Capítulo treinta y uno: Hogar dulce hogar

2.6K 98 27
                                    

Tr(eat) your girl right

⚠️

Prácticamente la boca se me hace agua ante la proposición implícita que flota en el aire, me recompongo "bebita no es a la fuerza si lo quieres" presiono mis labios contra los suyos pero hace esto de removerse alejándose, sonrío y me empujo hacia al frente hasta caer en la cama con ella debajo mío

"n-no" pide sobre mis labios y coloca sus palmas entre nosotras. Me detengo y ella chasquea la lengua decepcionada, me inclino a la altura de su oído susurrándole, me separo mirándola expectante hasta que asiente despacio con estos ojitos cristalizados. Sonrío tomándola de las muñecas presionándolas contra la cama a cada lado de su cabeza hundiendo mi rostro en su cuello "Mi-ishka" gimotea removiéndose, la cremosa piel de su garganta me invita a rastrillar mis dientes pero me muero por hacer algo más, bajo mis manos liberándola de mi agarre hasta el borde de sus pants sin embargo debo atrapar mi labio inferior entre mis dientes evitando sonreír cuando se arrastra alejándose de mí

"Victoria..." reprendo jalándola de las caderas atrayéndola nuevamente hasta debajo mío y aprovecho en bajarle la prenda

"Por favor no...no quiero" lloriquea pataleando, niego sin creer que estemos jugando a esto, la inmovilizo con una mano y con la otra termino de quitarle las bragas

"Estás empapada" jadeo al sentir la ropa interior en mis manos, bajo mi pulgar hasta su carne arrancándole un siseo haciendo que me empuje "Vicky no lo hagas tan complicado" me quejo porque su rodilla me golpea el muslo. Me inclino para besarla y no puedo evitar sonreír por lo bonita que es "abre las piernas" pido sobre su boca, tomo sus dos muñecas con una sola mano por encima de su cabeza mientras con mi izquierda me quito los pants con algo de dificultad. Veo cómo no se resiste a sonreír cuando hago esto de abrirle las piernas con tosquedad e impaciente, atrapa su labio inferior entre sus dientes quejándose en el momento en el que acaricio su hendidura con dos de mis dedos, chupo la piel de su yugular mientras bajo sentándome en su coño "Vicky" lloriqueo "te sientes tan bien bebita" mi interior se resbala por lo mojada y caliente que su carne se siente, yo misma tiemblo un poco escuchándola chillar mientras me muevo

"¡Uhm!" el tirón en mi estómago me hace perder fuerza en las piernas pero me obligo a concentrarme y seguir con las embestidas profundas  "ah... Dios..." llora tan alto llenando la habitación

"amor" trago mis propios quejidos "shh" musito bajito, siento el sudor recorrer mi columna, su piel me quema los muslos

"no pue¡uhm! así así, justo así...qué rico" ella misma se cubre la boca mirándome con los ojos llorosos "más, voy a-ah" Cierro los ojos concentrándome para no correrme justo ahora incluso si el remolino de electricidad me golpea en el vientre bajo pidiéndome liberarse, con los gritos de Victoria cada vez que resbalo mis pliegues sobre su clitoris es prácticamente misión imposible aguantarme, libera sus manos de mi agarre débil tomándome de las caderas aumentando la velocidad de los vaivenes, mis propios alaridos mueren en mi garganta lastimándome "¡Mish-Dios...Mishka" llora sin tapujos hundiendo sus dedos en la carne de mi trasero

"mierda Victoria" me parto el labio de tanto morderlo, mi nombre saliendo de su boca con esa desesperación y vulnerabilidad me rompen por dentro, mi interior explota. Soy bañada con su esencia, líquido tibio que convierte nuestros choques en un chapoteadero cuyo ruido obsceno se mezcla con su llanto al seguir estrellándome extendiendo nuestro orgasmo, la pólvora rosa de los fuegos artificiales en mi interior llega a todas las partes de mi cuerpo, cosquilleandome y provocándome espasmos y a ella convulsiones, ni siquiera abro los párpados o me detengo cuando me abraza por la espalda acostándome sobre ella conmigo entre sus piernas dando las últimas estocadas, sus jadeos golpean mi oído haciéndome ver el cielo estrellado más brillante que nunca.

Mastermind [Young Miko] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora