[16] ~Historia de amor.

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Pensé correctamente, ese hombre está loco y abrió la puerta de golpe. Por suerte no me golpeó.

- ¿En qué necesitas ayuda? -Dijo en un tono serio -

- No puedo cerrar mi vestido, me duele si me estiro. -Le respondí- ¿Le puedes decir a la doctora o a alguna mujer que me ayude?

- Yo lo haré, ven. -Cerró la puerta-

Dí un gran suspiro, no quería que sus sucias manos toquen mi cuerpo pero que más le hacía. No quiero desobecer más, no quiero volver a estar dos semanas en la camilla de enfermería.
Caminé hacia él, me puse de lado y él cerró el cierre de mi vestido. Por los nervios ni me dí cuenta que él ya se había vestido hasta que alcancé a oler ese perfume tan delicioso que traía.

- Te miras tan linda, me encanta el vestido. Justo como pedí que te dejen. -Me dijo mientras me veía de arriba a abajo-

- Gracias. -Le respondí tímida-

- Uh, ya es hora de bajar. Seguro están por llegar mis colegas. -Me dijo-

Se acercó a mí, me ofreció su brazo y yo lo tomé, abrió la puerta y caminamos juntos hacia afuera y después hacia el ascensor, Taehyung venía detrás de nosotros y subió con nosotros al ascensor.

- Ten mucho cuidado con lo que vas a decir. Tienes permitido hablar, estará la esposa de mi mejor amigo y quiero que des una buena impresión de nosotros, solo no te pases y si me entero que le pides ayuda para salir créeme que te mato donde estés y le mando tu cabeza a tu mamá. -Me dijo y yo me asusté- Hazlo bien. Ya sabes que hay recompensas cuando haces las cosas bien y castigos cuando lo haces mal.

Yo solo asentí, tenía miedo de hacer las cosas mal pero ya estaba ahí, tenía que hacerlo.
Las puertas del ascensor se abrieron y salimos juntos, atrás venía Taehyung, justo bajamos a tiempo pues los amigos de Yoon-Gi apenas estaban entrando.

Era un chico, una mujer creo que es su esposa y una linda niña, tenía meses la pequeña. El chico se veía muy elegante, piel entre clara, ojos negros y cabello lacio en tono rubio. Ella también se veía muy elegante, era casi de mi estatura, piel clara, ojos castaños y cabello castaño y rizado. Ella traía en brazos a la pequeña, una linda niña con un vestido "elegante" para su edad.

- Park Jimin. -Mencionó Yoon-Gi- Hace cuánto que no nos vemos... -Lo abrazó y palmearon sus espaldas-

- Te ves mucho más joven ¿Te hiciste algo? -Mencionó el tal Jimin-

- Solo no tuve hijos. -Respondió Yoon-Gi burlón, yo estaba muy incómoda pues jamás lo había visto comportarse así-

- Deberías hacerlo, es lo más lindo. -Respondió Jimin sonriente al igual que su acompañante-

- Un gusto volver a verte, Soo. -Le dió un amistoso saludo de mano y acarició la mano de la pequeña bebé-

- Así que conseguiste una mujer que realmente te ama. Eso dicen nuestras amistades... -Dijo Jimin-

- Después de la muerte de mi ex pareja, ella me ayudó a levantar mis ánimos y se convirtió en la mujer de mis ojos. -Le respondió-

- Mucho gusto, soy t/n. La mujer de Yoon-Gi. -Les hice una reverencia a ambos-

- No son necesarias las reverencias, T/n. -Me dijo Jimin amable-

- Mucho gusto, T/n. Soy Soo, bueno... Park Soo. -Me dijo amable y me abrazó inesperadamente, le correspondí-

Cuando me abrazó, yo solté el brazo de Yoon-Gi. La hija de Jimin y Soo, quién estaba en los brazos de ella estiró sus brazos para que la cargue, su mamá tan linda le dijo que no me moleste pero sin miedo a Yoon-Gi le dije que estaba bien, que la podía cargar así que Soo me dió a su pequeña y le hice caricias, ella tan linda sonreía conmigo.

La hija de mi enemiga ~ Min Yoon-Gi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora