Los entrenadores simplemente se dejaron llevar por el momento y aunque Mou se comenzaba a sentir culpable debido a la confesión que el otro había soltado anteriormente la cual era bastante sincera y bonita, y entonces el portugués arruinaba todo eso hablando tanta mierda de él frente a las cámaras y con el equipo. básicamente se sentía algo frustrado por eso
pero de todas formas lo dejó estar y prefería no pensar tanto en eso a asumir la culpa, principalmente porque le sentaba mal reflexionar en eso.
mínimo pasaron una noche algo «entretenida» si se le puede decir así, aunque las marcas que el contrario le había dejado en el cuello y otras partes del cuerpo a Guardiola no era algo que le agradara demasiado que digamos
nisiquiera sabían con exactitud cómo habían terminado en la cama, simplemente lo habían hecho en alguna especie de impulso carnal, de cualquier manera ya no era tan incómodo para los 2 estar en esa situación
esa vez despertaron juntos extrañamente, y el blaugrana fue el primero en abrir sus ojos entonces la vista lo desconcertó por unos segundos pero rápidamente recordó todo, y sonrió para si mismo ligeramente
se levantó y lo primero que notó fue dolor en su espalda baja pero no le tomó tanta importancia aunque fuera punzante y algo lacerante
fue a la cocina directamente y se dispuso a hacer un buen café para él y su amante en esa cafetera, el portugués tenía un penthouse envidiable mucho más espacioso que el del contrario, Josep miró a su alrededor distrayendose en ese pensamiento sin darse cuenta que su contrario estaba presente
buenos días el merengue abrió la conversación lo cuál desconcertó por un momento a Guardiola antes de responder
err, buenos días lo miró sonriendo ligeramente y le extendió una de las tazas ¿quieres café? dijo tranquilamente y el portugués aceptó tomando la taza con calma ¿qué tal tu noche? agregó sin hacer énfasis
mhh, bien el madridista dijo mirando el oscuro liquido ¿y la tuya?
bien respondió y de ahí su contrario no supo como contestar, todavía pensaba en lo que cometió
entonces, desayunamos allá abajo? fue lo que le atinó a decir en lo que terminaba el marrón, y en el fondo había un ligero tono de incomodidad en sus palabras que el otro no notó para nada
vale, me pinta dijo el catalán mirándolo todavía sonriendo
ya en una cafetería, ambos se sentaron en cualquier mesa y pensaron en lo que consumirían
¿entonces tienes tus boletos de avión no? preguntó José y Guardiola asintió en respuesta
ya he hecho el check-in online, y todo el antes mencionado contestó y se encontraba relajado, eso hasta que recordó cuando salía su avión y revisó el tiempo en su reloj mierd...la hora, ya es tarde para mi vuelo se levantó de la mesa y se acercó al portugués para plantarle un beso a sus labios tengo que irme
¿me llamas? dijo el madridista y Josep solo asintió y se fue velozmente con ahora la ocupación de encontrar un taxi, que lo llevara a su destino y después a su hogar
y el portugués solo se dignó a pensar aún sentado en esa mesa. pero ¿porqué se sentía así de mal y culpable?
pues porque aquel portugués días atrás había confesado frente a algunos funcionarios de prensa, no muy prestigiosos, sobre la sexualidad de su rival con el motivo de dañar su reputación
al menos hasta ese momento, no contaba con demasiada información sobre la orientación sexual de su contrario, solo sabía que le gustaban los hombres y que podía ser gay, entonces solo utilizó ese dato a su favor para hacer eso
porque ciertamente, el entrenador merengue estaba algo celoso del éxito que tenía Josep con su equipo y solo quería bajarlo unos cuantos metros de ese estado
así que en pocos días saldría ese secreto a la luz en cualquier noticia y se esparciría cuál virus
después de todo solo sabía que Pep era un maricón y ya, no que era así de especial para él
todo este tiempo había hecho una guerra en su cabeza que realmente no existía, y se sentía sinceramente avergonzado por ello
y, con suerte un cigarrillo lo sacaría de sus pensamientos por un rato.
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El Secreto De José Mourihno
FanfictionLos aficionados veían a José Mourihno y a Josep Guardiola como la rivalidad más interesante en la historia del fútbol, ¿Pero quién se hubiera imaginado que detrás de cada improperio que soltaba Mou para Peep en la prensa se traducía en un beso largo...