Macarena Alvarez.

CAPITULO 11

El año se había acabado. Mañana Viernes ,comenzaría la llegada de padres que se extendería hasta el domingo, día en que tras un discurso del director, profesores y delegados de cada curso, nos iríamos 11 semanas a nuestras casa . 

 Mi plan de este último trimestre fue volver a la responsabilidad , asistir a todas las extraescolares, hablar de nuevo con mis padres cada día y apuntarme a todo lo que sabía que a ellos les haría ilusión y así me dejarían invitar a Macarena a casa durante el verano.

Mi relación con Macarena en lo único que había evolucionado era que los domingos por las noches me dejaba sobar sus tetas por encima de la ropa y rozarnos una sobre el culo de la otra, siempre con el recordatorio previo de no correrse. Así es, durante 6 meses comiéndonos más de cinco veces por día , en ninguno de ellos nos desnudamos , ni corrimos. ¿Tenía sentido algo de ésto ? En mi cabeza no. De hecho fue motivo de alguna o varias broncas . Mi inseguridad más de una vez llegaba a mi  haciéndome ver que Macarena realmente no se excitaba , que no le ponía o que los fin de semana follaba tanto que luego conmigo nada . Por que claro, en mi mente literalmente todos la deseaban.

Me encontraba sentada en el suelo de la que parecía más mi habitación que la suya, doblando las camisetas que me pasaba y metiéndoselas en la maleta. Había decidido pasar del ataque activo al pasivo y mientras ella se giraba yo me dedicaba a echar mi colonia a cada una de sus prendas, meter camisetas mías , una cajita que contenía: la entrada de la ofrenda, la única fotografía que permitió que nos hiciéramos con la polaroid de Eva y que yo había fotografiado con mi móvil, aquella pulsera con nuestras iniciales que se negaba a poner, una paloma mensajera de arcilla que el profesor me hizo el favor de hacerme y que yo tenía otra. Por supuesto un dispensador pequeño con mi colonia y mi numero de móvil el cual no me había pedido nunca Al menos al llegar a su casa se acordaría de mí.

Macarena : ¿Cómo cojones lo has hecho?.

Rei, Macarena estaba leyendo las notas que el sábado recibirán mis padres.

Martina: y mira gimnasia, Un 6 ,Macarena, y era deporte, no baile ni la movida de formar figuras. En crossfit soy capaz de hacer sentadillas con la barra y discos de 5 kilos, y hago 12 dominadas asistidas. Soy la leche. Seguro que el próximo año consigo hacer alguna con todo mi peso Ese será mi reto o quien sabe si lo consigo este verano, pienso seguir yendo al gimnasio.

Macarena: pero qué es imposible.

Martina: nada de imposible, tienes la novia más genial de...

Macarena: no somos nada , Martina .

Martina: deja de decir bobadas. En 9 días haremos 6 meses. Podríamos hacer videollamada.-ignoré su silencio y continué- Nunca vamos juntas a la villa o al pueblo,¿ por qué no vamos hoy ? y nos ponemos guapas, tomamos algo y ya vemos después que sigue...

Su mirada me dio un aviso. Un aviso que preferí ignorar , lanzarme a su boca y escapar de esa habitación antes de que dijera nada que comenzara una discusión. Este mes habíamos discutido prácticamente cada día . El problema no era hacerlo, ya nos habíamos gritado antes, pero junio era el último mes antes de separarnos y yo también participaba en el incremento de peleas por los nervios y el miedo a esas 11 semanas en las que no estaría con ella .

Debí haber aceptado la mirada pues fue sin yo saberlo el inicio de todo...