Capítulo 11

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Pov Dongmin.

Miré fijamente a la beta, realmente odiaba a los betas, Kangmin no era la excepción, pero algo me impedía tratarlo como basura, estúpido lobo bipolar.

—Dongmin, ¿no deberías de estar cuidando de Sanha? —preguntó Kangmin.

—¿No deberías de averiguar quién fue el que planeó el ataque? —contesté de igual manera.

—Eso voy a hacer, pero primero necesitaba hablar con mi prima —me dijo señalando lo obvio.

—Kangmin, ¿dónde estabas?, se hace tarde y no podrás comer más al rato, mejor ve de una vez por tu comida —le dijo Sanha a Kangmin en cuanto salió a nuestra búsqueda.

Sanha era así, siempre interrumpía algún momento de tensión o incomodidad, cuando lo conocí fue en casa de Park.

"Bin me había llevado para presentarme ante él, al parecer Park era un alfa muy meticuloso en cuanto a amistades, por lo que necesitaría conocer a la futura pareja de su mejor amigo... O eso había dicho.

—Hola Park, aquí está, el amor de mi vida y el omega de mi alfa, hermoso, ¿no es así? —le dijo contento Bin, pero Park solo me miraba como si fuera un pedazo de basura.

Recuerdo que en ese momento mi omega estaba disgustado, creía que en verdad las cosas que decían en cuanto al odio de Park por los omegas era real.

—Ah, si —contestó desinteresado y volvió sus ojos hacia el computador.

Bin empezó una plática donde yo no tenía nada que ver, Park contestaba igual de interesado que antes, pero Bin no se rendía, quizá ya estaba acostumbrado a ese trato por parte del alfa.

—Minhyuk, ¿Minnie puede dar una vuelta por tu casa?, parece que se está aburriendo —le dijo Bin sorprendiéndome.

Más Park ni se inmutó y solo me miró una vez más de arriba a abajo.

—Está bien, pero no tienes permitido subir a la segunda planta —me advirtió y yo asentí.

—Ahí es donde se encuentra guardado su mayor tesoro —me comentó Bin en un susurro, pero Park lo escuchó ordenando que se callara, sin embargo Bin sonrió y me lanzó un guiño.

Yo recorrí toda la planta baja admirando cada decoración que había en cada rincón, no parecía que el alfa viviera solo, el lugar tenía un aire acogedor para el tipo de hombre que vivía en él.

Así que en mi mente formulé dos posibles situaciones, y era que o el alfa tenía alguien y no vivía solo o su decorador era un excelente artista... Yo me incliné por la segunda.

—¿Hola? —preguntó una voz a mi espalda, era una voz suave y dulce, un poco infantil, pero aún así era linda.

Volteé sobre mis talones y miré a un chico de unos 14 años, sus ojos me observaban curiosos mientras se movía con sigilo.

En el aire pude percibir el aroma a frutos rojos que emanaba el pequeño, así que era un omega.

—Hola pequeño, ¿qué haces aquí? —pregunté tratando de acercarme pero el pequeño solo sonrió y corrió al otro lado de la casa.

Mi alarma se activó de inmediato y me dediqué a perseguirlo, él solo reía y me provocaba para atraparlo. Yo estaba nervioso, ¿qué tal que el niño había entrado sin permiso?, ya que Park odiaba a los omegas, era lo más lógico que me venía a la cabeza en ese momento.

—Pequeño, no corras —le supliqué, es tan agotador, minutos después vi al pequeño demonio correr rumbo a las enormes escaleras. Me paralicé—. No subas, pequeño, por favor —le dije pero él ni se inmutó, es más, subió las escaleras mucho más rápido.

Miré a todos lados y con mi corazón latiendo a mil me subí para atraparlo y traerlo de regreso a la planta baja.

Al subir pude ver todo un pasillo lleno de puertas, el pequeño se había escondido detrás de una madera por lo que pasé disimuladamente a su lado y lo atrapé haciendo que riera.

Yo también empecé a reír por escucharlo, su risa era tan pura que mi omega se sintió muy cautivado.

—Nunca había visto a otro omega por aquí, solo a MJ hyung, ¿te quedarás? —preguntó con sus ojitos brillantes, yo iba a contestar hasta que a mi cuerpo se le drenó el color.

—¡Lee Dongmin! —gritó furioso—. Ven, ahora —dijo con su voz de mando sonando por toda la casa. El pequeño reaccionó como todo omega ante la voz y se hizo bolita detrás de la maceta.

Yo bajé como alma que me llevaba el diablo y lo ví, Bin me miraba apenado, Park se veía realmente molesto, y es que en verdad había roto las reglas.

—¿Qué te dije específicamente? —me dijo con su voz grave y enojada haciendo que se me estremeciera todo el cuerpo.

—Q-Que no podía subir —le contesté mientras mostraba mi cuello de manera sumisa, no podía evitarlo.

—Sabes el castigo que tendrás, ¿verdad? —me dijo y en ese momento quería llorar, era la muerte, había desafiado al alfa de Park en el momento que subí sin su autorización, eso solo era castigado con una pelea, y si sobrevivía no podría volver a ver al alfa de cerca o me asesinaría.

—H-Hyuk —se escuchó una voz temblorosa desde lo alto de las escaleras y Park miró cambiando sus facciones a unas de preocupación.

—Sanhie, ¿estás bien?, ¿sucedió algo? —dijo cambiando completamente y yo me congelé.

El cuerpo del pequeño bajó corriendo las escaleras para ir y abrazar el cuerpo del alfa Park mientras lloraba.

—T-Tú... —dijo con un sollozo—. L-La voz.

Park me miró enojado nuevamente pero no me moví.

—Lo siento Sanhie, no sabía que estabas cerca, no lo hice para asustarte —le dijo de manera suave mientras le acaricia el cabello.

—Hyuk, mira es un nuevo amigo, le dije que jugáramos a las atrapadas, pero yo fui muy rápido, así que me escondí detrás de la maceta para recuperar el aliento, sin embargo él me encontró —dijo señalándome y Park me miró esta vez más calmado.

—¿Es tu amigo? —me miró una vez más de arriba a abajo y el pequeño sonrió mientras me veía.

—Si, solo que no sé como se llama aún —dijo y Park miró a Bin quien se tranquilizó y me sonrió.

—M-Mi nombre es Dongmin —dije completamente nervioso al tener la mirada asesina de Park sobre mí pero el pequeño no le molestó.

—Hola Minnie, yo soy Sanha —se presentó.

—Dongmin —dijo Park y yo lo miré aún algo asustado—. Tu castigo es que cuidarás de Sanha siempre, eso es todo —dijo y caminó junto a Bin de regreso a su despacho.

Bin me levantó ambos pulgares en señal de haberlo hecho bien y sentí como tomaban mi mano delicadamente.

—Vamos a jugar —dijo con su enorme sonrisa y yo asentí."

—¿Tae, estás bien? —preguntó la voz de Sanha trayéndome de regreso al presente.

—Si, si, solo recordaba cosas —dije y Sanha sonrió.

—De acuerdo, entonces apresuremos, no quiero que se mueran de hambre en lo que queda del día —dijo mientras tomaba el brazo de Myungjun para seguir caminando.

Miré a Kangmin quien me miraba algo sorprendido pero decidí ignorarlo. Caminé de regreso junto a Sanha y a Myungjun. Todo lo que debía preocuparme era Sanha, y solo Sanha.

El omega del alfa | Rocksan/SanhyukDonde viven las historias. Descúbrelo ahora