Capitulo XIII

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Es la hora mas oscura de la noche justo antes del amanecer, cachorro esta más grande y aunque va en mi regazo voy atento a su agudo olfato, sigo las indicaciones según indique su cabeza, Eun- Woo observa impresionado al animal...

No puedo creerlo, en realizad es un sabueso- dice Eun- tratando de acariciar al pequeño lobo, casi me agarra los dedos- dice un poco asustado.

¿Que esperabas? lo asustas- me mira sorprendido, por mi respuesta.

¿Desde donde lo puedo acariciar?- barbilla, sin miedo- respondí y el rio.

Cachorro sale de mi regazo y se  posiciona en alerta, dispuesto a atacar, Eun iba a hablar pero le tapo la boca y lo agacho, no soy idiota algo no anda bien, el batallón completo baja y yo miro a donde observa mi sabueso.

Eso es, pero hago señas para que el batallón se prepare al ver que cachorro observa de Norte a Este, probablemente animales en manada, ¿de que tipo serán, grandes, pequeñas? espero que sea de las ultimas.

¡AAHHHH!- El grito de uno de los guerreros, no me desconcentra y veo los ojos de la felina, ¡Mierda son leonas!

¡LEONAS!- grita Eun

mientras yo disparo mi flecha y la leona la esquiva, alcanzo a tomar mi cuchillo, cuando ya esta sobre mi, el corte que hice deja caer todos sus intestinos sobre mi, es grande, Eun me ayuda a sacarla sobre mi cuando se desploma, por seguridad también le corta el cuello para que terminen morir.

Pensé que tendría que explicar la muerte de alguno de mi batallón, y me sorprendo cuando veo a Nam y Yoon  ensangrentados.

¡TODOS BIEN!- pregunta Nam mirándome a los ojos. Y recuerdo el grito, pero no soy el único que lo recuerda.

¡QUIEN CARAJO GRITO! ¡MUESTRATE MALDITO COBARDE!- dice YoonGi, y el batallón, entrega al infiltrado.

 ¿QUIEN ERES?- Min golpea detrás de las rodillas dejándolo caer frente a él y apuntándolo con  su cuchillo.

Me acerco a él, mientras el soldado se presenta.

Koo Gyo-hwan, perteneciente al batallón del Norte, grupo Iker- es lo único que dice.

Nam le pide bajar el cuchillo la molestia de Min es justificable, si hubieran sido mas leonas, si ellos no hubieran estado, la historia seria diferente, confió en algunos de mis soldados, pero también sé que no están aun preparados para animales tan grandes como leones, por lo agiles y  el peso.

Solo hace su trabajo- le dice Nam a Min.

Ese gusto tuyo de bañarte en sangre Tae- dice Yoon mientras me mira con recelo, y yo toco sus ropas señalando que el también tiene sangre, sigue comentando mientras caminamos al rio mas  cercano - 

No puedes compararte  claro que nos salto sangre, corte su yugular- dice mientras se limpia

Yoon escucha que  el batallón habla de como mate a la Leona- MinJae, cuéntanos a todos lo que viste, y explica con lujos y detalles todo lo que paso, exagerando cada palabra que salia de su boca - ¿entonces es mucha tu admiración hacia tu comandante?- ¡Si señor!- responde.

Tienes bueno cadetes Tae- dice Nam- invita a 5 para que participen en la fiesta de SeoJoon,  Eun ya fue invitado por el rey, no te preocupes por el.

Asiento con la cabeza, claro que tengo mis soldados de confianza, y MinJae esta en este grupo, ya llegando a la aldea casi pierdo los estribos de ver como Maliha esta dando un paseo con el maldito comandante.

¡Debes tranquilizarte!- dice sujetando mi hombro con fuerza- Tae, ¡mírame! mañana sera el día, podrás desquitarte mañana, no dejes que juegue con tu mente.

YoonGi tiene razón, aunque eso no hace que me tranquilice, y llegamos a interrumpir su grata cita. 

Maliha ¿Como estuvo tu reunión?¿tu padre se encuentra bien?¿todo en orden?- pregunta Nam

Me acerco como perro en celo y la apego lo mas que puedo a mi, y alcanzo a oler su cabello y me tranquiliza saber que no esta impregnada al aroma del Comandante del Norte, ella me quita a Cachorro y se queda con el en sus brazos, pero mi sonrisa no era notoria, hasta que veo que en el intento de tocar al animal, este le toma un dedo, y le hace un pequeño corte.

¡Vaya, vaya... un verdadero guardián!- dice MinHo- mientras se lame la sangre del dedo, supongo que nos veremos mañana en nuestro encuentro, Maliha, comandantes, disfruten su tarde.

Tomo la mano de Maliha, me despido de los comandantes, y me voy a mi tienda, mientras escucho todos los detalles de la reunión de hoy. El como esta su padre, el hecho de saber que su padre la quiere de regreso,  y las nuevas de que su padre tendrá otro hijo.

Por más que la mire a la espera de que me dijera algo en cuanto a la relación de ellos, no menciono palabra de ello, y yo tengo unas ganas de preguntar si el idiota la tomo de la mano o si intento algo inapropiado, que tipo de confianzas tienen y de imaginarlo, me hierve la sangre.

Pero mientras pienso en estas cosas, me siento en la cama, para cambiar mi ropa sucia, Maliha se acerca subiendo su falda, contoneando esas caderas, exponiendo sus sensuales muslos, subiendo a mis piernas y no puedo evitar perderme en su piel canela, sus gruesos y apetecibles labios, esa mirada desafiante, sus manos recorriendo mi cuello para tomarme y besarme con posesión, con deseo, pero me pierdo en el desespero de hacerla mía, hundirme en ella, respirarla y así me dejo llevar.


Domando FierasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora