¿Me amas? || Gochi ✔

[Capítulo siete]

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─ Fíjate, dos solterones, amigos de la infancia que hace mucho tiempo que no se ven- Guiñó un ojo.

─ ¡No estoy soltera!- Aulló.

─ Por ahora- La peliazul susurró creyendo que no la había oído.

─ ¡Te estoy escuchando!- Volvió a gritar con más enfado todavía. Definitivamente si lo había oído.

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─ ¿Por qué siento ardor en el pecho?

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Goku se encontraba como de costumbre en el planeta de Lord Beerus, siendo entrenado por Wiss.

Había hecho muchos progresos pero por mucho esfuerzo que haga no logrará alcanzar el nivel de Beerus, ni mucho menos el de Wiss.

Beerus estaba tumbado en una tumbona mientras masticaba y saboreaba todas las pizzas. Las cajas estaban tiradas por todas partes a lo que Wiss no pudo evitar suspirar con pesadez.

─ Dime una cosa Goku- El pelinegro miró incrédulo a Beerus─. ¿Por qué no has traído a Vegeta?

─ ¡Ah, es cierto, lo olvide!- Puso su brazo detrás de su nuca.

─ No tienes remedio. Ahora mismo voy a por él- Wiss comentó.

En unos pocos minutos el Ángel volvió a aparecer con un sujeto bajo, pelo en punta, una frente bien marcada y una seriedad inmensa en su rostro.

Goku se acercó a Vegeta entusiasmado. Hizo una gran sonrisa.

─ ¿Qué es lo que te pasa Kakarot?- Preguntó con los brazos cruzados.

─ Es que estoy muy emocionado. Sabes algo Vegeta... ¡Estoy dispuesto a superar el poder de Black Freezer!- Gritó un Goku emocionado.

─ Estamos dispuestos- Le corrigió.

. . .

Horas más tarde Wiss les había dejado descansar por algún rato, en principio estos se negaron... Estos saiyans, solamente quieren volverse mucho más fuertes, sin importarles nada ni nadie.

Vegeta miró como su rival estaba relajado y seguía sonriendo. De pronto pasó por su mente cuando Chichi estaba en su casa.

─ Ni idea de que os habrá pasado a tí y Kakarot, pero sólo te puedo decir que tu marido es un idiota total.

Aunque a él no le importaba los asuntos de otros, ¿verdad? Pero como dice el refrán "la curiosidad mató al gato."

─ Oye Kakarot- Vegeta lo llamó por su verdadero nombre, lo cual siempre hace.

Goku se giró con la ceja levantada.

─ Dime.

─ Se que suena inusual pero, ¿ha pasado algo entre Chichi y tú?

Goku lo miró inocentemente, no entendía que quería decir Vegeta, no había ningún problema entre su esposa y él, todo estaba bien... ¿Cierto?

─ ¿De qué estas hablando Vegeta? Todo está bien entre nosotros- Puso sus manos en su cintura.

─ No te creo- Dijo con voz gélida.

─ Oh vamos, ¿qué es lo que te pasa?- Dudó molesto─. ¡Ya se! ¡Chichi debe estar muy molesta conmigo!- El azabache se empezó a asustar.

─ ¡Callate de una puñetera vez y deja de ser un histérico!- Chilló como nunca.

Goku inmediatamente se calmó. Vegeta estaba muy raro, ¿por qué hacía todas esas preguntas a él que le importaba?

Goku o Kakarot se cruzó de brazos de la misma forma en la que estaba Vegeta. Giró su cabeza para otro lado.

─ Ella no sólo está enfadada- Goku volvió a girarse para mirarlo─. Mira no se que le habras hecho pero desde luego tienes que arreglarlo.

Wiss y Beerus miraron atónitos al príncipe de los Saiyans, no creían esta parte de él. Wiss se acercó a ambos entre el medio.

─ Vaya Vegeta, no esperaba eso de tí, en cuanto a tí Goku, ¿de verdad no sabes nada?

¿Que era lo que le pasaba a todo el mundo? ¿Por qué tantas preguntas sobre su matrimonio? La mente de Goku decía que todo estaba bien pero su corazón latía con mucha fuerza y rapidez, nunca antes había sentido algo semejante, ¿era acaso una señal?

Con su mano se agarró la parte de la camisa donde estaba situado el corazón.

─ ¿Por qué me siento así? Se cuestionó irritado.