—¿Me pasan las cosas que quedaron afuera?— pregunté mientras lavaba los platos.
—Va— dijo Tade, mientras salía por la puerta corrediza.
—¿Me vas a decir o no?— preguntaba Iván por lo bajo.
—¿Qué? ¿Qué queres saber?— dije ya con bastante impaciencia.
—Si pasó algo con Santiago o no— se levantó de hombros.
—Ya te dije que no, nene. Que denso, ¿para qué queres saber igual?— pregunté mientras seguía enjabonando los vasos.
—De chusma nomas— rodé los ojos.
—Dejate de chusma y andá a traerme lo que haya quedado en el comedor—
Una vez que me quedé sola sonreí, recordando lo que había pasado hace unas horas.
—¿querés bailar un rato?—
—dale—
Si bailamos, un rato, hasta que me dio sed y fui a buscar algo para tomar y él me acompañó.
—Tengo un poco de calor, ¿salimos un rato?—
Salimos y nos apoyados en la pared, mientras tomábamos lo que fuera que había en el vaso de Mora cuando se lo robé.
—Me re acuerdo de vos en la escuela. Me da mucha ternura—
—¿En serio?—
—Sí, me acuerdo de que tenías siempre las dos trencitas y que te faltaba un diente— solté una carcajada cuando escuché lo del diente.
—Fue culpa de Tadeo. Me había convencido de arrancarme el diente flojo, así el Ratón Pérez venía más rápido.— Me acuerdo y me duele todavía.
—Siempre fueron re unidos ¿no?—
—No sé si siempre, pero fueron mis primeros amigos cuando me mudé y coincidió que nos mandaron a la misma escuela. Siento que por eso existe como esa "conexión" y hasta el día de hoy estamos unidos— hice las comillas.— Bueno, ahora que Teo volvió no te voy a decir que es como cuando éramos chicos, pero tratamos de seguir siendo esos tres nenes—
—Que lindo eso, Fede.— me sonrió —¿Te confieso algo? Yo siempre quise ser como amigo de ustedes, pero no sé porque siempre les caí mal.—
—A mi no me caías mal— me defendí.
—Bueno, pero con aquellos dos no había chance— se rio.— También me enteré de que en la escuela gustabas de mi, y yo no tenía idea. Me dijo Gonza.—
—¿En serio me decís? Boludo era la nena más obvia de la tierra. Hasta te hice un collar con corazones y esas boludeces—
—Ah, sí. El otro día ordenando lo encontré. Que sé yo, era medio boludito— dijo
haciéndome reír un poco más. —Ahora también igual——¿Sos medio boludito?—
—Sí. Hace media hora que estamos hablando y no sé como encarar para pedirte un beso— Quedé petrificada, no sabía que decir o que hacer, y al mismo tiempo veía como algo, o más bien alguien, se acercaba por mi derecha.
—Fedeeeee— escuché a ese alguien arrastrar las vocales de mi nombre— Vení a bailar un ratito con tus amigos.— Nunca los había visto en este estado. Miento, a Iván sí, pero creo que esta vez era peor.—¿Qué hacen?— Estaba tentada. Los dos estaban bailando lento, tomados de la cintura, mientras sonaba "Baila morena".
—Bailamos—
—¿Cuánto tomaron?— me preguntó Santiago por lo bajo, al pedo, porque igual lo escucharon.
—Queti— 5 años tiene.
—Tomamos un poquito así de fernet— Confesaba Tadeo, después de ver mi cara de orto. —No sé como nunca lo había probado. Es amazing— Ya arrancó a mezclarse, la puta madre.
—Porque no vivías acá, tarado. No había chance de que tomaras ferné sino.— decía Iván como obvio al mismo tiempo que se reía. Y aunque me daba gracia, ya me estaba preocupando.
