Close - Minsung

Sparks

Decidieron caminar, el lugar no estaba muy retirado y a Minho le gustaba sentir el viento frío de la noche. Jisung normalmente caminaba mirando hacia abajo. No le gustaba que su mirada se pudiera cruzar con la de la gente, o simplemente iba pensando en otra cosa, pero tampoco quería que el camino hasta el lugar fuera silencioso, eso lo ponía aún más nervioso porque no quería aburrir a Minho, así que decidió intentar entablar una conversación que de pronto lo animara a hablar más, después de todo, a Jisung le gustaba escuchar y estaba dispuesto a hacerlo con el pelirrojo.

– Ammm... No sé si sea atrevido de mi parte pero el día del interrogatorio de Fefe, mientras tú no estabas pude ver una foto de unos gatos, tú también estabas en la foto. ¿Son tuyos? – esperaba no haber sonado raro. Aunque ya sabía, gracias a Chris, que Minho se desvivía por sus 3 gatitos, quería escucharlo hablar de ello.

El rostro de Minho se iluminó cuando escuchó a Jisung mencionar a sus gatitos, no es que hubiese olvidado el detalle de la conversación que escuchó accidentalmente en su oficina semanas atrás -Jisung y Felix hablaron de cómo el detective era atractivo y cómo podía tener un soft-spot al ver el retrato de sus felinos-, pero no pensó que el pelinegro lo tuviese presente. Le gustaba mirar a la gente a los ojos cuando les hablaba, a pesar de no ser muy sociable, así que volteó a mirar a Jisung quien tenía sus ojos fijos en el pavimento mientras caminaban.

– Sí, son míos. Se llaman Soonie, Doongie y Dori. – Le respondió con una sonrisa. – Me gusta adoptar y darle hogar a criaturas que lo necesitan. Son mis compañeros de apartamento, o más bien, trabajo para mantenerlos a ellos porque claramente no ayudan a pagar la renta ¿tienes mascotas? – Jisung no se veía como la clase de persona que tuviese gatos, Minho tenía un olfato para ello, y bueno, era fácil decir si alguien tenía por el pelo en la ropa.

– Sí tengo. Un perrito, se llama Bbama. Aunque ahorita está con mis padres, yo no puedo cuidarlo, pero lo quiero mucho. – Jisung había levantado la mirada cuando Minho empezó a hablar. Notó la dulce sonrisa en su rostro y todo lo que dijo sobre adoptar criaturas lo conmovió en demasía. – Y Soonie, Doongie y Dori son muy lindos, ellos pagan la renta con su belleza, – dijo dedicándole una pequeña sonrisa al mayor.

– ¿Bbama como en rizado? Debe ser muy tierno. – Le dijo. Minho era fan de los animales en general, si no se hubiese dedicado a la investigación, tal vez hubiese sido veterinario. Pero tal vez lo que le llenó un poco el corazón fue ver la sonrisa tímida de Jisung, eso lo motivó a ser un poco más abierto con sus expresiones, sabía identificar cuando alguien estaba genuinamente interesado en escuchar o hablar. – ¡Ojalá su belleza pagara las cuentas de verdad! Sería millonario. Pero sí, son la mejor compañía. – Entonces se dio cuenta que ya estaban a unos pasos del puesto de comida.

– Sí, es por lo rizado. Es un Bichon frise... Suena fancy, pero él no lo es. Y sí, es muy tierno. También es adoptado. Los animalitos son muy buena compañía, a veces lo extraño mucho. Antes solía pasar mucho tiempo con Felix, pero pues desde que inició todo con Hyunjin, ya imaginarás... Entonces paso más tiempo en casa, igual me sirve, tengo más tiempo para trabajar.

La imagen mental de Bbama hizo sonreír a Minho. Buscaron una mesa y se sentaron mientras el pelirrojo escuchaba a Jisung hablar de por qué no podía tenerlo. Al aparecer Jisung era más solitario de lo que aparentaba, eso le sorprendió a Minho, y también lo hizo sentir un poco más cercano a él.

– Siempre hay que ser responsable si no puedes responder por las criaturas. Creo que a veces soy algo injusto con Soonie, Doongie y Dori por no estar tanto en casa... ¿En qué trabajas que te mantiene ocupado? – Minho sabía un poco de la respuesta, pero siempre prefería escuchar las historias de la fuente directa, y diría mentiras si no admitiera que habían muchas cosas de Jisung que le causaban curiosidad.