Cap 22

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Mi vida había vuelto a la "normalidad" ahora junto a mi madre y mi pequeño hermanito quien no pudo dormir por la noche. Dormía maravillosamente
durante el día mientras yo trabajaba, pero por las noches se quedaba despierto. Mamá parecía estar en algún tipo de depresión, y cuando llegué a la puerta, ella me entregó al bebé y se fue a su habitación y lloró. La Sra. Eun dijo que era normal. Mamá sufrió un
cambió en su vida, así que no me preocupo por eso, demasiado, excepto
que yo no estaba consiguiendo nada de sueño. Mamá durmió toda la noche, y si trataba de despertarla, ella rompía en llanto. Cuando ella lloraba, el bebé lloraba, así que sólo la dejaba sola.
Él y yo nos unimos durante este tiempo. Hablé con él acerca de todo lo que no le podía decir a nadie más. Le hablé sobre la vida con nuestra madre y cómo él la amaría, pero que no espere nunca una mamá normal. Le aseguré que él estaría bien, porque yo siempre estaría ahí si me
necesitaba. Le hablé de Jk. Vacié mi alma a un bebé recién nacido, pero hizo más fácil respirar libremente de nuevo cuando hablaba sobre él. Mi hermanito, calmado, sonrió y dio una patada. A él le gustaba que yo hablara, así que lo hacía. Yo lo hacía feliz, y me ayudó a sobrellevar la situación.
No importa qué tan especial eran estos tiempos en las primeras horas de la mañana, todavía transcurrían en mi. Luché contra el impulso de arrastrarme a un rincón en el trabajo y dormir. Algunas noches, el bebé dormía dos horas seguidas, si lo ponía al lado de mi cama. Esas noches siempre funcionaba mejor teniendo por lo menos 5 horas de sueño.
Mi madre y yo no hablabamos mucho. Cuando llegaba a casa, ella se iba a
su cuarto a llorar y escuchar música de los 80’s. Siempre tomaba al bebé
antes de irme cada mañana, lo alimentaba, le ponía un pañal limpio y su
ropa para el día. La llamé desde el trabajo y le recordé acerca de la hora de
comer porque no parecía tenerlo junto. Estaba empezando a ponerme nerviosa acerca de dejarlo en casa con ella, pero me recordé que ella era la mamá, no yo.
La escuela comenzó de nuevo. Roon se había ido dos semanas antes, y yo me quedé en el jardín, saludándolo con la mano mientras se alejaba. Al principio, me entró el pánico porque me preocupaba lo que pasaría si me encontrara de nuevo en la manta oscura. Pero entonces me acordé de mi hermano, y el comportamiento inestable de mamá, y supe que ese escenario no podría suceder. Tenía alguien a quien cuidar ahora. No podía perder de nuevo. Mi vida ya no me pertenecía.
A veces, parecía que mi tiempo con Jk pasó en otra vida. Pero el recuerdo de su sonrisa y su risa me recordó lo cerca que había estado de la felicidad. Suspiré, agarré mi mochila y bajé la mirada hacia mi hermanito bebe, profundamente dormido. Dejé mi puerta abierta y lo dejé en la cuna junto a mi cama. Abrí la puerta de mamá y ella se giró, mirándome con los ojos rojos e hinchados.
Tn: Llegaré tarde si no me voy. Lo alimenté hace una hora y trae un
pañal limpio. Está durmiendo en mi habitación.
Me detuve ahí y me obligué a no darle ninguna instrucción sobre el cuidado de su hijo.
Bostezó y se estiró.
M: De acuerdo. Gracias. Sé que te he
necesitado mucho últimamente. Parece que no puedo lograrlo sola.
Sonaba casi herida.
Asentí y la dejé ahí. No sabía qué decirle porque lo que yo quería decir era: “¡Crece! ¡Tienes un bebé!” y sabía que no podía, así que sólo me fui.
Mi paseo en bicicleta a la escuela era corto y estaba ahí y en el edificio con un montón de tiempo para encontrar mi nuevo casillero y mi primer periodo de clases. La gente me miraba, y unas cuantas susurraban, pero no les hice caso y me centré en mi tarea. Recibí un casillero en la
parte superior este año en medio del pasillo. Al parecer, a los de último
año les daban una mejor ubicación de casillero.
H: Oye, extraña
Dijo una voz familiar detrás de mí y me giré para ver a Hari. No había pasado mucho tiempo con ella porque no quería
pasar el rato con su hermano y sus amigos.
Tn: Hola, Hari, ¿Cómo estás?
Ella sonrió y se encogió de hombros.
H: ¡Genial! ¡Finalmente somos de último año!
Sonreí y deseé que me importara.
Tn: Sip, finalmente de último
Sus ojos parecían simpáticos.
H: Lo siento por todo lo que pasó.
Roon me dijo algo de eso ante de que se fuera porque él quería que tuviera un ojo en ti y llamarlo si lo necesitabas.
No pude evitar sonreír ante sus palabras. Tn: Tu hermano es un muy
buen amigo a quien no merezco.
