En la precuela de "THE PROM: Una noche bajo Paris" Hinata, Kageyama y sus amigos se embarcan en el dilema que todo joven atraviesa al terminar la preparatoria: la universidad. Sin embargo, quizás la vida adulta no siempre resulta tan fácil como uno...
Al día siguiente el grupo alistó todas las cosas y se prepararon para regresar a casa. Afuera en la cochera, Yamaguchi ayudó a Kageyama a subir las mochilas al auto de Tsukishima.
De pronto, Yachi se acercó detrás de ellos para sorprenderles.
—¿Y bien? ¿Se divirtieron anoche?— Preguntó la rubia pícaramente.
No pudo haber peor timing para aquella interrogante.
—Yo... um...— Tadashi quería zafarse de aquella situación a como de lugar.— Debo ayudar a Hinata con la basura.
Tadashi se fue sin decir nada más dejando a sus dos amigos atrás.
Hitoka se extrañó ante su rara actitud. —... ¿acaso dije algo malo?— le preguntó a su hermanastro, este solo negó.
—Bueno, esto ya está.— Kageyama cerró la cajuela del auto y se recostó en este.
—¿Qué tienes? Te noto triste.
—Si, um... ¿crees que podamos hablar en la casa?
—Claro.— Dijo ella tratando de reconfortarle.— Llegando prepararé leche caliente para ti y chocolate para mi.
Este bufó. —Suena bien. Quizás no seas tan mala después de todo.
—¡Oye!— le dio un lapo en la cabeza a modo de protesta.
Prontamente, todos salieron y subieron a los carros luego de tomarse fotos y despedirse.
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「 𝓢𝓾𝓫𝓾𝓻𝓫𝓲𝓸𝓼 」
Luego de dejar a todos, Kageyama se estacionó frente a la pequeña casa de Hinata. El pequeño se desabrochó el cinturón, bajó sus cosas y se dispuso a caminar hacia la puerta con llave en mano. Pero se dio cuenta que Kageyama seguía recostado en la puerta de su auto, no avanzaba detrás de el como siempre.
Hinata se acerco preocupado.—... ¿No te quedas?— Preguntó triste el peli naranja.
Kageyama negó levemente. —Lo siento, debo ir a casa ahora. Quizás mañana pueda pasar por ti, ya sabes, hacer todas las cosas que nos quedan por hacer antes de que...
El contrario asintió. —Si... okay.
Hinata se acerco hacia el y le dio un beso, Kageyama tomaba su cintura con una mano y la otra la introdujo en el bolsillo trasero del pantalón de Hinata, acercándolo mas a el. Pero el beso no denotaba pasión como siempre, fue mas corto, con ligeros toques de melancolía en el.
