Protective sister goddess doctor

Capítulo 20

   Lixi se despertó con el sol apenas asomando por el horizonte. La aldea de Jiu Luo estaba tranquila, pero la determinación ardía en los ojos de la joven. Después de asearse, decidió que era hora de buscar un maestro de arquería para Yan Yan.

   Con pasos decididos, se dirigió hacia el centro de la aldea, donde sabía que encontraría al jefe de la comunidad. Encontró al anciano frente a su casa, revisando algunos documentos.

"Jefe, buenos días. Quisiera pedirle un favor", dijo Lixi con respeto.

El anciano la miró con curiosidad. "Adelante, joven Lixi. ¿En qué puedo ayudarte?"

"Mi hermana Yan Yan expresó un deseo de aprender arquería para protegerse a sí misma. ¿Conoce a alguien en la aldea que pueda enseñarle?" preguntó Lixi.

   El jefe reflexionó por un momento antes de asentir. "Conozco a alguien, un anciano sabio y experimentado en el arte del arco. Sígueme."

   Guió a Lixi hacia una parte más tranquila de la aldea, donde se encontraron con un anciano de aspecto serio, con un arco colgado a su espalda.

"Lixi, te presento al Maestro Zhou, un hábil arquero. Él será el maestro de tu hermana", anunció el jefe.

   Lixi expresó su agradecimiento y dejó a Yan Yan bajo la tutela del Maestro Zhou. Aunque este parecía estricto, Lixi confiaba en que sería una guía sólida para su hermana.

   Después de dejar a Yan Yan, Lixi se encaminó hacia la residencia del Maestro Hong, donde continuaría su aprendizaje sobre pociones. Yao Pung, el discípulo del maestro, estaba esperando.

   Al llegar, Maestro Hong la recibió con una sonrisa amable, mientras Yao Pung, su dedicado discípulo, preparaba los ingredientes sobre la mesa.

"Maestro Hong, estoy lista para aprender sobre pociones", anunció Lixi con entusiasmo.

   El anciano sonrió amablemente. "Bien, Jiu Luo, comencemos con lo básico. Las pociones son una mezcla delicada de ingredientes. Yao Pung te ayudará a comprender la esencia de cada componente."

   Yao Pung asintió y se acercó, ofreciendo a Lixi una sonrisa amigable. "Estoy emocionado de ayudarte, Jiu Luo. Vamos a empezar con una poción curativa básica."

   Durante las horas siguientes, Lixi se sumergió en el mundo de las pociones. Aprendió sobre la identificación de hierbas, la medición precisa y la importancia de la paciencia en la elaboración. A medida que trabajaban juntos, la relación entre Lixi y Yao Pung floreció, con risas compartidas y consejos prácticos.

"Recuerda, Jiu Luo, cada ingrediente tiene un propósito específico. La coherencia y el equilibrio son clave", instruyó el Maestro Hong.

   Lixi asentía, absorbida por la sabiduría del anciano y los conocimientos compartidos por Yao Pung. Aunque recién comenzaba, se sentía emocionada por las posibilidades que se abrían frente a ella.

   En un momento, mientras preparaban una poción más avanzada, un ligero temblor en las manos de Lixi hizo que un goteo inesperado cayera al caldero. Un silencio tenso llenó la choza mientras observaban cómo la poción hacía una efervescente reacción.

"¡Oh no! ¿Qué hice?" exclamó Lixi, preocupada.

   Yao Pung, manteniendo la calma, intervino rápidamente. "No te preocupes, Jiu Luo. A veces, los errores nos enseñan más que los éxitos. Solo necesitamos ajustar algunos ingredientes."

   Lixi asintió, observando atentamente cada movimiento de Yao Pung mientras ajustaba las cantidades. A medida que él explicaba, ella absorbía cada palabra con atención, deseando comprender la lógica detrás de cada paso.

"La coherencia y el equilibrio son esenciales en la preparación de pociones. No solo se trata de seguir una receta, sino de entender la interacción de los componentes", explicó Yao Pung mientras ajustaba las proporciones.

   Juntos, trabajaron en la corrección de la poción. Yao Pung guió a Lixi a través del proceso, explicando el papel de cada ingrediente y cómo interactuaban entre sí. A medida que avanzaban, Lixi comenzó a comprender la importancia de la precisión y la atención en la alquimia.

"Ahora, intenta tú misma", alentó Yao Pung, dando a Lixi la oportunidad de aplicar lo que había aprendido.

   Con manos cuidadosas, Lixi replicó los ajustes bajo la atenta mirada de Yao Pung. La mezcla comenzó a estabilizarse, y una sonrisa de satisfacción apareció en el rostro de ambos cuando la poción adquirió la consistencia adecuada.

"Felicitaciones, Jiu Luo. Has demostrado una gran comprensión. La práctica constante te convertirá en una maestra de las pociones", elogió Yao Pung, con un brillo de orgullo en sus ojos.

   Lixi agradeció la guía de su compañero, reconociendo que aprender las sutilezas de la alquimia requeriría tiempo y dedicación. A medida que observaba la poción ahora exitosa, se sintió impulsada por un deseo renovado de explorar los misterios de la alquimia de este mundo. 

"Gracias, Yao Pung. Tu ayuda ha sido invaluable", dijo Lixi con sinceridad, mirando la poción con satisfacción.

   Yao Pung sonrió, aceptando el agradecimiento. "Es un placer, Jiu Luo. La alquimia puede ser complicada al principio, pero estoy seguro de que con tu determinación, te convertirás en una experta."

   Lixi asintió, pero luego agregó con una chispa traviesa en sus ojos: "Y cuando llegue el momento de enseñarte acupuntura, espero que estés listo para aprender."

   Yao Pung, sorprendido pero emocionado, respondió: "¡Definitivamente! Estoy ansioso por aprender de ti también, Jiu Luo."