We are Not the Same - Tom Kaulitz +18

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2 Noviembre 2009

– ¿Entonces lo van a hacer? –

– No lo sé, o sea sí entraré con ustedes pero la idea es despues ir con Tom. –

Quedaban tres días para los EMA's y era una de las premiaciones más importantes que tendrían hasta la fecha, iban a cantar unas cuantas canciones e incluso Gabrielle iba a presentar un premio, lo que la tenía como un manojo de horribles nervios.

Lo que inquietaba la paz ajena era el tema de la relación de Tom y Gabrielle, no era secreto para nadie y era una oportunidad (en palabras de Robert) para hacer las cosas bien públicamente.

La verdad es que no se querían ir de Hamburgo, pero exceptuando la entrada y salida de la ciudad, todo fue demasiado tranquilo, ellos sabían que mucha gente los fotografiaba y miraba pero nunca fue algo que fuese invasivo.

Pero el hecho de tener que hacer todo mediático o no tener libertad de sus propias relaciónes y palabras los frustraba, Susan pensaba en lo odioso que era todo esto de con quien entraría Gab o con quién se tomaría las fotos, ya lo había anunciado en el último concierto, pero no la culpaba a ella sino a Robert, insistió e insistió que arraglasen el "desastre mediatico" que Gabrielle causó, pero todos sabían que era una estupidez, Susan era quien pensaba más eso, y no solo ahora.

[...]

Gabrielle quedó en shock al entrar al cuarto que compartía con Tom, él había salido de bañarse y no era el verlo semi desnudo lo que la dejó en ese estado, sino que no traía sus trenzas armadas.

– ¿Y eso? –

– Ah cierto, las volverán a hacer para el jueves... –

Sintió los suaves labios de su novia junto a los suyo, tomaba su cintura para tenerla cerca, pero en ese movimiento sintio como la unica tela que lo cubria caía en el piso.

Gabrielle miró hacia abajo, devolviendole una de las típicas sonrisas pícaras donde mostaba su lengua.

Fue sentado al borde de la cama, sintiendo la mano de su novia sobre su miembro.

– Creo que debería dejarme el pelo suelto más seguido... –

– Mhm... –  Y luego de ese sonido de afirmación sintió el calor de la boca de su novia envolver su pene, soltando un fuerte suspiro mientras acariciaba la cabeza entre sus piernas.

Lamentablemente los golpes en la puerta junto a la voz del gemelo menor hicieron que la pareja pausara sus acciones de manera abrupta.

– ¡Bill! –

– ¡Sabía que estaban en eso! Tom voy a usar el auto para salir con Dim. –

– ¡¿Tu auto nuevo?! ¡Tienes que tener cuidado! – Gritó Tom y luego no hubo respuesta por parte de los otros dos, al ver a su novia solo levantó los hombros en señal de indiferencia antes de abalanzarse sobre ella para que terminar lo que había empezado.

4 de Noviembre del 2009

Ambos podían darse el lujo de hacer el ruido que quisieran, tenían ahora un piso para ellos solos, abajo estaban los demás, y si escuchaban algo ya no les importaba.