Mastermind [Young Miko]

Capítulo seis: Lo que no pude prever

you never been with no one as nasty as me

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Es imposible

Su respuesta me deja descolocada. Ni siquiera me esforcé la mitad como en las anteriores ocasiones con mis demás diablillos. Pero no le respondo, esta conversación parece casual y juguetona. "Bueno, me alegra que tengas malos gustos en tapetes entonces" hace un puchero y me atrapa en un abrazo inmovilizando mis brazos.

"¿cómo te atreves?" rueda conmigo quedando encima y comenzando a dar pequeñas y superficiales mordidas por todo mi cuello y pecho causándome risa.

"¡basta!" intento liberarme pero aprieta el agarre aún más haciéndome más cosquillas con sus mordiditas. Muevo la cabeza buscando sus labios con los míos y la detengo en un beso, su agarre se afloja un poco y aprovecho para empujarla tomándola de las muñecas aprisionandolas sobre la cama a cada lado de su cabeza "pagarás" la diversión y sorpresa se mezclan en su mirada. Pego mis labios en su garganta succionando la fina piel, rastrillo con mis dientes el camino hasta llegar a su yugular dónde acaricio con mi lengua antes de chupar, Miko se libera de mi agarre y me abraza sosteniéndose mientras pequeños gemidos se escapan de sus labios directo a mi oído. Siento sus manos bajar su propia ropa interior tirándola en algún lado para empezar a restregarse contra mí, es entonces que dejo de lamer y entierro mis dientes en su piel arrancándole un grito a la vez que uso mi lengua para mitigar el ardor de la herida.

"¡hm!" toma mi cabeza alejándome de su piel y mirándome directamente a los ojos "jo-oder..." frunce el ceño y sonrío complacida "vale sí... me lo merezco ¿sabes lo que es esto?" estira su cuello y señala mi reciente creación, me encojo de hombros sentándome más cómoda en su regazo "me metiste colmillo" me río con más ganas, de hecho solo quise que se llevara un recuerdo mío, así como ella está dejando marcas de nuestro primer y último encuentro en toda mi piel.

Paso la punta de mi lengua por mis dientes frontales ante su respuesta "¿colmillo?" asiente sonriendo presionando mis caderas sobre su centro, empiezo a moverme casi sin velocidad.

"Me gusta...te lo iba a pedir. Oh..." cierra los ojos porque comienzo a rozar su clitoris con mi ropa interior, un dedo se escabulle debajo del satén de mi babydoll "¿hay algo que quieras-ah...que te haga esta noche?" mueve mis caderas a su voluntad e imito el ritmo, sus dedos bajan hasta mi trasero donde comienza a amasar apegándome aún más cerca a ella produciendo un vaivén, siento cómo se moja debajo mío humedeciendo mis panties, casi puedo sentir su carne a través de la tela "dime" busco en mi memoria su pregunta y lo pienso. Oh no. No me hagas hablar de mis preferencias.

"no" sentencio "yo-o..." tiro la cabeza hacia atrás cuando siento su dedo corazón colarse debajo de mi panties por atrás tanteando mi sexo "todo está bien" es lo que consigo decir. Las rodillas me tiemblan cuando su dígito acaricia mi entrada "mételo" pido en un susurro ante la expectativa.

"no" usa el mismo tono, abro los ojos observando su pecho subir y bajar pesadamente y ella mirándome fijamente "dime qué quieres que te haga" empuja su dedo golpeando mi entrada pero no lo mete realmente, solo presiona y estoy a punto de chillar y quejarme en un berrinche. Muevo hacia un lado mis panties chocando nuestros clitoris logrando que un quejido salga del pecho de Miko, aprieta los ojos y mueve sus caderas, muerde su labio un segundo antes de liberarlo y tomar un profundo respiro para luego dejar de moverse dejándome el trabajo a mí como al principio, su dedo viaja en toda mi hendidura y con su nudillo golpea mi agujero.

"por favor" repito y aleja su dedo fuera de mi ropa interior. "Ah-no" esto es frustrante, concentro mi vista hacia el techo "pégame" digo y la vergüenza calienta mis mejillas, me arrepiento al segundo dejando de moverme, no quiero mirar a Miko.