R: Si, bueno, eso sería porque desea que te preocupes por él como lo haces por Jungkook.
Se congeló y se mordió el labio mientras me veía hacer una mueca de dolor.
H: Lo siento mucho, yo... Roon me dijo que no hablara sobre Jk.
Negué con la cabeza.
Tn: No, está bien. La gente va a hablar de él y voy a aprender a lidiar con ello.
Ella asintió, pero no parecía muy segura. H: Bueno, será mejor que
vaya a clase. Tal vez te vea por ahí más tarde. Puede ser que tengamos
algunas clases juntas.
Sonreí y asentí.
Tn: Eso estaría bien.
Ella sonrió y se volteó para irse, pero se detuvo y miró hacia mí.
H: Yo, bueno... es eh... bueno no sé si esto está fuera de los límites para
hablar, pero ¿Es “Hate you” sobre ti?
Mi garganta se cerró al recordar la canción que había escuchado en
innumerables ocasiones, me acurruqué mientras los recuerdos pasaban
sobre mí. Últimamente, había dejado de escucharla porque me ponía de un
humor del cual no podía escapar. Sam me necesitaba y no podía hacerle
eso a él. Quería creer que la canción era para mí, pero no lo sabía con certeza. Conocía los acordes en los que había trabajado cuando estábamos juntos. Pero no estaba segura de si eso tenía algo que ver conmigo.
Me encogí de hombros.
Tn: No lo sé.
Ella suspiró tristemente y se fue. Me tomó un momento para calmarme mientras las palabras llenaban mi cabeza. Tuve que controlarme
y llegar a clase. Después de varias respiraciones profundas, me di la vuelta
y fui al salón 223. Empecé mi día libre este año con trigonometría. Qué
emocionante.
Después de dos clases con personas haciéndome preguntas sobre
Jax que yo no quería contestar, la idea de ir a la cafetería en donde iba a ser la fuente principal de información sobre Jk me hizo temblar. Me quedé en mi casillero más de lo necesario y luego fui a la biblioteca en su lugar. Podría comer cuando llegara a casa. Empezaría con mi tarea. Me puse en las mesas, saqué mi libro de trigonometría, y comencé a trabajar.
Mis ojos, sin embargo, tenían dificultad para mantenerse concentrados y
tenía que luchar para evitar que se cerraran.
H: ¡Tn! ¡Despierta! ¡Tn!
Levanté mi cabeza para ver a Hari
frunciendo el ceño hacia mí
H: ¿Todo bien?
preguntó, recordándome a su hermano mayor.
Me froté los ojos y asentí.
Tn: Si, supongo que tengo que dormir más.
Sabía que necesitaba dormir más. Pero no iba a hacerlo hasta que consiguiera dormir al bebé durante la noche.
H: Bueno, vamos, estás tarde para Literatura y el profesor casi no me dejó venir a buscarte. Le dije que pensabas que tu próxima clase era Español y accedió a que viniera a encontrarte.
Sonreí ante su imaginación.
Tn: Gracias.
Tomó mis libros y tiró de mi brazo.
H: No me lo agradezcas ahora. Es
posible que estemos en problemas si no te das prisa. Y deshacerse de la
mirada de “me acaba de despertar”. Hará volar mi encubrimiento.
Me froté la cara y asentí.
Primero tuvimos que ir a mi casillero y cambiar mis libros.
Por suerte, el profesor solo me dio una mirada severa, pero no dijo nada. Me deslicé en la única mesa libre, detrás de un chico alto y de cabello oscuro cuya cabeza bloqueaba mi vista del pizarrón..
La primera semana completa no fue muy bien. Sin embargo, después de quedarme dormida de nuevo en la biblioteca durante el almuerzo, me di cuenta de que iba a tener que dejar de ir allí. Me
obligué a hacerle frente a la multitud del almuerzo. En realidad, no había
sido tan malo como pensaba. Hari me guardó un asiento a su lado, y me gustaban sus amigos, me senté a la mesa y los escuché hablar. De vez en cuando, alguien me hacía una pregunta o intentaba que me uniera a la
conversación, pero mis insuficiencias sociales, mezcladas conmigo estando
agotada, no contribuían a un buen conversador.
El viernes, uno de los chicos de la escuela finalmente tuvo el valor de preguntarme sobre “Hate You” y estaba orgullosa de la forma en que lo manejé. Me las arreglé
para hablar claro a través del nudo en mi garganta. Mi respiración no llegó
a ser demasiado apretada.
En todas las apariencias externas, parecía normal e imperturbable.
Con éxito respondí
- No sé sobre quién es. Nunca la cantó para mí.
Sin ahogarme una vez.
