Pov _____
Me divertía el trabajar con Somi.
Nos hicimos grandes amigos, hoy tenía que ir a la agencia para saber su próxima agenda.
Al salir del edificio un repartidor me buscaba.
Repartidor: ¿Señor ___?
___: Si.
Repartidor: Tengo un paquete para usted, ¿podría firmar mientras bajamos su paquete?
Me entrego un papel para firmar.
___: Claro.
Cuando volvió me sorprendí bastante al ver una motocicleta.
Repartidor: Bien, la motocicleta también la enviaron con esta carta, tenga un buen día.
___: Pero yo no...
Simplemente me dejo la carta y llaves en las manos antes de irse.
Abrí el sobre y de inmediato reconocí la letra de Rose.
"____ lamento mucho todo lo sucedido, "____, lamento mucho todo lo sucedido.
Sé que he cometido errores y no hay excusa para mi comportamiento. No espero que me perdones de inmediato, pero quería expresar mi más sincero arrepentimiento.
¿Recuerdas aquella última noche en España? Bueno, pues aquí está la motocicleta que estropee aquel día..."
Sonreí al recordar aquel día, el como quería actuar valiente, pero en sus ojos podía ver que se moría de miedo.
"Entiendo si decides no aceptar mis disculpas, pero quiero que sepas que valoro lo que tuvimos y lamento profundamente haberla puesto en riesgo.
Con sincero arrepentimiento, Rose"
Guarde la carta entre mis cosas y estacione la motocicleta dentro antes de irme.
Pov Rose
No sabía si lo que habia hecho ayudaría en algo ya que no obtuve respuesta de su parte.
Al llegar a la agencia y caminar hacia nuestra sala pasamos por la cafetería, ____ estaba sentado ahí platicando animadamente con Nick.
Me puse demasiado nerviosa ya que habían sido semanas sin verlo. No sabía cómo reaccionaría ___ después de mi intento de disculpa. Me detuve un momento, tratando de controlar mis emociones antes de continuar con nuestro camino.
Lisa: Oye quita esa cara, todo mejorara te lo prometo.
Rose: Ojala fuera tan fácil.
Jisoo: Las cosas llevan tiempo... pero podríamos acelerarlo un poco.
Vi como sacaba su celular y comenzaba a llamar a alguien.
Jisoo: Hola Somi, ¿podrías ayudarnos con algo?
[...]
Rose: ¿Me explican de nuevo su plan?
Jennie: Descuida, todo saldrá perfectamente bien.
Entramos al elevador listas para irnos.
Iba viendo algunas cosas en mi celular cuando se detuvo dos pisos abajo.
___: Claro, me asegurare de que cumplan con lo que solicitamos, adiós.
Colgó la llamada y guardo su celular.
Jennie: Hola ____.
___: Hola chicas.
Jisoo: Oye Jen ¿no olvidaste algo en la sala?
Jennie: Oh es cierto, bajaremos en el siguiente piso.
Lisa: Si.
Tal como lo dijeron, el elevador se detuvo en el piso siguiente, pero cuando iba a bajar con ellas recibí una mirada por parte de Jisoo que fue bastante intimidante.
Jennie: Adiós ____.
___: Adiós Jen.
Las puertas del elevador se cerraron, dejándome sola con ____.
Aunque el plan parecía claro, habia algo en el ambiente que me hacía sentir que no tenía toda la información.
Mire a ____ por un par de segundos, lo vi bostezar y sobarse un poco el cuello.
Rose: ¿Estas descansando bien?
___: ¿Eh? Estoy bastante ocupado.
Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro, pero justo en ese momento el elevador se detuvo.
___: Tal vez solo un problema técnico, hay que descansar mientras lo arreglan.
Simplemente se sentó en el suelo del elevador.
Un poco dudosa me senté frente a él.
Nos miramos en silencio por un momento, y una pequeña sonrisa se formó en los labios de ____.
Rose: ¿Qué pasa?
___: No tenías que enviar la motocicleta.
La sorpresa se apoderó de mí al escuchar esas palabras. No esperaba que ___ mencionara el gesto que hice para disculparme.
En un movimiento algo arriesgado me acerque hasta quedar a su lado.
Rosé: Te la debía... cometí errores ____, lo sé y no hay excusa para eso... te extraño.
Era ahora o nunca, con una mano hice que girara la cabeza y lo bese, fue un acto impulsivo, pero también era la culminación de emociones que habíamos estado enfrentando.
La sorpresa inicial se desvaneció, y sentí la respuesta de ___ en el suave movimiento de sus labios. Era un beso cargado de significado, un intento de encontrar consuelo y conexión en medio de la confusión. Aunque las palabras a veces eran insuficientes, ese beso se convirtió en un lenguaje propio, un puente entre nosotros en ese pequeño espacio cerrado.
Cuando nos separamos, el elevador se reinició y las luces regresaron, revelando una nueva dinámica entre nosotros. Aunque la situación era complicada y aún teníamos mucho que abordar, el beso había marcado un giro en nuestra historia.
