Nunca hubo otra, weasley

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-¡están riquísimas hermione!- adulo, mientras a la chica miraba apenada.

-a mi me saben igual..- dijo el de lentes para sentir la mirada de la chica -digo, ¡son buenas!

-bueno, iré a dormir que descansen- murmuro la chica mientras caminaba fuera del lugar, no sin antes mirar de reojo al pelirrojo.

-vamos, ron, nosotros igual debemos...- miro a su amigo el cual al parecer se quedo dormido -¿ron?- lo movió, al parecer un ronquido salio de el junto a un suspiro -¡ron!- pero el no respondió, rendido suspiro para jalar a su amigo por las escaleras.

-¡oye, harry!- llegaron los gemelos, mirando como llevaba el cuerpo de su hermano menor arrastrando.

-¿lo has matado?- pregunta con burla fred, al ver que el otro seguí dormido sin despertar.

-se ha quedado dormido de la nada- responde con simpleza mientras george lo aparta para agarrar los brazos de su hermano menor y mirar a su gemelo.

-vamos, que si pesa- apuro george, para ser ayudado por su gemelo que agarro de las piernas a su hermano menor -que mal que no tengamos tinta.

harry los siguió para verificar que los hermanos de su amigo no le hicieran nada mientras se encontraba en ese estado, pero no pudo detener que al llegar a la habitación lo tiraron a la cama, pero cayendo mal rodo, cayendo al suelo.

-¿que le dieron?- pregunto con curiosidad george, para que está ves lo acomodaran bien en la cama, ya preocupados por su condicion.

-nada..

-bueno, no es para tanto, ¡vamos!- dijo fred, para jalar a su gemelo, ya que había una broma en su cuarto la cual no debían perderse por ningún motivo.

harry mirando a su amigo, lo cobija ignorando su estado, tal vez tenia demasiado sueño, por las pesadillas que parecía tener casi siempre por las noches sobre las arañas, así que se acostó en su propia cama para dormir, su amigo necesitaba descansar.

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los rayos de sol se mostraban por las ventanas de la torre Gryffindor, harry se levanto rápidamente, agitado mirando el sol que se mostraba por la ventana, se di cuenta que de nuevo llegarían tarde a la clase de encantamientos, fue rápido a la cama de su amigo que necesitaba de ayuda para poder despertar casi siempre, la causa de que llegaran tarde muchas veces.

-¡ron!¡despierta!¡nos hemos quedado dormidos!- movió su hombro mientras miraba donde había puesto sus cosas, mirando a su amigo de nuevo el cual no respondió, estaba quieto como una figura de cera, el chico suspiro cansado pensando que era una broma -¡ron!, no es momento para tus bromas- pero de nuevo no responde, lo sacude de nuevo con fuerza pero el tacto de sus dedos con su piel se siente frio. 

traga, siente un nudo en la garganta, examinando su rostro, el cual se encontraba mas pálido de lo habitual en ese momento llama su atención, con su mano temblando acerca sus dedos a su nariz, se aleja de golpe cuando no lo siente respirar. 

-no, no puede ser..- miro con temor el cuerpo de su amigo fiel quien siempre estuvo con el desde el primer día, su amigo leal, grita aterrado ante lo que ven sus ojos, como un acto de reflejo busca su varita, busca algo que pueda ayudar a su amigo -no.. ¡esto no puede estar pasando!- cae de espaldas no queriendo mirar el cuerpo de su amigo, las lagrimas no tardan en salir, siente impotencia y un dolor desgarrador mientras grita y por fin se acerca, toma sus hombro y los sacude de nuevo -¡no puedes!¡vamos, amigo!¡abre los ojos!- pide una y otra vez para levantar su cuerpo y abrazarlo -¡por favor!

los gemelos y ginny quien se encontraban en la sala común se sobresaltan al escuchar los gritos de harry, lo cual rápido subieron a ver lo que estaba pasando, se encontraron a, harry, abrazando el cuerpo de su hermano, mientras lagrimas recorrían sus mejillas, no paso desapercibido ver que su hermano no se movía.