El lunes, pasé a través de mi primer periodo sin quedarme dormida,
que resultó ser un milagro porque el bebé todavía no podía lograr obtener
ajustados sus días y noches, ni siquiera un poco. Incluso, ya le había llamado a la Sra. Eun y le pregunté qué debía hacer y me dijo que teníamos que mantenerlo más despierto durante el día. El problema con eso fue cuando mi madre quería que estuviera durmiendo, así ella no tenía que lidiar con él. Odiaba admitirlo a mi misma, pero mi madre no estaba siendo una mamá muy buena para el bebé. Principalmente lo ignoraba, y todavía lloraba con frecuencia. No podía explicarle todo eso a la Sra. Eun
porque haría que mamá sonara mal, y no me atreví a echarla abajo ante los ojos de nadie. Ella parecía tan frágil.
De todas formas, aún estaba logrando mantenerme despierta en la
escuela, y después de luchar contra mis pesados párpados durante una conferencia muy aburrida, me dirigí directamente al baño y poder
salpicarme agua fría en el rostro para despertar. Tuve que luchar contra
este adormecimiento. No iba a sacar las notas para una beca si no me
podía mantener despierta en clases. Di un paso alrededor de un grupo de
chicas para pasar por el congestionado vestíbulo, y una de ellas me señalo.
Estaba acostumbrada a eso, lo ignoré y mantuve mis ojos en el baño.
Sin embargo, una se dio la vuelta.
Ch: ¿Tn?
Me detuve y consideré mentir sobre mi nombre, diciendo que no, que
de hecho era Sun una estudiante de intercambio que no hablaba bien el
idioma. Pero en cambio, me di la vuelta para ver a la pequeña pelirroja a
quien había conocido en la fiesta a la que había ido con Jk. De inmediato me di cuenta de ese brillo hostil en su mirada.
Ch: Hola, soy Xxx. Nos conocimos en la fiesta este verano, pero dudo que te acuerdes de mí, después de todos los que
conociste esa noche.
Hizo una pausa, como si tuviera que decir algo, pero continué mirándola fijamente, a la espera de lo que ella quería conmigo
Ch:  Si, bueno, um, tengo la nueva edición de la revista xxx, y hay una foto de Jungkook con su nueva novia. Ella va a estar en su nuevo video musical... ya sabes, el que se llama “Hate You”
Entendí lo que esta chica quería ahora, y no sabía qué le había hecho para odiarme tanto. Mi garganta se secó y se empezó a cerrar. Así que decidí no responder. Ella sonrió como si estuviera contenta con mi reacción y me entregó la revista.
Ch: Los Ídols son criaturas tan volubles. Uno nunca sabe a quién van a querer después. Toma la revista, yo no la necesito.
Y con eso, chasqueó los dedos y el grupo que la rodeaba la siguió como una
escuela de peces.
Traté de tragar, pero no sirvió de nada. No lo podía manejar. El dolor volvió de nuevo y no tenía la fuerza para detenerlo. Me giré para correr, y
Hari estaba ahí bloqueando mi camino.
Y: Tienes que conseguir control sobre ti misma. Si todo el mundo piensa que puede llegar a ti mostrándote fotos de Jk con otras chicas, serás atacada por ellos.
Me acerqué a la descartada revista y la levanté en contra de mi voluntad. Ahí, en la página que tenía delante de mi, estaba Jk en una alfombra roja y en su brazo estaba una hermosa rubia con el cabello
rizado. Inhalé profundamente y me desplomé contra la pared.
Y: Maldición, Tn, ¿Qué estás buscando en eso?
Hari fue a quitármela, pero negué con la cabeza y me aferré a ella con firmeza.
Tn: No, déjame leerlo.
Sabía que lo que habían escrito en estas cosas no era verdad, pero de alguna manera quería hacerme más daño.
H: ¡No!
Hari arranco la revista de mis manos
Lo dejé pasar.
Ella la volteó.
H: Joder, por lo menos tus rizos son naturales
Dijo antes de lanzar la revista a la basura.
Cerré los ojos ante el dolor y me senté en el suelo. El manto oscuro parecía venir por mí, y sabía que iba a tener que luchar más para evitar que llegara a mí. Había paz en el vació, pero luego no sería capaz de cuidar a mi hermano si entraba en ella, y el me necesitaba. Sacudí la cabeza y me levanté rápidamente, antes de que me alcanzara. Me concentré en mi reflejo en el espejo y calmé mis funciones hasta que la mirada atormentada dejara mis ojos. Hari vino detrás de mí y me tomó del brazo.
H: Sólo fue una foto publicitaria
Asentí porque ella había tenido razón. La foto de él con la chica no había sido tan difícil como verlo tan feliz en ella. Yo también quería ser feliz. Él podía ser feliz. ¿Por qué no iba a serlo? Porque yo había sido la que amó demasiado. Sólo me llevaría más tiempo que él sonreír con tanta intensidad. Tenía que trabajar en ello. Pensando en los que me rodean,
quienes me aman tenían que ser el primer lugar para empezar. Luego
estaba mi hermanito, quien me necesitaba. Tenía que aprender a ser fuerte. Una vez había creído que era muy fuerte. Ahora, tenía que encontrar ese yo de nuevo.

Brisa MarinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora