Five years without you (Camren)

Capitulo 11

El dulce sonido de la risa

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Me desperté al día siguiente con un terible dolor de cabeza, llevaba una
hora sin dormir bien y estaba exhausta. Envié varios mensajes como: "¿Quién eres?""¿Qué quieres?", "¿Es una broma?", incluso intenté llamar al
número, pero seguía llamando y saltando al correo de voz.

Mi cabeza explotaría en cualquier momento.

Me levanté lentamente, dejando que la manta se deslizara por mi cuerpo,
obligando a mis ojos a abrir un poco por la luz, y me dirigí al baño para
hacer mi higiene matutina.

Cuando me miré al espejo, me asusté por mi propia apariencia... Me veía
horrible, con los ojos hundidos, la nariz roja y la boca seca. ¿Había llorado?

Sí, pero con el tiempo aprendes a controlar el llanto, la respiración ayuda
mucho y no lloras, bueno, por fuera no... Porque por dentro te desmoronas, es horrible.

Volví a la cama y me senté, pensando en lo que haria hoy, era una linda
mañana de domingo y podría salir a caminar más tarde. Estuve un rato
mirando al vacío, distrayéndome por completo de todo, pero pronto volví
a concentrarme cuando el teléfono empezó a sonar sobre la mesa de
cristal con el nombre "Dinah" en la pantalla.

- Habla vaca.

-Vaca? Las vacas no tienen teléfonos, tía Lo.

Jadeé al instante y casi me caigo de la cama cuando escuché la dulce voz
de Mel.

- Ay pequeña, ¿qué pasó? - Traté de disimularlo - ¿Necesitas algo?

-Quería invitarte a ir al parque conmigo y con mamá hoy - dijo tímidamente- ¿Quieres ir?

Una sonrisa apareció en mis labios antes de responderle

- Claro pequeña, dale el teléfono a mamá para poder hablar con ella
correctamente.

Acordé con Dinah la hora y el parque, llevaría algunos snacks, ya que nadie
quería almorzar temprano y cuando eran las diez ya estaba frente al parque esperando mis joyas.

-¡Buenos días, tía Lo!-Dijo Mel emocionada, abrazándome fuerte.

- Buenos días, pequeña.

Me dio un beso en la mejilla y salió corriendo al patio de recreo más
cercano.

-Hola palmito,

-¡Dinah

La regañé, recibiendo un cálido abrazo de mi amiga, señalé un árbol que daba una buena vista del patio de juegos y nos sentamos debajo de él, viendo a Mel hacerse amiga de algunos niños.

-Ella es muy comunicativa, ¿verdad?
Le pregunté a Dinah, cruzando las piernas que estaban estiradas.

-Ella lo es.

Nos quedamos en silencio viendo correr a la niña, ella me recordaba mucho a Camila y ambas lo sabían, por eso ambas no dijeron nada. Mel vino
corriendo hacia nosotros diciendo que tenía hambre y le dimos un
bocadillo.

-¿Le has dicho a tía Lauren qué quieres ser cuando seas grande?

-EUJFQIUERPOBHWJGFHSJDJ.

-Hija, traga antes de hablar, que feo es hacer eso.

Mel se sonrojó y tragó, limpiándose la boca con el dorso de la mano.

- Quiero ser veterinaria como tú y mamá, salvaré la vida de los animales.
- Dijo orgullosamente tomando un sorbo de su jugo.