—Bueno, ya está, ¿no? No tomen más y vayan para adentro.—
—Pero Meli dijo que los había preparado para nosotros—
—Bueno, listo. Que los cuide Meli entonces—
—No puede, ya se fue— Por eso vinieron, si no seguirán boludeando con ella. Era obvio. —Me siento mal— dijo Tadeo antes de sentarse en el pasto. Los quiero matar, ¿ya les conté?
—¿Querés que te ayude a entrarlos?—
—No no no— negaba Iván con el dedo— Podemos solos— pausó, mirando a Tadeo y reformuló la frase—puedo solo.—
—Iván no podes dar dos pasos sin irte de costado, callate.——Bueno—
Primero me ayudó a levantar a Teo y lo subió hasta mi cuarto, mientras yo seguía luchando con Iván.
—¿Podés poner un poco de voluntad vos también?—
—Perdón—
—No me pidas perdón, levantate del pasto nada más— Se había encaprichado cuando vio que subía a Tadeo porque él quería "seguir de joda", y se sentó en el piso en forma de huelga.
—Perdón por interrumpirte con el bobo de Santiago. Sé que le querías dar un besito— dijo haciendo piquito.
Me reí, mientras seguía cinchándolo para que se levantara, era imposible seguir enojada.
—Por favor, levantate—
—Si me das un besito a mi también, me levanto— me guiñó un ojo como pudo. Tan de Libra que duele.
—quisieras—
—ya volví— apareció Santi por la puerta—dale que te ayudo con Iván.—
Lo subimos entre los dos, a las puteadas y quejas, y lo dejamos al lado de Tadeo para que se durmiera y dejara de decir cosas.
—Hasta mañana— les apagué la luz y cuando estaba por cerrar la puerta, Iván me chistó. —¿qué querés? Dormite—
—si quisiera— dijo, y no le entendí.
—¿qué?— No le podía preguntar de nuevo porque ya estaba con los ojos cerrados. Casi dormido, creo.
—¿todo bien?—
—Sí, ya bajo San—
—Fe, no quedan más vasos afuera— Tadeo volvió a entrar, un poco después de Iván que volvía del comedor. —¿De qué hablaban?—
—De Santiago—
—¿Por?— puso cara de asco.
—No pongas esa cara que fue él el que te acostó ayer a la noche— le recordé— Iván ya me preguntó 4 veces si pasó algo y ya le dije que no.—
—menos mal— rodó los ojos.
—nunca entendí por qué les cae mal— Sentí mi celular sonar del otro lado de la cocina, seguramente era mi madre diciendome que estaba volviendo. —Tade ¿te fijas mi celu que me sonó? Está ahí cargando—
—Voy— respondió mientras yo empezaba a enjuagar las cosas.— Dice Santiago que quiere repetir el beso que le diste.—Levanté la mirada y vi a Iván mirándome con las cejas levantadas y a Tadeo dejando el celular donde estaba.
Quizás no tendría que haber mentido.
Hola hermanasssss, como estannnnn? I'm bacccck.
Tenía muchas ganas de subir el capítulo de hoy! Me dio mucha gracia escribirlo. Ustedes que onda, como están?
Espero que les guste mucho y no se olviden de votar y comentar. Besitoooos, love you❤️
-Mica:)
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𝗵𝗲𝗮𝗿𝘁𝗯𝗿𝗲𝗮𝗸 𝗴𝗶𝗿𝗹 | 𝘀𝗽𝗿𝗲𝗲𝗻
Fanfiction𝘋𝘰𝘯𝘥𝘦 𝐅𝐞𝐝𝐞𝐫𝐢𝐜𝐚 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘶𝘴 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘰𝘴 𝘴𝘦 𝘳𝘦𝘤𝘰𝘯𝘤𝘪𝘭𝘪𝘦𝘯. o 𝘋𝘰𝘯𝘥𝘦 𝙄𝙫𝙖𝙣 𝙮 𝙏𝙖𝙙𝙚𝙤 𝘴𝘦 𝘱𝘦𝘭𝘦𝘢𝘯 𝘱𝘰𝘳 𝐅𝐞𝐝𝐞𝐫𝐢𝐜𝐚.