Como me enamoré de ti

Nido de amor

¡Hola queridos lectores! Antes de comenzar con el nuevo capítulo me gustaría saber, si les gusta la idea de escribir un maratón de sus ships favoritos, y si no, pues me gustaría saber cómo les gustaría que les agradezca por seguirme en mi nueva cuenta y apoyar a mi primera historia ("Como me enamore de ti"). Bueno, sin nada más que decir, empezamos. 👏🏻😁

🌸

Luego de una gran bienvenida y de dejar todo en orden era momento de volver al mar. -¡Oye Torao! Voy a pintar tu submarino de rojo y le pondré la Jolly Roger (la calavera que los piratas colocan en sus banderas) de los Sombreros de Paja-, decía un emocionado Luffy, -ni siquiera lo pienses Luffy-ya, no dejaré que arruines mi amado Polar Tang, a mi submarino¡Nadie! Lo toca-, respondió un molesto Law. -Pero entonces ¿No viajaras con nosotros?-, pregunta Luffy mientras hacía pucheros, -claro que viajaré con ustedes, pero lo haremos en el Sunny-, Luffy no entendía nada de lo que el de iris grisáceas decía.

-Dejaras al Polar Tang solo-, opino el del sombrero de paja, -claro que no idiota, nunca abandonaría a mi hermosa nave, ella irá con nosotros, la guardaré en un lugar seguro-, una sonrisa orgullosa se dibujo en el rostro de Law. -¡¿Queeee!? Eso no puede ser ¿Como un gran barco entrará en el Sunny-, Luffy estaba más confundido que antes, -con la ayuda de un regalo que me dieron una de las tripulaciones de tu flota Luffy-ya, específicamente la Tribu Tontatta. Ellos muy amables me regalaron una hermosa flor con un increíble poder, el cual consiste en hacer miniatura a cualquier cosa que toque-, explico Law mientras sacaba una pequeña caja de su bolsillo.

-¡Increíble!-, grandes estrellas aparecieron en las pupilas de Luffy, -con esta planta convertiré al Polar Tang en miniatura hasta que sea el momento de que vuelva a navegar-, finalizó Law.
Mientras tanto, podemos ver a un nervioso espadachín de cabellera verde frente a un den den mushi caminando de un lado a otro, -tu puedes Zoro, no debes ponerte nervioso, puede ser que acepte ¿Pero si no lo hace? ¿Se enfadará? O peor, ya no querrá verme ni en pintura ¡Ah! No se qué hacer-, se decía así mismo desesperadamente, y así estuvo por unos minutos más; hasta que se armó de valor y respiro profundamente para luego tomar el den den mushi y marcar al número elegido.

-¿Si? Diga-, se escuchó una voz profunda y gruesa desde el caracol, el cual adquirió los rasgos del actual mejor espadachín del mundo. -Ho hola Mihawk, soy Zoro-, empezo a decir el cazador de piratas, -ya se que quedamos que la próxima vez que nos viéramos, sería nuestro duelo final para reclamar tu título; pero verás, yo me casaré y quisiera que me entregaras en el altar, es que, en los dos años que compartí con Perona y contigo, aprendí a quererlos como si fueran mi familia y ya no te veía como al tipo que debo derrotar, si no como a mi padre que quiero superar para llenarlo de orgullo. Así que ¿Qué dices? ¿Aceptas?-, la línea se quedó en un silencio corto hasta que... -Sera todo un honor hijo, allí estaré-.

Zoro al escuchar la respuesta de Mihawk se puso muy contento, -¡Gracias papá!-, una tierna sonrisa se dibujó en el rostro de los dos espadachines. -¡Oh! Otra cosita ¿Podrías avisarle a Perona? Es que no sé cómo contactarla y si no se entera de mi matrimonio seguro que me mata-, dijo Zoro soltando un suspiro, -claro, yo le informo-, respondió ojo de Alcón, -¡Gracias! Bueno te dejo, te enviaré la invitación luego ¡Adiós!-, se despidió el del cabello verde, -esta bien ¡Adiós! Y cuídate-, y así finalizó la llamada, Zoro con un gran sonrisa volvió con sus actividades.

Cuando salió a la cubierta del Sunny se encontró con una pelea entre su prometido y su capitán, -¡Ya te dije que no!-, Law estaba muy molesto. -¡Vamos Torao! ¡Déjame hacerlo a mí!-, Luffy seguía a Law por todo el barco, -¿Qué es lo que pasa?-, Zoro se acerco a los dos azabaches, -¡Zoroooo! dile a Torao que me deje hacer chiquito a su submarino-, decía Luffy mientras se acercaba a Zoro entre berrinches. -¡No trates de usar a Zoro-ya para tus caprichos Luffy-ya! Sabes perfectamente que no puedo negarme a lo que me diga-, Law le agarraba la camisa al menor de manera amenazadora, evitando que este llegar con su prometido.