Capítulo. 37

109 6 2
                                    

Mitchell

_________

Nick estaba en casa de Dinah como estaba acordado, sería bueno que se
relajara y jugara un poco, Dinah tendría un poco de trabajo, pero es una gran madre, ella haría lo suyo como siempre. No es de extrañar que cuidara de todos sus hermanos.

Me pregunto si yo sería una buena madre, quiero decir, Dinah es genial, pero nunca pensé en tener hijos así que no sé cómo lo haría de todos modos,
tengo miedo de no poder hacerlo de alguna manera.

Tengo mis peculiaridades raras y todo eso, pero sería muy dulce ver a una mini Lauren corriendo por la casa riéndoseo haciendo un lindo desastre.

Tan pronto como llegué a la casa de Shay, estacioné el auto frente a su garaje y toqué el timbre, esperando solo unos minutos a que me respondiera con solo una bata blanca y una toalla en la cabeza.

- Lo siento, no pensé que llegarias tan pronto.

- No hay problema.

Simplemente dijo antes de entrar que su casa era grande y espaciosa, que le
encantaba quedarse aquí cuando Dinah venía a hacer una barbacoao algo
así

- Siéntate, me pondré algo de ropa.

- Creo que es mejor. - Dije divertida, ganándome una pequeña sonrisa de ella.

- No te contendrías, lo sé.

Asentí sonriendo mientras ella subía las escaleras rumbo al dormitorio, Shay
trató de no verse triste, sonrió mientras me miraba y hablaba en un tono tranquilo, pero su mirada estaba baja al igual que sus hombros y eso me molestó, ella no suele ser así.

Ella siempre tiene esa apariencia de
empresaria ruda o la apariencia más suave de una madre y amiga, pero
nunca asi, volvió vestida, y se sentó conmigo en el sofá y suspiró.

- Entonces, ¿de qué quieres hablarme?

- Quiero que hables, Shay, ¿qué está pasando?. - Pregunté con firmeza.

- Nada está pasando Laur..

- Sabemos que lo esta, acordamos ser honestas una con la otra, ¿verdad?
Prometí no esconderme de ti, quiero que tú hagas lo mismo, ¡vamos Shay,
mírate!

Shay suspiró derrotada y apoyó su cabeza en mi hombro antes de entrelazar nuestros dedos, un hábito que había adquirido cada vez que hablábamos de algo

- Me llamaron ayer de la policía, encontraron un documento de mi marido sobre un acuerdo con nuestra empresa, el acuerdo es muy importante y creen que con él podrán saber quién lo mató, ya que fue por ese documento
de mierda.

- Eso es bastante pesado.

- Si, pero está en un banco en Londres donde solo tengo la mitad de la contraseña, la otra mitad está con nuestro socio más importante.

-¿O sea?

- Ashley..¡Tiene que venir conmigo a conseguir este maldito documento!.

- Está bien, eso es una mierda. - Dije poniendo mi mano en mi cabeza.

- La llamé esta mañana y por primera vez no intercambiamos pullas ni nada
por el estilo, todo lo contrario, fue muy cuidadosa en hacerme sentir cómoda
y todo. Realmente apesta que ella se meta así conmigo

- Sé lo que es, pero mira, todo saldrá bien. Lo resolverán pronto y podrás
volver a tu vida y a todo. Además, conocí a Ashley y no parece tan mala.

- Espera, ¿a qué te refieres?

- ¡Oh! Es una historia divertida.

Shay se acomodó mejor en el sofá, frente a mí, pero sin soltar nuestros
dedos, incluso haciéndonos una ligera caricia, ansiosa por saber más.

- Vamos, cuéntame.

- Estaba con Camila viendo el atardecer en la playa y.. ¡Oye, deja de poner
los ojos en blanco!

- ¡Lo siento!. - Dijo divertida, finalmente riéndose de verdad.

- Bueno, continuando... Estaba en la playa con Camila cuando Ashley nos
llamó, al principio Camila quería irse, pero Ashley nos impidió seguir y nos
llamó para conocer a algunos de sus amigas y asociadas.

- ¡Déjame adivinar! Phoebe Tokin y Claire Holt.

-¡Lo hiciste bien! Ellas mismas, en fin, convencí a Camila para que fuera y latarde fue muy agradable con ellas, son buenas charlando y hablando de
todo, Camila se equivocó, pero eso no es importante. - Dijo con desdén.

- Espera, ¿qué hizo ella?

- No mucho, solo fue grosera con las chicas y conmigo.

- Ella es una idiota. - Habló con la mirada baja.

- Sé que no se caen bien, pero ¿podrían intentar entenderse? - Hablé sinceramente mientras ella me miraba con criterio - No me mires así, lo digo
en serio.

- Puedo intentarlo, pero no puedo garantizar nada, sabes que no depende
sólo de mí.

- Lo se.

Pasamos un rato hablando de temas aleatorios hasta que sentí mi celular
vibrar, indicándome un mensaje de Camila.

Idiota:- Qué te parece visitar mi casa hoy? hago pasta :)

Lauren: ¿Estás segura de que no vas a prender fuego a la casa?

ldiota:- ¿Estás dudando de mis habilidades culinarias, Jáuregui?

Lauren:- Quizás..

Idiota::(

Lauren:- Muy bien, envíame la dirección.

- Camila?

- Como lo sabes?

- Por tú cara de estúpida.

Le di una palmada en el brazo y comenzamos a reir antes de levantarme y tomar la llave de mi auto de la mesa de café, caminé hacia la puerta con Shay siguiéndome y nos abrazamos fuertemente antes de soltarme y abrirme la puerta.

- Gracias por venir, Laur.

- No hay problema, siempre podrás contar conmigo.

- ¿Incluso para favores sexuales? - Preguntó levantando una ceja.

- Ya pasamos esa etapa, Micthell.
- Dije haciendo reír a la morena.

- No puedes culparme por intentarlo.

- Es eso cierto, ¿cuando viajas?
- Pregunté recordando sobre Londres.

- Domingo por la noche.

- ¿Qué te parece volver a casa el domingo por la mañana? Ya sabes, almorzar con toda la pandilla...

- Por mí está bien, me encanta el desorden.

- Listo entonces.

Mi celular volvió a vibrar indicando otro mensaje de Camila y así me despedi de Shay y me dirigí a la casa de mi pequeña, realmente espero que no le haya prendido fuego a la casa como siempre intentó hacerlo cuando era
adolescente.

.

.

Five years without you (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora