miro a los ojos con molestia.

Eso pensé- dice estrechando mi brazo, te daremos todo el tiempo que podamos, ella puede decidir por su rango, pero debe estar dispuesta, ve a casa y háblalo- dice mientras entra a la tienda del rey.

Le hago señas a Eun ¡señor!- responde, le hago señas de que este  atento a lo que pase en la tienda del rey- Entiendo, lo mantendré al tanto de todo, y yo asiento con la cabeza.

Voy de camino a casa cuando la veo caminando distraída, viene directo hacia mi, me detengo cuando me doy cuenta que esta mirando la caminata de Lola y Seo.

Ni siquiera se dio cuenta me la hecho al hombro, la llevo a la tienda, ahora que están los del Norte ella no debe salir, veo como parte del batallón del norte recorre el lugar para reconocer el terreno, es al menos lo que yo haría en territorio enemigo, no quiero que la vean, si la ven se la querrán llevar.

La dejo en la cama para poder amarrar su tobillo nuevamente, pero es evidente su molestia, los pataleos no harán que la deje salir, menos ahora, ella me cuenta todo lo que sucedió acá mientras no estaba, se que Lola es la única que podría desatar mis nudos, ella me enseño a hacerlos.

Sus caricias me toman por sorpresa,  me desespera lo sensual que es, sigo escuchándola mientras ataco su boca, no puedo evitar morder y jalar su labio, saben a gloria ERES MIA, su respuesta confirma que ella también me desea. 

Sabe como me desespera no tenerla, y aun así me quita lo que ya es mio, pero no importa, ella me pedirá entrar, porque también es adicta a mis caricias, cambia el tema hablándome de Lola y recuerdo que los del Norte están aquí por ella, ¡me la quieren quitar! y cuando escucho que quiere ir a la unión, para mi es un no rotundo.

Y las caricias quedan a un lado cuando dice todo lo que siente y todo lo que guarda, ojala también pudiera expresarme así de bien, pero de nada sirve porque la escucho, y su molestia es tanta que siento que me odia y no quiere estar aquí.

¡NO! ¡ERES MIA! ¡SÓLO MIA! es lo único que puedo decir, porque no se que mas claro puedo ser con ella, y cuando  pregunta ¿que quiero de ella? mi respuesta siempre sera la misma ¡TODO!

Ahora como le explico que ellos están aquí, esta tan molesta, que ya no me quiere oír aunque tuviera algo que decir, ella no me escuchara, ¡MALIHA!- le vuelvo a gritar.

Ellos están aquí- le digo, me ignora nuevamente, y siento un vacío cuando dice que me dejara...



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