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La guerra.

Una simple palabra que abarca significados catastróficos.

Muertes, sufrimiento, miseria...

La peor manera de resolver un conflicto definitivamente es mediante un guerra. Los que vivieron en carne propia las atrocidades que implica un conflicto de esa magnitud están marcados de por vida, cada lágrima derramada y cada grito de dolor quedará grabado para siempre en su subconsciente.


5 de mayo de 2003

No sé en qué momento sucedió, desperté completamente desorientado a causa de un gran ruido, seguido del sonido de múltiples armas de fuego disparando sin cesar. Los gritos de los vecinos aterrorizados no tardaron mucho en escucharse, siendo estos una advertencia de la catástrofe que se acercaba.

Cubrí mis oídos cuando otro estruendo se hizo presente, causándome un gran dolor de cabeza. Fruncí el entrecejo y sin entender lo que sucedía decidí taparme con las sábanas y acurrucarme en la cama, así tal vez cesaría lo que sea que estuviese ocurriendo.

La puerta de la casa se abrió, y yo saqué mi cabeza de debajo de las frazadas, solo para encontrarme a mi madre, agitada y con las ropas sucias. En su cara se podía ver reflejado el terror puro.

—¡Jungkook métete debajo de la cama! —gritó atemorizada. En un principio no pude reaccionar, no sabía que ocurría así que cuestioné su orden.

—¿Pero por qué? —Mi voz sonó tan baja que incluso me costó creer que fuese audible para mi madre.

—¡Solo hazlo maldición!

Y estuve a punto de hacerlo, de no ser por el fuerte impacto que resonó contra el suelo, esta vez más cerca de la casa y sin dejarme tiempo para cubrirme los oídos, debido a eso fui víctima de un horrible dolor de cabeza.

Sentí el cuerpo de mi mamá cubrir el mío, protegiéndome de los escombros que comenzaron a caer producto de aquella fuerte explosión.

Pronto la luz desapareció, habíamos quedado atrapados debajo de aquellas piedras pero para nuestra suerte no nos habían aplastado. Mamá estuvo abrazándome un tiempo más, pero al pasar los minutos se me hizo extraño que siguiera en esa misma posición sin moverse tan siquiera un poco.

Con lentitud volteé la cabeza y sentí un líquido algo tibio recorrer mi mejilla, pero al ser tanta la oscuridad que nos rodeaba no fui capaz de reconocer qué era.

—¿Mamá?

No respondió.

—¡Mamá! —Insistí en mi llamado pero ella no parecía querer responder.Toqué todo su rostro, sintiendo un objeto filoso sobresalir de la zona de su frente.

Algo le atravesó el cráneo.

Mamá estaba muerta...

Lloré como nunca antes lo había hecho, grité hasta que mi garganta ardió y mis cuerdas vocales se desgarraron dolorosamente. Me negué una y otra vez a que aquello fuese cierto, no podría estar pasando algo como esto.

Pero el cuerpo de mi madre sin vida estaba ahí para comprobarlo, recordándome que esta no eran una de mis muchas pesadillas.

Esto era real.

Me arrastré y recosté a una de las paredes del pequeño espacio en el que me encontraba, anteriormente siendo mi cuarto, mas ahora no pasaba de un montón de escombros y polvo.

Y a pesar de lo mucho que mi garganta dolía, no pude parar de llorar, o al menos hasta que Morfeo me recibió gustoso en sus brazos y pude dormir un rato.

I Hate Loving You (Vkook) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora